?Hasta d¨®nde? ?Hasta cu¨¢ndo?

Sin pensarlo, me encuentro buscando en el dial de mi radio un rayo de felicidad nocturna que compense tanta noticia triste. Estoy abrumada por continuos desastres naturales, por guerras muy lejanas que ya parecen nuestras, que naturalmente lo son. La deshumanizaci¨®n y la crudeza mostradas por unos y por otros a prop¨®sito del ¨²ltimo conflicto est¨¢n alcanzando unos niveles que sobrepasan en exceso los l¨ªmites de lo comprensible. Nos quejamos y mostramos nuestra indignaci¨®n y nuestro rechazo en manifestaciones, en la prensa, en el trabajo¡­ Pero la Tierra sigue girando, incluso la vida grita y se abre paso entre los escombros, y nos preguntamos qu¨¦ m¨¢s puede suceder, de qu¨¦ nuevas atrocidades seremos capaces. ?Hasta d¨®nde y hasta cu¨¢ndo? Hace 200 a?os un sesudo aragon¨¦s vislumbr¨® como nadie cu¨¢n terribles son los desastres de la guerra cuando duerme la raz¨®n. Qu¨¦ fr¨¢gil es la memoria, se?oras y se?ores, y lamentablemente qu¨¦ largo el olvido.

Isabel Pascual Cebri¨¢n. Zaragoza

Apostar por la ciencia

Encuentro que en el acuerdo de gobierno del PSOE y Sumar se habla algo de ciencia. No est¨¢ mal, pero no nos conformamos. Uno de los puntos habla de retener el talento. Para esto, es absolutamente necesario que se d¨¦ soluci¨®n a las fallidas ayudas Margarita Salas y Mar¨ªa Zambrano. Miles de investigadores nos vimos atra¨ªdos por las promesas de estabilizaci¨®n que ahora son un callej¨®n sin salida. Para retener este talento ser¨ªa interesante que, antes de la finalizaci¨®n de dichas ayudas el 31 de diciembre de 2024, se consiguiera que estos investigadores retornados no tuvieran que volverse a marchar.

Miguel ?ngel Fern¨¢ndez. Coslada (Madrid)

Ef¨ªmera memoria

Haciendo un recopilatorio mental de las series y pel¨ªculas que he visto a lo largo de los ¨²ltimos meses, he sido consciente de lo ef¨ªmeras que han resultado. Soy capaz de recordar todos o la mayor¨ªa de los t¨ªtulos, argumentos y g¨¦neros, pero no de recordar los finales, nombres de los personajes, e incluso escenas clave. Es francamente alarmante. Esto me hizo reflexionar sobre las cantidades exageradas de contenido que consumimos diariamente y c¨®mo pasan al olvido al instante. La sobrecarga de informaci¨®n a la que estamos expuestos es una causa, pero no puede ser tambi¨¦n la excusa. Debemos obligarnos a procesar lo que consumimos, y esto se consigue y se solidifica a trav¨¦s de la discusi¨®n y la reflexi¨®n, pero tambi¨¦n, y sobre todo, siendo conscientes de por qu¨¦ consumimos un contenido.

Irene Rovira Veciana. Barcelona

Palabras vac¨ªas

Muchas veces, tachar a alguien de nazi, comunista, fascista, terrorista, antisemita o infiel quiere provocar en quien escucha una fuerte reacci¨®n emocional. El empleo de estas palabras a la ligera las vac¨ªa de contenido porque con frecuencia no describen los hechos que se quieren se?alar. Hay que estar atentos especialmente cuando las utilizan los gobiernos porque pueden tener un uso interesado: no solo quieren apuntar a una persona, sino amedrentarla, silenciarla, deshumanizarla, quitar legitimidad a cualquier reclamo o, incluso, justificar la violencia. La banalizaci¨®n de las palabras, m¨¢s que aclarar una realidad, genera confusi¨®n y desconcierto.

Emanuela Cardoso. Rivas-Vaciamadrid (Madrid)