La llave dorada de la corrupci¨®n: amnist¨ªa en las manos equivocadas
Para que las amnist¨ªas sean una herramienta de la justicia y no de la corrupci¨®n deben estar enfocadas en garantizar la transparencia con criterios preestablecidos, acordados principalmente con las v¨ªctimas
Imaginen esto:
Algo pasa, una crisis h¨ªdrica, econ¨®mica, social y en 2028 hay revocaci¨®n de mandato en M¨¦xico. La presidenta Claudia Sheimbaum deja de serlo y su lugar es ocupado por Alito Moreno o el pol¨ªtico de sus pesadillas.
Cuando toma el cargo sabe que tiene en su mano la llave de cualquier celda, de cualquier prisi¨®n para dejar libre a quien sea, basta con que diga que su caso es ¡°relevante para el Estado mexicano¡± y que aport¨® datos comprobables para conocer ¡°la verdad¡±.
Quienes defienden la reci¨¦n aprobada reforma al art¨ªculo 9 de la Ley de Amnist¨ªa, que otorga poder a la presidencia de la Rep¨²blica para otorgar amnist¨ªas directas, nos hablan del honor del presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y de que esta ley ser¨¢ ¨²til para esclarecer la verdad en casos como ¡°Ayotzinapa¡±.
Si en efecto esta reforma ayuda a que, antes de terminar su sexenio, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador d¨¦ a conocer d¨®nde est¨¢n los estudiantes, el mandatario habr¨¢ saldado una de sus deudas m¨¢s importantes con la sociedad mexicana; pero si no lo hace, si la verdad es menos que eso, si quienes hablen s¨®lo aportan indicios o si el aporte radica en lavarle la cara a los militares, la reforma habr¨¢ servido ¨²nicamente para que el oficialismo nos cuente una nueva verdad hist¨®rica.
Pero m¨¢s all¨¢ del caso Ayotzinapa, hay que recordar que el presidente se va y la ley se queda. ?Con qu¨¦ criterios de aqu¨ª en adelante se va a determinar qu¨¦ es relevante para el Estado mexicano? Si la reforma nos habla de ¡°El Estado mexicano¡±, ?por qu¨¦ no regula la participaci¨®n que tendr¨ªan los otros poderes en esta determinaci¨®n de ¡°relevancia¡±?
La verdad es que la reforma permite que sean temas relevantes ¨²nicamente para una persona: para quien ocupe la presidencia. Eso puede significar por ejemplo: libertades en procesos que pueden ir desde la l¨ªnea 12 del metro o el Tren Maya, hasta evasi¨®n fiscal y lavado de dinero, pasando por delitos de alto impacto como homicidios y desapariciones forzadas.
Para que las amnist¨ªas sean una herramienta de la justicia y no de la corrupci¨®n deben estar enfocadas en garantizar la transparencia con criterios preestablecidos, acordados principalmente con las v¨ªctimas. Como son herramientas excepcionales, deben ser temporales y los casos en los que se usen deben tener respaldo social y apegarse a los est¨¢ndares internacionales en derechos humanos.
Estos est¨¢ndares establecen, por ejemplo, que las amnist¨ªas no pueden otorgarse en cualquier delito: deben exceptuarse las violaciones graves a los derechos humanos. Tambi¨¦n establecen que estos mecanismos deben de tener los siguientes objetivos: verdad, justicia, reparaci¨®n, no repetici¨®n y construcci¨®n de memoria.
Particularmente, el tema de la verdad implica tener claridad sobre hechos violentos y de relevancia hist¨®rica que nos afectan gravemente como sociedad, identificar a los principales perpetradores, dignificar a las v¨ªctimas, as¨ª como entender patrones, m¨¦todos y causas de tales hechos. En las experiencias internacionales, la b¨²squeda de la verdad est¨¢ a cargo de comisiones independientes y plurales sujetas a estrictos mecanismos de rendici¨®n de cuentas y transparencia.
Nada de eso se contempla en la reforma. Lo que s¨ª hace es otorgar un supra poder muy peligroso a quien ocupe la presidencia. Hoy es Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y su apuesta es que la llave dorada de la corrupci¨®n quede permanentemente en manos de sus herederos pol¨ªticos.
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