Deslavazado y repleto de ocurrencias: el debate presidencial como un juego de Tetris

Como caen las piezas del Tetris, cada una de forma y color distintos, as¨ª se han sucedido las intervenciones de los candidatos presidenciales en este ¨²ltimo debate previo a las elecciones del 2 de junio. Y tan r¨¢pido que no hab¨ªa c¨®mo encajarlas. Una pieza: ¡°No se atreven a hablar del aborto y la marihuana¡±, dec¨ªa el aspirante de Movimiento Ciudadano, Jorge ?lvarez M¨¢ynez. Otra pieza: ¡°Llevaste una falda con la Virgen de Guadalupe, a pesar de que no crees en ella ni en Dios¡±, soltaba la panista X¨®chitl G¨¢lvez. Siguiente pieza: ¡°En la guerra contra el narco, Calder¨®n dio permiso para matar¡±, remataba la morenista Claudia Sheinbaum. Un desconcierto. Los candidatos se portaban como en esa mesa familiar donde el padre y la madre est¨¢n enfadados y usan a los hijos para transmitir sus mensajes: cari?o, ?podr¨ªas decir a tu padre que deje de sorber la sopa? As¨ª, sin mirarse, se dirig¨ªan sus cr¨ªticas los aspirantes presidenciales.

M¨¢ynez llegaba dolido del tercio de varas al que le someti¨® la oposici¨®n durante la semana pidi¨¦ndole que declinara y se revolvi¨® contra la candidata X¨®chitl G¨¢lvez y contra los partidos que representa. Varias veces mencion¨® al expresidente Fox, a los gobernadores ¡°corruptos¡± del PRI y al innombrable cartel inmobiliario, donde m¨¢s duele a la coalici¨®n opositora en la capital. Incluso reproch¨® a G¨¢lvez que defienda que a ella no le manda ning¨²n hombre mientras acusa a Sheinbaum de dejarse gobernar por el presidente L¨®pez Obrador. G¨¢lvez no solo dijo eso, tambi¨¦n asegur¨® que la candidata Morenista ¡°odia a las feministas¡±. Al parecer no le impresion¨® para nada el traje morado-mujer que llevaba su contrincante.

G¨¢lvez mencion¨® de nuevo la casa de la candidata, vino a decir que se hab¨ªa robado el predio entero, acus¨® al dirigente de Morena, Mario Delgado, de un fraude con el huachicol, al gobierno, de haber dejado morir por incompetencia a 300.000 personas durante la pandemia; y volvi¨® a insistir en que Sheinbaum era una ¡°narcocandidata¡±. ¡°Los mexicanos no nos merecemos un debate de calumnias, entiendo la desesperaci¨®n del PRIAN, pero no comparto sus m¨¦todos, esto es para hacer propuestas¡±, rega?aba Sheinbaum.

Y rega?aba tambi¨¦n una de las moderadoras, porque G¨¢lvez us¨® un libro en sus intervenciones. ¡°Est¨¢ prohibido¡±, le dijo. Reglas y m¨¢s reglas, todo eran reglas en el debate. Los moderadores hicieron unas intervenciones largas y cargadas de una did¨¢ctica cuasi infantil para explicar al ciudadano qu¨¦ es la pol¨ªtica social, por ejemplo, como si no supieran.

Como en otras ocasiones, el candidato naranja sacaba a relucir los defectos de unos y otros, con un ejemplo singular: ¡°Conmigo no tienen que preocuparse de qu¨¦ Garc¨ªa es peor, si Garc¨ªa Luna o Garc¨ªa Harfuch¡±, en referencia a dos secretarios de Seguridad, el primero, de tiempos de Calder¨®n, en la c¨¢rcel en Estados Unidos; el segundo haciendo campa?a por Sheinbaum, pero tambi¨¦n con alguna mancha en su expediente por el caso Ayotzinapa, los malogrados estudiantes de la Escuela normal guerrerense.

Con estudiantes empez¨® Sheinbaum su discurso, porque el debate se celebraba en un centro universitario de Tlatelolco, donde tuvo lugar la terrible matanza de decenas de ellos en 1968. Le serv¨ªa para recordar los tiempos m¨¢s oscuros del priismo y para destacar su propia lucha estudiantil, un asunto del que ha hecho bandera en ocasiones. G¨¢lvez contraatacaba sacando su imagen de mujer trabajadora: ¡°Cuando t¨² ten¨ªas 10 a?os y estabas en clase de ballet yo ya estaba trabajando¡±. Recurri¨® de nuevo a su experiencia como empresaria, capaz de crear empleo, y a su imagen de mujer ¡°con car¨¢cter para enfrentar a los delincuentes¡±. ¡°?C¨®mo vas a tener car¨¢cter para enfrentar la delincuencia si llevas a los delincuentes en tus listas?¡±, le solt¨® M¨¢ynez de inmediato. No dejaba escapar una. Si Sheinbaum dec¨ªa que el PRI y el PAN tienen m¨¢s candidatos presos y pr¨®fugos que en funciones, G¨¢lvez contestaba que esos gobernadores ¡°corruptos¡± son los que el Gobierno hace embajadores. Y M¨¢ynez entraba r¨¢pido al rebote: ¡°Corruptos del PRI, efectivamente¡±.

M¨¢s piezas del Tetris: M¨¢ynez se decantaba de repente por un sistema parlamentario: G¨¢lvez sacaba a relucir al feminicida de Iztacalco, M¨¢ynez planteaba cambiar el eje de las relaciones internacionales llev¨¢ndolo a Brasil, Sheinbaum propon¨ªa eliminar a todos los plurinominales y negaba que quieran cerrar las iglesias, mientras a G¨¢lvez se le antojaba en ese momento hablar de las madres buscadoras... Y M¨¢ynez: ¡°Vamos a poner a M¨¦xico de pie en un mundo de cabeza¡±. Era el encuentro, por momentos, el que no ten¨ªa ni pies ni cabeza, es decir, como todos los anteriores. Si este art¨ªculo les parece deslavazado, ni se imaginan c¨®mo fue el debate. Lo mejor es que fue el ¨²ltimo, para alivio de los candidatos y de la ciudadan¨ªa entera. Ya falta menos para votar.

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