Kevin Kaarl y la nostalgia de los chicos de rancho: ¡°Se me da mejor componer sobre tristeza¡±
El artista publica su cuarto disco, ¡®Ultra sodade¡¯, producido por su gemelo Bryan, un ¨¦xito de la m¨²sica independiente con el que recorrer¨¢n Am¨¦rica y Europa este a?o


Kevin y Bryan son chicos de pueblo. Dos gemelos de 24 a?os de Meoqui, un pueblito de Chihuahua de ambiente ranchero donde puedes caminar a todas partes, con sus vaqueros, su ganado, sus campos de cultivo, su r¨ªo. Los hermanos son gente tranquila, ¡°campirana¡±, las prisas les agobian. Por eso no terminaban de encontrarse a gusto en su adolescencia como miembros de una orquesta de banda sinaloense, donde sobresal¨ªan por t¨ªmidos y callados, algo raros, con gusto por grupos de folk extranjero poco populares por esos rumbos. Y por eso uno se pregunta qu¨¦ tal reaccionar¨¢ ese car¨¢cter relajado el mes que viene, cuando empiecen una adrenal¨ªnica gira con m¨¢s de medio centenar de fechas por Am¨¦rica y Europa para presentar Ultra sodade, el cuarto disco como solista de Kevin Kaarl, el primero producido por Bryan y grabado en su casa, que acumula millones de escuchas desde que fue lanzado el d¨ªa de San Valent¨ªn, n¨²meros dif¨ªciles de alcanzar para los artistas, como ellos, independientes.
Los gemelos est¨¢n recostados en el sof¨¢ de un hotel de Ciudad de M¨¦xico la ¨²ltima tarde de febrero, a contraluz del sol que se cuela por un gran ventanal a sus espaldas. Los dos llevan gorra, visten sencillo y parecen algo aburridos despu¨¦s de todo el d¨ªa encerrados en esa habitaci¨®n que flota a unas cuantas decenas de pisos sobre el Paseo de la Reforma, donde uno a uno han recibido a un s¨¦quito de periodistas para promocionar el disco. Kevin habla como canta, con una voz profunda, c¨¢lida y arrastrada, con fuerte acento del norte. Bryan se mantendr¨¢ m¨¢s callado durante la conversaci¨®n, e intervendr¨¢ de vez en cuando para apuntalar el relato de su hermano.
La m¨²sica los rond¨® desde ni?os. Su abuelo les regal¨® una guitarra cuando ten¨ªan seis a?os. Kevin gan¨® un concurso en la escuela. ¡°Estaba chiquito, cantaba feo, pero daba ternura¡±. Poco despu¨¦s se unieron a la banda municipal, donde Kevin tocaba la flauta travesera y Bryan, la trompeta. Pasaron tambi¨¦n por el coro del colegio: algunos de sus primeros recuerdos en la m¨²sica son en m¨ªtines del PRI, cantando el himno nacional o boleros de Los Panchos, ¡°con muchos ni?os, pura guitarra y voces¡±. A los 10 a?os, entraron a la banda sinaloense. Recuerdan pasar la madrugada del D¨ªa de la Madre dando serenatas por las calles a tantos pesos por canci¨®n, pero, sobre todo, las fiestas en antros, ¡°m¨¢s desmadrosas, de buchones, de gente un poquito ah¨ª medio peligrosa¡±, en las que les contrataban por horas y no les dejaban irse.
No era el h¨¢bitat natural para dos preadolescentes. ¡°No era algo normal para un ni?o, pero te lleva a tener cierta experiencia¡±, reconoce Kevin, noches y noches sobre las tablas antes de que les saliera la barba. El ambiente tampoco era el mejor: los dos recuerdan lo ¡°t¨®xico¡±, las bromas crueles constantes, los egos y envidias, el sentir que ese sentimentalismo que a?os despu¨¦s les ha hecho famosos all¨ª estaba fuera de lugar y era motivo de humillaci¨®n. Kevin no aguant¨® el desgaste y lo abandon¨® a los 14, asqueado con la m¨²sica. Bryan todav¨ªa sigui¨® cuatro a?os m¨¢s, hasta los 18.

Durante unos a?os, Kevin persigui¨® otros proyectos. Quer¨ªa ser director de cine o fot¨®grafo. Estudi¨® comunicaci¨®n en la universidad, pero lo dej¨® a los tres semestres. Para esa ¨¦poca, los corridos tumbados empezaban a pegar. A Bryan le gustaba hacer la segunda voz, as¨ª que le ped¨ªa a Kevin que hiciera la primera. Versionaban a Ariel Camacho y Christian Nodal, se grababan y luego lo sub¨ªan a sus redes sociales. Kevin pens¨® en componer un tema propio para as¨ª poder dirigir el video, que era lo que realmente le mov¨ªa en ese momento.
