Taquer¨ªa Gabriel, aprobada por el Departamento de Estado de Estados Unidos
A pie de calle, los tacos siguen la misma f¨®rmula: tortilla, prote¨ªna o vegetales, y salsa; en Taquer¨ªa Gabriel tienen un men¨² para saciar el antojo mexicano que ha conquistado el paladar gringo
La Taquer¨ªa Gabriel tiene varias horas pico, la m¨¢s peculiar es a las 12 del mediod¨ªa, cuando comienzan a llegar estadounidenses; la mayor¨ªa visten ropa formal, no encajan en el clich¨¦ de turista con bermudas, playera y gorra. ¡°A las 12 empieza como el horario del americano, es cuando vienen porque es su lunch¡±, dice Bernardo Bukantz, chef y socio de Taquer¨ªa Gabriel, que est¨¢ ubicada a escasos metros de la embajada de Estados Unidos. Incluso existe el rumor de que en ocasiones han bajado la cortina para darle privacidad a altos mandos de la canciller¨ªa gringa, aunque Bukantz asegura que es mentira: ¡°No sabemos ni cu¨¢ndo vienen, ni qui¨¦n viene¡±.
La Taquer¨ªa Gabriel, ubicada en la Cuauht¨¦moc ¡ªcolonia poco tur¨ªstica, a diferencia de la Roma o el Centro Hist¨®rico¡ª, tiene clientes mexicanos y extranjeros por igual, porque ?qui¨¦n se resiste a los buenos tacos? Aunque quiz¨¢s aquellos que vienen a pasar unos d¨ªas a la, ahora muy de moda, Ciudad de M¨¦xico, eligen taco restaurantero porque les da m¨¢s confianza.
Los restaurantes no cargan con el estigma de la temida ¡°Venganza de Moctezuma¡±, una maldici¨®n ancestral que cae sobre los extranjeros en sus visitas a M¨¦xico (solo se enferman un poco del est¨®mago). En defensa de los puestos callejeros, los turistas caen en las garras de los bichos mexicanos porque no tienen los mismos anticuerpos que nosotros¡ pero esta columna es del buen comer, no del mal comer.
Bukantz no se anda con medias tintas y dice: ¡°Las taquer¨ªas aut¨¦nticas est¨¢n en la calle y los tacos son barrio, nosotros buscamos hacer algo alternativo en la colonia. Gabriel es un restaurante que vende tacos¡±. El sitio tiene una est¨¦tica popular refinada con muros de azulejo blanco impoluto, y su logo recuerda los tradicionales r¨®tulos, sin embargo, no es una taquer¨ªa al estilo, por ejemplo, de los Tacos Charly en Tlalpan, donde el taco de suadero se come de pie en la banqueta y en coloridos platos de pl¨¢stico.
¡°Gabriel¡± tambi¨¦n sirve suadero con cebolla y cilantro aunque, seg¨²n Bukantz, ¡°sabe espectacular con la salsa de cacahuate y dos gotas de la de habanero con pi?a¡±, dos salsas poco comunes, pero muy buenas. Sus otras dos opciones son la verde, ideal para el taco de lech¨®n, y la macha, que le da un buen toque a las quesadillas de carne asada en pan pita.
Bukantz se apasiona al explicar el porqu¨¦ de sus salsas: ¡°Aportan el sabor ¨¢cido al taco, o sea casi casi no deber¨ªas ni ponerle lim¨®n¡±. Estudi¨® gastronom¨ªa en Puebla y despu¨¦s trabaj¨® en restaurantes en Par¨ªs, cuando regres¨® a M¨¦xico busc¨® alejarse de la bechamel y volver al origen: ¡°Quer¨ªa preparar cocina cotidiana, de todos los d¨ªas¡±.
Comenz¨® en este mismo local con Bravo Loncher¨ªa, famosa por su pambazo de pulpo. En 2019 la cerr¨® y abri¨® la taquer¨ªa. ¡°Las tortas nos limitaban, la gente solo las come en la ma?ana o en la comida¡±, dice Bukantz, en cambio los tacos gobiernan las 24 horas. Los puristas dir¨¢n que los de carnitas y birria se consumen por la ma?ana, y el pastor y suadero por la noche. En Gabriel hay variedad sin itinerario definido, a excepci¨®n de los burritos ma?aneros ¡ªde rajas, huevo y chicharr¨®n¡ª que solo est¨¢n disponibles durante el desayuno, de 9 de la ma?ana a 12 de la tarde.
Antes de dar el brinco de las tortas a los tacos, Bukantz y sus socios viajaron a varias regiones de M¨¦xico en busca de inspiraci¨®n y se nota en el men¨², que incluye estos burritos norte?os, as¨ª como papas asadas con carne, tocino, crema y queso, muy comunes en Monterrey, o chiles caribe rellenos de asada y queso chihuahua, populares en Sonora. Y el gui?o m¨¢s especial a Ciudad de M¨¦xico son sus esquites de nopales: ¡°Cocemos el nopal en sal para que quede crujiente¡±, explica, y le agrega mayonesa, queso, lim¨®n y chile, como los esquites (de elote) que abundan en la capital del pa¨ªs.
¡°La verdad es que yo no quer¨ªa hacer una taquer¨ªa porque para m¨ª implica mucho respeto, ?sabes?¡±, confiesa Bukantz, a quien en las redes sociales lo han acusado incluso de ¡°apropiaci¨®n cultural¡±, aunque haya nacido en Michoac¨¢n, y agrega: ¡°A veces es muy dif¨ªcil explicarle a la gente por qu¨¦ cobramos 35 pesos por un taco, pero hay pa¡¯ todos¡±.
De los puestos, a los locales o a los restaurantes de mantel blanco, el taco se ha diversificado en precios y estilos. Taquer¨ªa Gabriel es una opci¨®n, podr¨ªa decirse, intermedia, para quienes buscan sentarse c¨®modamente a echar tacos con salsas peculiares y compartir una caguama o beberse un mezcal, mientras escuchan m¨²sica tropical.
¡°Como los unicornios
van desapareciendo
Amar y ser amado
es darse por completo
Un amor como el nuestro
no debe morir jam¨¢s¡±
No dejemos que desaparezca el taco en ninguna de sus formas, ni el de tortilla con copia o el de tortilla de ma¨ªz criollo; ni los tacos de canasta o los hechos en tortilla de harina; ni el taco de cochinada, el de pork belly o los del omakase de Pujol¡ ¡°Hay pa¡¯ todos¡±, como dice Bukantz, hasta pa¡¯ los gringos en corbata o con bermudas.
Canci¨®n: Amores como el nuestro, Jerry Rivera.
Taquer¨ªa Gabriel
Direcci¨®n: R¨ªo Sena 87, Local A, Colonia Cuauht¨¦moc, Ciudad de M¨¦xico
Precio: 200 - 300 pesos
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