La oposici¨®n mexicana se desinfla en tres actos

La oposici¨®n se deshilacha. El arranque del a?o ha mostrado cu¨¢n inmaduros est¨¢n los liderazgos de las opciones partidistas que se autonombran como adversarias del presidente L¨®pez Obrador. En tres actos, cual si se tratara de una obra f¨¢rsica, se puede ilustrar este desmadejamiento de quienes buscan retar a un gobierno arrasante.

Primer acto. El PRIAN toma todo... y hasta a los de casa desde?a.

Acci¨®n Nacional y el Revolucionario Institucional han decidido que el futuro es cupular. Anunciaron que sus compactas y refractarias dirigencias decidir¨¢n el reparto de candidaturas. Al aproximarse la gran batalla electoral muestran que eso de dialogar con externos, incluido el PRD, est¨¢ bien, pero sin comprometerse de antemano a ceder.

El Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica ha sido la primera v¨ªctima del nuevo acuerdo bipolar entre el dirigente panista Marko Cort¨¦s y su par priista Alejandro Alito Moreno. Al PRD lo madrugaron en el anuncio del reparto de decisiones para las candidaturas, releg¨¢ndolo a un papel testimonial. De que la partidocracia es brava¡­

Y si te vi, no me acuerdo, parecen decirle Cort¨¦s y Alito a los grupos de ciudadanos que insisten en plantear que se forme una gran coalici¨®n opositora. Si en el 2021 el beneficio fue mutuo, les reiteran los dirigentes con sus hechos, ahora esp¨¦rame tantito porque en 2024 me juego la chamba y primero el hueso, y luego el compromiso democr¨¢tico.

Esas son las prendas que hacia afuera exhiben las dirigencias de los dos partidos de oposici¨®n m¨¢s importantes: agandallamiento de las decisiones, un primero nosotros y luego ¡ªacaso¡ª ustedes. La crucial elecci¨®n para renovar Presidencia de la Rep¨²blica y Congreso recae en quien se comporta como crupier que quiere para s¨ª los ases.

Y hacia adentro de sus organizaciones la cosa no pinta mejor. El caso m¨¢s emblem¨¢tico se lo lleva el PRI, que la semana que concluye dio un espect¨¢culo de insolvencia institucional digno de una grilla porril de escuela secundaria (con el perd¨®n a quienes hacen pol¨ªtica en las secundarias por compararlos con Alito y el senador Miguel ?ngel Osorio Chong).

Ambos dirigentes priistas profundizaron el encono que se tienen desde que termin¨® la presidencia de Pe?a Nieto. Como se vio, no pueden estar juntos en el mismo sal¨®n y as¨ª quieren convencer de que est¨¢n a la altura del reto electoral donde la oposici¨®n se promover¨¢, frente a AMLO, como garante de tolerancia, madurez y pluralidad.

Lo de Alito reventando la plenaria de los senadores priistas, lo de Osorio abandonando ese c¨®nclave, y lo de ambos llen¨¢ndose de injurias en la prensa muestra que en el tricolor el primero tendr¨¢ el control pero no tiene la autoridad, y el segundo tampoco ha podido zafarse de la trampa de ser visto solo como un rebelde sin causa ni capacidad.

El espect¨¢culo que dan el exsecretario de Gobernaci¨®n y su expupilo renueva los temores de que el PRI no est¨¢ listo, y no lo estar¨¢ en el 2024, para transitar a un escenario donde se le pueda contar entre los partidos de real compromiso democr¨¢tico. Estos zafarranchos medi¨¢ticos muestran la verdadera (falta de) altura de la dirigencia priista y de sus cuadros.

En el PAN la lucha es m¨¢s sorda pero no menos grave. La dirigencia nacional blanquiazul se apertrecha para deshojar la margarita de c¨®mo ha de decidirse el m¨¦todo de selecci¨®n de candidato presidencial. Marko Cort¨¦s desoye hasta a los de casa porque cree que tiene todo a mano para, en el peor escenario, garantizar a sus leales nuevas chambas en 2024.

