Irresponsable Renzi

Italia se adentra en una nueva crisis pol¨ªtica que puede desembocar en el tercer Ejecutivo de esta legislatura. La ruptura del l¨ªder de Italia Viva y ex primer ministro, Matteo Renzi, con el Gobierno que lidera Giuseppe Conte abre un escenario incierto en el que no puede descartarse la convocatoria adelantada de elecciones. El pa¨ªs transalpino, en un momento de extrema fragilidad por la pandemia y la crisis econ¨®mica, vuelve a dar muestras de su inestabilidad cr¨®nica. El momento elegido por Renzi, sin embargo, tiene pocos precedentes.

Italia devora un primer ministro cada 14 meses (67 Gobiernos desde la Segunda Guerra Mundial). El pa¨ªs se ha acostumbrado a navegar en una crisis pol¨ªtica perenne. Un contexto en el que no sorprende el movimiento de palacio de Renzi, principal autor de las ¨²ltimas crisis de Gobierno desde que descabalg¨® a su compa?ero de partido, Enrico Letta, de la presidencia del Consejo de Ministros para ocupar su lugar en 2014. Los argumentos esgrimidos ahora por el florentino, que denuncia las carencias de este Gobierno y un exceso de personalismo de Conte a la hora de tomar decisiones ¡ªcomo la gesti¨®n de los fondos de recuperaci¨®n europeos¡ª, pueden ser parcialmente compartidos. Pero el momento resulta totalmente inapropiado y sume al pa¨ªs en una incertidumbre perjudicial para s¨ª mismo y para sus vecinos europeos.

La tarde que Renzi anunci¨® que retiraba a sus dos ministras del Gobierno, Italia comunic¨® m¨¢s de 15.000 casos de coronavirus en el pa¨ªs y 507 fallecidos. El pa¨ªs acaba de alargar el estado de emergencia y se encuentra en plena campa?a de vacunaci¨®n. Debe decidir tambi¨¦n c¨®mo gestiona la mayor asignaci¨®n de fondos europeos para la pandemia (unos 230.000 millones de euros) y se dispone a inaugurar su presidencia del G-20. Renzi defiende que la pandemia no puede ser el ¨²nico motivo que mantenga en pie este Gobierno. Pero ninguna de las razones esgrimidas, pese a su legitimidad, parece tan poderosa como para someter ahora al pa¨ªs al riesgo de meses de par¨¢lisis pol¨ªtica que acarrear¨ªa un voto adelantado.

El presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, ha sido durante esta legislatura la ¨²nica referencia estable de un pa¨ªs que se asom¨® peligrosamente al antieurope¨ªsmo y a las pol¨ªticas de ultraderecha durante el periodo en el que Matteo Salvini fue vicepresidente. Ahora deber¨¢ volver a pilotar una crisis pol¨ªtica en circunstancias de excepcional gravedad. Conte busca nuevos apoyos para mantener la confianza de la mayor¨ªa del Parlamento y planeaba una votaci¨®n para comprobarlo el lunes. Evitar un incierto y paralizante proceso electoral es necesario. Tambi¨¦n lo es lograrlo con una maniobra pol¨ªtica transparente, que conforme una nueva mayor¨ªa clara y estable, como correctamente reclama Mattarella.