La segunda canci¨®n que cre¨® y la primera que hizo p¨²blica, Amor viejo, funcion¨® bien en internet. ¡°Dije: ¡®Va, chance y me va bien en la m¨²sica¡¯, y poco a poco fui dejando la idea de ser director de cine, nunca dirig¨ª ese video musical que quer¨ªa hacer¡±. Sus tres primeros discos, Hasta el fin del mundo (2019), San Lucas (2019) y Par¨ªs, Texas (2022) los trabaj¨® en solitario. Kevin compone solo, en su cuarto, e intenta que su m¨²sica transmita la intimidad de estar tumbado con ¨¦l en la cama mientras rasguea la guitarra, quiz¨¢ con una luz anaranjada y vinilos esparcidos sobre el colch¨®n, como en la portada de Ultra sodade.
Morna chihuahuense
Y esta es la primera vez que graba as¨ª, con un productor. Si ya de por s¨ª es dif¨ªcil tener a alguien ajeno opinando sobre qu¨¦ agregar y qu¨¦ quitar a tus canciones, la cosa se complica un poco m¨¢s si esa persona es tu hermano. ¡°No quiero que nadie mueva cosas ni meta sonidos que tal vez no van conmigo. Somos gemelos, hemos estado toda la vida juntos, y s¨ª batallamos a veces, s¨ª hubo discusiones en el estudio por lo tercos que somos, pero siempre a los cinco minutos ya estamos bien. Me gust¨® mucho el trabajo que ¨¦l [Bryan] hizo como productor, meti¨® demasiados sonidos muy buenos y siento que el ¨¢lbum no hubiera quedado igual sin ¨¦l¡±. Bryan se quita m¨¦rito: ¡°Lo que puedo decirte que hice al 100% fue la mezcla y la edici¨®n. La producci¨®n yo creo que fue un 50-50 Kevin y yo¡±.
La idea de Ultra sodade naci¨® un d¨ªa en el coche con la novia de Kevin, Ashley. ¡°Ella escucha much¨ªsima m¨²sica, pero en exageraci¨®n, todos los d¨ªas descubre nuevas canciones. Si se pone a reproducir su lista te vas a topar las canciones m¨¢s extra?as que vas a escuchar en toda tu vida, pero tambi¨¦n unas canciones muy bonitas, g¨¦neros que ni siquiera conoc¨ªas¡±. Por los altavoces sali¨® la dolida e inconfundible voz de Ces¨¢ria Evora, la reina de la morna de Cabo Verde, entonando Sodade. Kevin se prend¨® de la morna, de aquel canto que transpiraba melancol¨ªa. Decidi¨® redoblar la apuesta y hacer un disco conceptual entero sobre el desamor y la ruptura. ¡°Yo tengo pareja y estoy feliz con ella, pero aun as¨ª termin¨¦ componiendo un ¨¢lbum hablando totalmente de lo contrario¡±.
¡ª?No se enfad¨® ella?
¡ªF¨ªjate que s¨ª, no lleg¨® a enfadarse, pero s¨ª a quedarse pensativa, como: ¡®?Por qu¨¦ escribiste esto? ?Tal vez es lo que piensas que va a pasar con nosotros?¡¯. Pero al final entendi¨® que a m¨ª se me da mejor componer sobre tristeza, es un campo m¨¢s abierto donde puedo usar m¨¢s palabras y donde puedes desahogarte mejor.
Quiz¨¢ tenga algo que ver con la depresi¨®n cr¨®nica que Kevin sufre desde 2015. ¡°Era como estar viviendo sin vivir, como estar muerto, yo me sent¨ª muy muerto en esos tiempos. Y tuve que andar como perdido un buen rato¡±. De la peor ¨¦poca, naci¨® Par¨ªs, Texas. Ahora, dice, est¨¢ mejor gracias a la terapia y la medicaci¨®n. ¡°Pens¨¦ que no exist¨ªa esta parte de la vida, yo no sab¨ªa que se sent¨ªa realmente estar activo y presente. He logrado disfrutar. Es una vida muy impredecible. Suceden todo tipo de cosas y te dan muchas ganas de hacer de todo y sientes que tienes en tu mano el poder de vivir¡±. Por el momento, la carretera y dos continentes los aguardan. Y si aquello no termina de funcionar, Bryan lo tiene claro: siempre les quedar¨¢ el pueblo.
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