Pek¨ªn corta toda comunicaci¨®n entre una mujer uigur, a la que niega viajar al extranjero con sus hijos, su marido exiliado en B¨¦lgica y las autoridades belgas, tras la publicaci¨®n de 'Los papeles de China'
Un equipo de reporteros de EL PA?S desgrana c¨®mo se ha coordinado la publicaci¨®n ¡®Los cables secretos de China¡¯, en la que han participado 17 medios
La C¨¢mara de Representantes aprueba un proyecto de ley que castigar¨ªa a los l¨ªderes chinos responsables de la violaci¨®n de derechos de los musulmanes. A¨²n necesita el voto del Senado
Seleccionamos un conjunto de textos, acad¨¦micos y literarios, para acercarse y comprender mejor la situaci¨®n actual de la potencia oriental
M¨¢s all¨¢ de informar a la sociedad occidental y de ser un gran trabajo period¨ªstico, es poco probable que los 'China cables' consigan que China se mueva ni un mil¨ªmetro
Uno de los pocos residentes en Espa?a de esta etnia relata el acoso del r¨¦gimen chino que obstaculiza las comunicaciones de la minor¨ªa musulmana
°üÀ¨Î÷°àÑÀ‡ø¼ÒˆóELPA?SÔڃȵÄ17¼Ò‡øëHýówµÄÕ{²éÓ›ÕßͬÃËÓ›ä›Á˱±¾©Õþ¸®Œ¦¾SÎá –×åÉÙ”µÃñ×åµÄ±OÒ•£¬ÆȺ¦ºÍŠÆȾÐÁô¡£
A trav¨¦s de su macrosistema de vigilancia, Pek¨ªn tiene control directo sobre las personas de su minor¨ªa musulmana que residen o quieren residir en otros pa¨ªses
Por primera vez, un documento interno del r¨¦gimen comunista reconoce el rastreo de informaci¨®n personal a partir de ¡®software¡¯ instalados en los tel¨¦fonos de miles de personas
Las autoridades espa?olas y comunitarias condenan la represi¨®n contra la minor¨ªa musulmana uigur
Una sentencia contra un habitante de la provincia china de Xinjiang demuestra la debilidad de un proceso judicial que confina a un ciudadano uigur a un largo periodo de prisi¨®n
Qui¨¦nes son los uigures, por qu¨¦ Pek¨ªn los reprime, c¨®mo hemos verificado los documentos y qu¨¦ opinan las autoridades chinas
Una investigaci¨®n de 17 medios internacionales, entre ellos EL PA?S, documenta las pr¨¢cticas de vigilancia, persecuci¨®n e internamiento forzoso de Pek¨ªn contra la minor¨ªa uigur
Los cables secretos confirman las denuncias de activistas y periodistas