Una herencia universal juvenil
Los lectores escriben sobre la propuesta de Yolanda D¨ªaz de dar 20.000 euros a los j¨®venes, la adicci¨®n a las pantallas, el cambio de posici¨®n del PP respecto a la reforma laboral y el fin de las llamadas comerciales
Dicho as¨ª podr¨¢ sonar bien, pero resulta sorprendente. Al cumplir los 18 a?os, el Estado te regala 20.000 euros para poder emanciparte o emprender alg¨²n plan al margen de tus circunstancias. ?Tendr¨¢n que renunciar a esa d¨¢diva quienes no la necesiten por tener un entorno familiar con cierta holgura econ¨®mica? ?No deber¨ªa m¨¢s bien concederse un pr¨¦stamo sin ¨¢nimo de lucro y con ciertas condiciones para no devolverlo a quien as¨ª lo solicitara justificando las razones que le inducen a realizar esa petici¨®n? Lo que hace falta es un amplio parque de vivienda social y ayudas de todo tipo que den oportunidades a quienes lo tienen m¨¢s dif¨ªcil por diversas razones. Dar cheques a todos los j¨®venes o a cualquier otro colectivo espec¨ªfico en t¨¦rminos universales dista de ser una medida social eficaz. Es algo impropio de quien ha demostrado conjugar los principios con el pragmatismo, haci¨¦ndolo en aras de que las convicciones puedan ser ¨²tiles a una mayor¨ªa muy significativa.
Roberto R. Aramayo. Berl¨ªn
Enganchados
Suelo ir a desayunar a un caf¨¦ en Donostia. Aquel d¨ªa, fue entrar por la puerta y ver como una mujer retiraba su caf¨¦ de la barra y cog¨ªa del revistero este peri¨®dico y un dominical. Con resignaci¨®n, cog¨ª una revista de semanas atr¨¢s mientras observaba de reojo si la mujer tendr¨ªa la capacidad de leer simult¨¢neamente las dos lecturas. Super¨® mis expectativas. Sac¨® su m¨®vil, abri¨® Instagram, y fue incapaz siquiera de disimular la lectura de los titulares del diario. Me refugi¨¦ en una entrevista a Jennifer Egan que me hizo recordar a Adela Cortina. La epidemia de las pantallas.
Iker I?¨¢rritu Ruiz. Portugalete (Bizkaia)
Cambio de opini¨®n
Tras su voto negativo en el Congreso y su recurso al Constitucional, el PP salva ahora de su ¡°derogaci¨®n del sanchismo¡± la reforma laboral pretendiendo colarnos que s¨®lo supone unos cambios insignificantes respecto a la anterior. Es su consabida t¨¢ctica hip¨®crita ante avances exitosos. Probablemente tambi¨¦n un intento de contrarrestar los bochornosos pactos con Vox, en los que la cesi¨®n de principios supuestamente inamovibles deja paso al retroceso en derechos consolidados, al negacionismo clim¨¢tico y de la violencia machista: un c¨®ctel regresivo que, vista la credibilidad y solvencia de Feij¨®o, inspirar¨ªa leyes a escala nacional.
Hortensia Garc¨ªa Garc¨ªa. ?vila
Fin de las llamadas comerciales
Me impresiona la poca repercusi¨®n que est¨¢ teniendo en la precampa?a electoral la entrada en vigor de la prohibici¨®n de las llamadas comerciales sin consentimiento. Una medida que, en los pocos d¨ªas desde su aplicaci¨®n, ya tiene un efecto impresionante: el silencio. Supongo que precisamente por eso no se habla de ello. Parece que hoy en d¨ªa lo ¨²nico que interesa es el ruido.
Pablo Mart¨ªn Pallas Acosta. Valencia
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