El Senado como s¨ªntoma

El presidente de la Generalitat de Catalu?a, Pere Aragon¨¦s, expuso este jueves en el Senado sus argumentos en favor de una ley de amnist¨ªa que termine con los procesos judiciales relacionados con la ruptura independentista de 2017. Tambi¨¦n su objetivo pol¨ªtico de celebrar un refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n pactado. La novedad es que lo hizo delante de todos los presidentes auton¨®micos del PP, a los que su partido, con mayor¨ªa en la C¨¢mara alta, hab¨ªa convocado a la Comisi¨®n General de las Comunidades Aut¨®nomas para debatir sobre ¡°la igualdad ante la ley de todos los espa?oles¡±.

Bajo este ep¨ªgrafe se escond¨ªa una nueva representaci¨®n institucional, ya adelantada en ayuntamientos y parlamentos territoriales, de la ofensiva conservadora contra la ley de amnist¨ªa reclamada por los independentistas a cambio de apoyar la investidura de Pedro S¨¢nchez. El poder auton¨®mico del PP, por boca de Isabel D¨ªaz Ayuso, Juan Manuel Moreno Bonilla o Fernando L¨®pez Miras, repiti¨® su conocido discurso en torno a la ¡°humillaci¨®n¡± y la ¡°traici¨®n¡± que supondr¨ªa esa hipot¨¦tica amnist¨ªa. En un gesto que result¨® innecesariamente descort¨¦s, Aragon¨¨s no se qued¨® a escucharlos. Aun as¨ª, y aunque su presencia buscaba recuperar la iniciativa para ERC en su pelea con Junts, la intervenci¨®n del president dignific¨® el papel del Parlamento y evit¨® que fuera un mero acto de partido.

Las comunidades aut¨®nomas gobernadas por el PSOE (Asturias, Navarra y Castilla-La Mancha), sin embargo, cometieron el error de no enviar representaci¨®n alguna con el argumento de no participar en lo que consideran un teatro pol¨ªtico. El Gobierno en funciones no estuvo presente. En su intento por deslucir la ofensiva popular, los socialistas terminaron desairando a la instituci¨®n. Tambi¨¦n falt¨® el lehendakari vasco, I?igo Urkullu.

Es obvio que el PP utiliza su mayor¨ªa en el Senado para elevar en beneficio propio la presi¨®n sobre el Gobierno. Pero esa mayor¨ªa se la han dado los votos, y acusar a la oposici¨®n de hacer oposici¨®n no es un argumento con recorrido. No se gana un debate no estando en ¨¦l, y el PSOE desperdici¨® una oportunidad para contrarrestar el estado de irritaci¨®n promovido por la derecha en torno a las negociaciones de investidura. En el mismo gesto, menospreci¨® el valor que tiene hablar desde la minor¨ªa en las instituciones democr¨¢ticas. Un valor que s¨ª tuvieron presente los senadores Enric Morera (Comprom¨ªs), Carla Antonelli (M¨¢s Madrid) y Uxue Barcos (Geroa Bai). Hubo que esperar casi siete horas para escuchar al PSOE, por boca de su portavoz, Juan Espadas.

La imagen que queda es la de un PP que usa las instituciones para intentar minar la unidad de los socialistas y la de un PSOE que desaprovech¨® la ocasi¨®n de rebatir los argumentos con los que su rival trat¨® de demostrar este jueves que la igualdad de los espa?oles ante la ley corre peligro.

La Comisi¨®n General de las Comunidades Aut¨®nomas es un foro singular. Creada en 1994 para servir de embri¨®n a la necesaria reforma del Senado como c¨¢mara de representaci¨®n territorial, no tard¨® en ser arrinconada por los partidos. Los momentos en los que ayer se habl¨® de financiaci¨®n auton¨®mica dieron una idea de su utilidad. Utilizarla para m¨ªtines de partido o ningunearla cuando resulta inc¨®moda no hace m¨¢s que ahondar en esa historia de frustraci¨®n que es el encaje del Senado en la arquitectura constitucional espa?ola.