La uberizaci¨®n del trabajo y la tasa natural de desempleo

En un art¨ªculo previo aventur¨¦ una hip¨®tesis: que las nuevas plataformas digitales y el trabajo remoto o a distancia (home office, en ingl¨¦s) podr¨ªan estar teniendo efectos muy profundos sobre el mercado laboral. En particular, suger¨ª que el arribo de empresas como Uber, Didi, Rappi o Amazon, junto con el trabajo a distancia, podr¨ªan estar reduciendo los niveles estructurales de desempleo en las econom¨ªas modernas. Ahora tratar¨¦ de explicar un poco m¨¢s la l¨®gica detr¨¢s de esta hip¨®tesis.

En particular, hay dos preguntas clave que habr¨ªa que responder para ver si tiene alg¨²n sentido proponer algo as¨ª: ?es suficientemente grande el impacto de las nuevas plataformas o del trabajo remoto en el mercado laboral como para afectar la tasa natural de desempleo? ?Cu¨¢l ser¨ªa el canal o el sentido a trav¨¦s del cual la presencia de las nuevas plataformas o tipos de trabajo remoto alterar¨ªan al mercado laboral? Vayamos por partes.

El volumen e impacto de las nuevas empresas y los nuevos tipos de trabajo no es menor. Tan s¨®lo en Estados Unidos Uber afirma que en 2019 ya ten¨ªa un mill¨®n de conductores trabajando para ellos (o con ellos, para usar su propio lenguaje que simula que sus trabajadores en realidad son sus socios). Esto representa m¨¢s de medio punto porcentual de toda la poblaci¨®n econ¨®micamente activa de Estados Unidos. Si a esto le sumamos el n¨²mero de conductores o trabajadores de otras plataformas similares (Lyft, Cornershop, Amazon, etc.), ver¨ªamos que la participaci¨®n en el mercado laboral de este tipo de trabajos bien podr¨ªa fluctuar entre 1% y 2% de toda la fuerza laboral de Estados Unidos. Un impacto de esta magnitud sin duda podr¨ªa alterar la tasa natural de desempleo, la cual hasta hace poco se estimaba en Estados Unidos entre 4% y 5%. No hay cifras o estimaciones oficiales en el caso de otros pa¨ªses, pero basta salir a la calle en ciertas zonas urbanas de M¨¦xico para observar que el n¨²mero de trabajadores de empresas como Uber Eats, Didi o Rappi ha crecido all¨ª en forma muy importante en los ¨²ltimos a?os.

En cuanto al trabajo remoto, hay mucha discrepancia sobre su magnitud. Un trabajo reciente, basado en una encuesta nacional, concluy¨® que alrededor de la mitad de todos los trabajadores en Estados Unidos labor¨® en forma remota al menos un d¨ªa a la semana. Por otro lado, una encuesta del Pew Research Center concluye que el 35% de las personas en Estados Unidos que tienen trabajos que se pueden hacer a distancia, trabajan en forma remota de tiempo completo. Cabe se?alar que este porcentaje antes de la pandemia era de s¨®lo el 7%.

En cualquier caso, el impacto de las nuevas formas de trabajo y de las nuevas plataformas es muy extenso, al menos en el caso de Estados Unidos. Evidentemente, no todos estos trabajos son nuevos. De hecho, muchos de ellos solo han sustituido a otros (a taxistas tradicionales, por ejemplo), pero es cierto que tambi¨¦n se han generado muchos empleos nuevos que antes de la pandemia exist¨ªan en forma limitada: repartidores de alimentos o compras por internet, por ejemplo.

Ahora bien, ?por qu¨¦ estas nuevas condiciones o tipos de trabajo podr¨ªan alterar al mercado laboral? Veo tres razones fundamentales. Primero, la flexibilidad que le ofrecen a los trabajadores. En el caso de las plataformas, los trabajadores pueden elegir cu¨¢ndo y a qu¨¦ hora trabajar. Tambi¨¦n deciden el tiempo total que le dedicar¨¢n a esta actividad: puede ser de tiempo completo o tan s¨®lo de algunas horas a la semana, o puede ser incluso un complemento de otro trabajo.

Segundo, estos trabajos no requieren de una habilidad o formaci¨®n demasiado espec¨ªfica. As¨ª, gente sin experiencia laboral previa o que haya abandonado el mercado laboral hace muchos a?os, puede incorporarse o reincorporarse a un trabajo sin mayores complicaciones. Lo mismo ocurre en t¨¦rminos de educaci¨®n. En general, esto no es una limitante para acceder a este tipo de trabajos. Por ello, personas que trabajaban en un cierto sector de la econom¨ªa pueden encontrar r¨¢pidamente una actividad en otro sector. Esto reduce el llamado desempleo friccional. Esto lo vimos claramente durante la pandemia cuando muchos trabajadores de la construcci¨®n se reconvirtieron r¨¢pidamente en repartidores de comida.

Tercero, los costos de entrada a estos trabajos son relativamente bajos, basta con tener un medio de transporte y un tel¨¦fono inteligente o una computadora. Un auto usado en Estados Unidos, por ejemplo, podr¨ªa bastar para convertirse en conductor de servicios por aplicaci¨®n. Esto podr¨ªa explicar inclusive el r¨¢pido aumento en los precios de estos autos en los ¨²ltimos a?os en Estados Unidos. En los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina conseguir un auto, as¨ª sea usado, es m¨¢s complicado y costoso. Pero en estos pa¨ªses muchas personas j¨®venes o desempleadas pueden conseguir acceso relativamente f¨¢cil a una motocicleta o a una bicicleta y trabajar como repartidores de alimentos en empresas como Uber Eats o Rappi. El otro costo importante, el de los tel¨¦fonos inteligentes, ha ca¨ªdo bastante como resultado de los avances tecnol¨®gicos.

En suma, los cambios tecnol¨®gicos, la llamada uberizaci¨®n del trabajo, el trabajo a distancia y los cambios en nuestros patrones de movilidad y consumo, todo ello se ha conjugado para producir un cambio importante en el mercado laboral que podr¨ªa haber llevado a una reducci¨®n en la tasa natural o estructural de desempleo en las econom¨ªas modernas. Esto tiene implicaciones econ¨®micas y sociales muy importantes que habr¨¢ que empezar a analizar y discutir.