M¨¢s ciencia, m¨¢s Europa

Hablar de buenas noticias en medio de una pandemia que se ha llevado por delante a 2,8 millones de cong¨¦neres parece un desvar¨ªo. Pero haberlas, haylas. Recordemos que las vacunas se han desarrollado en un tiempo r¨¦cord, que est¨¢n siendo extremadamente eficaces para evitar muertes, que las variantes del virus son pocas y gestionables y que nuestros errores nos se?alan lo que hay que corregir a un ritmo literalmente diario. Tambi¨¦n hay una conclusi¨®n m¨¢s abstracta y que, en el fondo, captura todo lo anterior y mucho m¨¢s: que nuestras sociedades se apoyan cada vez m¨¢s en la ciencia. Que recortar en investigaci¨®n y medicina es una sandez. Y que las prioridades presupuestarias de nuestros gobiernos son err¨®neas. Si la lecci¨®n persistiera en el tiempo, ser¨ªa la mejor noticia que habr¨ªa salido de esta escabechina. Ha querido el destino que Horizonte Europa, el programa clave de la UE para investigaci¨®n e innovaci¨®n de aqu¨ª a 2027, est¨¦ estos d¨ªas en su fase de arranque, y pidiendo proyectos a los cient¨ªficos europeos. El plan supone una pasta ¡ª96.000 millones de euros, cerca del 10% del PIB espa?ol¡ª y alimentar¨¢ la ciencia del continente con ¨¦nfasis en cinco ¡°misiones¡±, o investigaciones dirigidas a un objetivo: c¨¢ncer, clima, oc¨¦anos, ciudades del futuro y seguridad alimentaria. Eso se llevar¨¢ 5.000 millones. El fondo de recuperaci¨®n de la covid dar¨¢ cuenta de otros 5.000. Quedan a¨²n 86.000 millones por repartir, y la Comisi¨®n Europea tardar¨¢ todav¨ªa varias semanas en anunciar unos planes m¨¢s elaborados y considerar m¨¢s solicitudes de los laboratorios.

La mujer que est¨¢ a cargo de esta operaci¨®n milmillonaria es la comisaria de Innovaci¨®n, Investigaci¨®n, Cultura, Educaci¨®n y Juventud, Mariya Gabriel, una polit¨®loga y pol¨ªtica b¨²lgara conservadora que ocupa el cargo desde 2019. Leyendo la lista de sus competencias, lo primero que dan ganas es de compadecerla, la verdad, porque eso m¨¢s que una cartera parece un ba¨²l. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que la mayor¨ªa de esas competencias son de los pa¨ªses miembros, y que la funci¨®n de Gabriel consiste m¨¢s bien en repartir la pasta con criterios racionales y examinar peri¨®dicamente si est¨¢ bien gastada. No ser¨¢ una tarea menor.

Para sus planes a medio plazo, Gabriel necesita contar con el acuerdo de los 27 Estados miembros, seg¨²n declara a Nature. En particular, que los pa¨ªses se comprometan a dedicar a la investigaci¨®n el 3% de su PIB. Eso es lo que invierten en ciencia los pa¨ªses m¨¢s avanzados, y no cumplirlo ¡ªcomo Espa?a, que se ha estancado en un 1,2%¡ª es la marca de f¨¢brica de una econom¨ªa miope, ladrillera y sigloveintesca de puro vetusta.

Las agendas de los pa¨ªses miembros, argumenta la comisaria, deben cambiar para reflejar las nuevas prioridades, y su departamento prepara el borrador de un Pacto por la Investigaci¨®n y la Innovaci¨®n para coordinar las estrategias cient¨ªficas nacionales con el Horizonte Europeo. Su argumento ser¨¢ de peso. Se llama 96.000 millones, y pocos gobiernos nacionales tienen armas contra una oferta que no podr¨¢n rechazar. La lucha contra la pandemia y el resto de la actividad cient¨ªfica necesitan m¨¢s Europa, no menos. Los de Bruselas ven m¨¢s all¨¢ que los de provincias.