Si Cort¨¦s quisiera dar viabilidad a una candidatura presidencial competitiva, sabr¨ªa que m¨¢s que un acuerdo con los priistas debe aliarse con los ciudadanos que lo hicieron la segunda fuerza pol¨ªtica en 2021. Marko sabe, empero, que sentarse con la ciudadan¨ªa pone en riesgo lo ¨²nico que le sostiene: los puestos a repartir entre su nomenklatura.

El PRIAN se presenta en 2023 como una diada potente y decidida rumbo a las elecciones. Pero su cupular gusto por la exclusi¨®n de propios y extra?os les restar¨¢ simpat¨ªas. Y encima, nada garantiza que esta reconciliaci¨®n dure: Cort¨¦s le crey¨® a Alito que le dejar¨¢ la mano en 2024, pero el priista que ya lo traicion¨® una vez trae eso en su naturaleza.

Segundo acto. La soledad de Dante.

El perdedor del mes se llama Dante Delgado. Los descalabros medi¨¢ticos del dirigente nacional de Movimiento Ciudadano solo arreciaron al finalizar enero. En estas semanas, el l¨ªder de MC tuvo un rosario de tropezones que cuestionan si realmente constituye la alternativa opositora de gran calado que tanto gusta el veracruzano de presumir.

El descalabro m¨¢s vistoso fue el lunes. La presentaci¨®n de ¡°Punto de partida¡±, un diagn¨®stico para activar una discusi¨®n sobre el rumbo de M¨¦xico, se volvi¨® un batidillo medi¨¢tico no por el documento en cuesti¨®n, sino por la desautorizaci¨®n de Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas al colectivo que invoc¨® el nombre del ingeniero al lanzar esta iniciativa.

La supuesta coautor¨ªa de C¨¢rdenas en el diagn¨®stico que se?ala graves deficiencias del r¨¦gimen provoc¨® la ira en Palacio Nacional, donde el presidente atac¨® al fundador del PRD y excandidato presidencial. Dante vio c¨®mo el documento, con demasiadas huellas dactilares naranjas, terminaba siendo lo de menos: la nota fue el deslinde de Cuauht¨¦moc.

Adem¨¢s de eso, algunas encuestas mostraron que la fuerza de los candidatos de Delgado en Estado de M¨¦xico y Coahuila no da para disputar esas gubernaturas. ?C¨®mo se puede llamar a una alianza transversal y al mismo tiempo aferrarse a no negociar candidaturas comunes cuando ni siquiera tiene posibilidades de alcanzar buenos resultados?

Hablando de encuestas, hubo otra que tambi¨¦n supuso malas noticias para Delgado. En Jalisco, el enclave donde MC tiene mayor fuerza (gubernatura, control del Congreso y las m¨¢s importantes alcald¨ªas), un sondeo de Mural mostr¨® que ese partido gana con cualquier candidato naranja, y no solo con el alcalde Pablo Lemus, delf¨ªn de Dante.

Y en Nuevo Le¨®n, en medio de embates locales, el gobernador Samuel Garc¨ªa recibe tratos y dispensas del secretario de Gobernaci¨®n. Es cierto que AMLO tambi¨¦n le quiere quitar una millonaria inversi¨®n de Tesla, pero como Enrique Alfaro en Jalisco, los personajes de MC con los que la Federaci¨®n negocia son los gobernadores, no la dirigencia partidista.

Dante perder¨¢ meses en empujar el ¡°Punto de partida¡±, que pretende dar resultados en junio, mes en que los comicios de Edomex y Coahuila estar¨¢n resueltos ¡ªy dif¨ªcilmente a su favor¡ª, y cuando es m¨¢s que probable que la decantaci¨®n de Morena por su corcholata est¨¦ tambi¨¦n ocurriendo. Dante parece obstinado no en ir solo, sino en quedarse as¨ª.

Tercer acto. ?Ciudadanos o pol¨ªticos?

