Italia necesita estabilidad
La soluci¨®n Draghi es la mejor posible en las actuales circunstancias pol¨ªticas
Mario Draghi acept¨® este mi¨¦rcoles el encargo que le encomend¨® el presidente de Italia, Sergio Mattarella, de intentar formar gobierno tras el colapso del Ejecutivo de coalici¨®n que lideraba Giuseppe Conte. Ante la incapacidad de los partidos representados en el Parlamento para forjar una nueva mayor¨ªa, el jefe del Estado apost¨® por el expresidente del Banco Central Europeo como figura de consenso para conformar un Gobierno t¨¦cnico que lidere al pa¨ªs en un momento de desaf¨ªos trascendentales, evitando la par¨¢lisis y la incertidumbre que acarrear¨ªa el regreso anticipado a las urnas. La decisi¨®n de Mattarella es inteligente; la disposici¨®n de Draghi, elogiable, considerando que pone en juego su prestigio en una situaci¨®n dif¨ªcil y sin tener a priori un claro respaldo parlamentario.
Las circunstancias que han llevado hasta este punto son las de un fracaso pol¨ªtico. Se trata de la en¨¦sima encarnaci¨®n de un defecto cr¨®nico del sistema pol¨ªtico italiano: una inestabilidad enfermiza que ha entorpecido gravemente las posibilidades de desarrollo de la sociedad. La volatilidad y el cortoplacismo explican en gran medida por qu¨¦ el pa¨ªs lleva la mayor parte de este siglo deprimido en el estancamiento econ¨®mico y en una nefasta espiral de pesimismo colectivo. La soluci¨®n que plantean Mattarella y Draghi a este nuevo episodio de inestabilidad es, sin embargo, la mejor posible y no resulta exenta de virtudes. Por las cualidades personales del elegido, que se sit¨²a entre las figuras de mayor relieve de la Europa del siglo XXI; y por la vocaci¨®n subyacente al proyecto, el intento de catalizar una amplia convergencia de voluntades pol¨ªticas que es oportuna en un momento como este. No solo la lucha contra el desaf¨ªo sanitario es trascendental y debe concitar uni¨®n; la administraci¨®n de los recursos que proceder¨¢n de la UE ¡ªunos 200.000 millones de euros entre ayudas a fondo perdido y pr¨¦stamos¡ª representa una oportunidad de transformaci¨®n del pa¨ªs de tal calado que parece l¨®gico gestionarla con un consenso que vaya m¨¢s all¨¢ de una fr¨¢gil e inestable mayor¨ªa.
No hay garant¨ªas de que el intento de Draghi prospere. Pero, leyendo entre l¨ªneas de las primeras se?ales pol¨ªticas, cabe intuir que tiene buenas posibilidades. Si fuera as¨ª, la experiencia tendr¨ªa tambi¨¦n el activo de fomentar una cierta maduraci¨®n de varias formaciones pol¨ªticas italianas. Es esta una legislatura dominada por partidos de vocaci¨®n antisistema como el Movimiento 5 Estrellas, la Liga y Hermanos de Italia, que obtuvieron un 54% de los votos en 2018. Un gesto de responsabilidad ahora puede representar un punto de evoluci¨®n positiva en sus historias. Deber¨ªan entenderlo as¨ª, por el bien de la ciudadan¨ªa italiana. Los meses necesarios para convocar elecciones y conformar un nuevo Gobierno infligir¨ªan un da?o letal cuando Italia debe presentar en cuesti¨®n de semanas los planes para aprovechar los fondos europeos. La inmadura volatilidad de la pol¨ªtica italiana tiene su reverso en una loable capacidad de di¨¢logo. Draghi debe aprovecharla, forjar un consenso que sea la amplia base del proyecto de reconstrucci¨®n que el pa¨ªs necesita. El apoyo a los j¨®venes, en un pa¨ªs envejecido y que sufre una hemorragia de cerebros, deber¨ªa ser su estrella polar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.