Cuando se anunci¨® que los colectivos que lanzaron la exitosa marcha del 13 de noviembre de 2022 ahora ocupar¨ªan el Z¨®calo en el ¨²ltimo domingo de febrero, varios analistas citaron el cl¨¢sico riesgo de que las segundas partes casi nunca son buenas, y menos si no se prueba que la convocatoria sea realmente masiva en la plancha donde AMLO reina.

M¨¢s all¨¢ del riesgo de que la segunda concentraci¨®n, con sus decenas de r¨¦plicas en ciudades de la Rep¨²blica, resulte fallida, hay otro reto igual de complejo. A la ciudadan¨ªa organizada que se asume como oposici¨®n al lopezobradorismo se le acabar¨¢ en esa fecha del 26 de febrero el plazo de gracia que le permit¨ªa seguir sin definir ruta clara de acci¨®n.

El ahora qu¨¦ ha llegado a t¨¦rmino para los ciudadanos que promueven el voto contrario al presidente y sus candidatos. Si antes se les ve¨ªa como parte de la alianza opositora, como facilitadores tras bambalinas de negociaciones y acuerdos, como garantes incluso de liderazgos impresentables, ahora tendr¨¢n que mostrar que tienen ruta propia y definida.

Porque en el escenario de que ese mitin resulte exitoso ¡ªy el presidente hace todo para ayudarles con ataques verbales y con su embate para nombrar, sin negociaci¨®n alguna, por mayoriteo insaculado a los cuatro consejeros del INE¡ª, entonces deber¨¢n demostrar que adem¨¢s de movilizar, ya saben c¨®mo aprovechar paso a paso este momentum.

El dilema de esos grupos es complejo: una marcha exitosa redundar¨¢ en que el PRIAN quiera aprovecharse de ellos pero sin permitirles mayor cosa en el reparto de candidaturas. Que los ciudadanos depositen respaldo y votos en una negociaci¨®n desnivelada, donde los partidos miran a la sociedad civil hacia abajo. Como siempre.

Antes de 2021, esos grupos ciudadanos sab¨ªan que el PRIAN era la ¨²nica alternativa para que Morena no repitiera mayor¨ªas legislativas absolutas. La elecci¨®n les dio la raz¨®n. Pero luego de las veleidades y traiciones de Marko y Alito, y al avecinarse el 2024, es tiempo de que se pregunten si es mejor ceder su capital en una alianza sin controles, o ir solos.

La alternativa es doblar a la partidocracia e imponerles plataforma y m¨¦todo de selecci¨®n de candidatos. No es imposible, pero no se ven en el PRI y el PAN a los dem¨®cratas que puedan dar ese paso gigante, donde todo lo que eventualmente ganen no ser¨¢ para el disfrute de sus burocracias.

Para rematar estos tres actos de oposici¨®n con liderazgos cuestionables o difusos, unas palabras sobre Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas, l¨ªder sin movimiento.

La voz del michoacano es tan codiciada que, precisamente, provoc¨® el sainete entre Dante Delgado, sus allegados y los integrantes el llamado Colectivo por M¨¦xico, y el presidente de la Rep¨²blica.

El deslinde del ingeniero C¨¢rdenas de Colectivo por M¨¦xico fue tard¨ªo dado que semanas atr¨¢s dej¨® pasar la oportunidad, antes del evento oficial, de aclarar ¡ªcuando en la prensa se adelant¨® varias veces su nombre entre los autores de Punto de partida¡ª que ¨¦l ya no estaba en ese grupo.

Parad¨®jicamente, el affaire demostr¨® el peso que a¨²n tiene C¨¢rdenas. El ataque de Andr¨¦s Manuel y la defensa que no pocos salieron a hacer del ingeniero record¨® la dimensi¨®n de su lucha democr¨¢tica de m¨¢s de 35 a?os. Y a una descalificaci¨®n de esa voz le teme L¨®pez Obrador. Por eso otros pretenden colgarse de esa autoridad.

Cuauht¨¦moc aguardar¨¢ su nuevo momento, lo cual es una buena noticia que sin embargo revela cu¨¢ntos otros liderazgos se echan en falta en estos d¨ªas en que la oposici¨®n se desinfla.

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