La jungla de los contratos a los cient¨ªficos ¡®posdoc¡¯: incertidumbre, agravios y retrocesos
La Federaci¨®n de J¨®venes Investigadores denuncia en un estudio las enormes diferencias de sueldo entre posdoctorales. Renuncian a buenos salarios para acceder a puestos fijos con 40 a?os


Hay un dicho que circula desde hace a?os entre los posdoctorales: el trabajo es buscar el siguiente contrato y, en los ratos libres, investigar. Porque lograr una n¨®mina estable se convierte en una carrera de obst¨¢culos llena de incertidumbre y meses en paro mientras se resuelve una convocatoria, pese a sus grandes esfuerzos hechos para leer la tesis, dar clase y hacer m¨¦ritos cient¨ªficos para progresar: los contratados doctor ¨Dplaza indefinida, pero no funcionario en la Universidad¨D tienen una media de 48 a?os y los profesores titulares, de 54. La Federaci¨®n de J¨®venes Investigadores (FJI) acaba de editar un estudio, ?Cu¨¢nto cobra un[a] posdoc en Espa?a?, con el que pretende resaltar las grandes diferencias salariales que hay entre ellos a igual trabajo. ¡°No hay una figura de posdoc claramente definida, con sus categor¨ªas y sus retribuciones tabuladas¡±, argumenta Francisco Palaz¨®n, su portavoz. ?l ha pasado a cobrar casi la mitad: de un contrato Marie Sk?odowska Curie (3.000 euros), de la Comisi¨®n Europea, a uno nacional Juan de la Cierva Incorporaci¨®n (1.700 euros) en 12 pagas en ambos casos.
Al ir cada convocatoria por libre, ¡°hay gente trabajando exactamente al mismo nivel, en el mismo sitio, con las mismas responsabilidades y experiencias y uno cobra el doble o la mitad que el otro, seg¨²n est¨¦n con un programa auton¨®mico o nacional, por ejemplo¡±, prosigue Palaz¨®n. ¡°Esta desregulaci¨®n tambi¨¦n hace que puedas perder salario conforme avanzas en la carrera, porque, como todo depende de las convocatorias competitivas ¨Dayudas a la contrataci¨®n, todav¨ªa mal llamadas becas muchas veces¨D, nada te asegura la progresividad¡±.
Si la situaci¨®n del matem¨¢tico Manuel P¨¢jaro no mejora, no descarta optar por la ense?anza en secundaria porque hizo el m¨¢ster de profesorado.
A la FJI no le gusta que el programa Juan de la Cierva Formaci¨®n, para posdocs juniors, se llame as¨ª porque ¡°apela a una labor formativa m¨¢s que laboral, dando lugar incluso a que se puedan firmar contratos formativos o en pr¨¢cticas. Es una aberraci¨®n¡±. Naci¨® en 2008 y, ante la falta de subida de sus 22.500 euros brutos de retribuci¨®n, llegaron a perder un 25% de poder adquisitivo. En la ¨²ltima convocatoria su sueldo ha crecido hasta los 25.350 euros, una cuant¨ªa que califican de ¡°insuficiente e inapropiada para estas ayudas posdoctorales altamente competitivas¡±. El contrato Juan de la Cierva Incorporaci¨®n, para investigadores m¨¢s experimentados, va a desaparecer.
El gallego Manuel P¨¢jaro, de 34 a?os y experto en matem¨¢ticas computacionales, logr¨® en 2019 una Juan de la Cierva Formaci¨®n. Tiene dos hijos de uno y tres a?os y eso ¡°pesa¡± para quedarse en la Universidad de la Coru?a. El sueldo fijo de su mujer, maestra en un colegio, le permite respirar tranquilo, aunque si su situaci¨®n no mejora no descarta optar por la ense?anza en secundaria; ya hizo el m¨¢ster de profesorado. ¡°La universidad est¨¢ bien porque afronta problemas que nos interesan a todos y me gusta la docencia¡±.
La valenciana Paloma Vidal, tambi¨¦n de 34 a?os, va a ganar ahora menos que en su casilla de salida a cambio de optar por la estabilidad. ¡°Mi primer contrato posdoctoral fue auton¨®mico, de la Generalitat Valenciana, muy bien pagado: 2.300 euros¡±. Era por dos a?os en Francia, pero al a?o y medio lo abandon¨® al lograr un contrato Juan de la Cierva Formaci¨®n de 1.200 euros netos en la Universidad de Las Palmas para investigar los trabajos en madera de los abor¨ªgenes canarios. Vidal hubiese preferido agotar el contrato valenciano, pero ¡°los plazos de inicio son muy estrictos¡±. As¨ª que se fue a Canarias y de all¨ª salt¨® a Basilea (Suiza) con una Curie de 5.000 euros a la que se presentaron 11.000 candidatos para un millar de plazas. Nunca imagin¨® lograrlo en su primer intento. ¡°Suiza es muy cara. La mitad se te va en un seguro privado, casa, comida, pero no vivo ahogada¡±. Aunque con la Curie se aplica un coeficiente de nivel de vida, no cree que en Portugal, por ejemplo, ¡°se gane menos de 4.000¡å.
Llevo dando tumbos seis a?os desde la tesis. Han sido muy intensos, cambiando de casa¡±, afirma una investigadora que ha renunciado a 3.350 euros de salario
¡°La cuesti¨®n es el recorrido. Si volvemos a Espa?a no es con contratos de excelencia, sino por lazos familiares, tu pareja...¡±, sostiene Vidal, que de nuevo hace las maletas para trabajar con un contrato Juan de la Cierva Incorporaci¨®n (para seniors) de 1.650 euros en la Universidad de la Laguna (Tenerife). Es decir, le ingresar¨¢n en la cuenta 550 euros menos que hace seis a?os y 3.350 euros menos que en Basilea. Aun as¨ª, se siente ¡°afortunada¡±, porque con su pareja juntan dos sueldos del programa Juan de la Cierva. ¡°Mi esperanza es que se termine el viaje. Llevo dando tumbos seis a?os desde la tesis. Han sido muy intensos, cambiando de casa...¡±. No hay compromiso de estabilizar a los de la Cierva, pero las universidades peque?as o medianas como La Laguna lo hacen.
Muchos ganan menos que el M3 pensado para los que tienen un t¨ªtulo de m¨¢ster en la Administraci¨®n.

El ingeniero biom¨¦dico Aitor Tejo, de 26 a?os, es mucho m¨¢s joven e inexperto que Paloma Vidal y, sin embargo, reconoce su suerte porque su futuro parece menos azaroso. Es vasco y ha podido por ello optar a un contrato de su comunidad que equipara su sueldo al de un ayudante doctor (1.800 euros netos), m¨¢s un plus de 10.000 euros al a?o por desplazamiento y otros 10.000 el que viene. Un ejemplo, pues, de las enormes diferencias entre convocatorias. Desde este febrero trabaja en impresi¨®n 3D en la Universidad de Utrech (Pa¨ªses Bajos) y en dos a?os se instalar¨¢ en la Universidad del Pa¨ªs Vasco.
La FJI cree que deb¨ªa crearse un nuevo grupo profesional, el M4, para incluir a los posdoctorales en el convenio colectivo ¨²nico para el personal laboral de la Administraci¨®n General del Estado. Muchos ganan menos que el M3, pensado para los que tienen un t¨ªtulo de m¨¢ster. Y la federaci¨®n cree que urge cerrar un estatuto que regule sus dispares retribuciones. La Ley de la Ciencia, que se tramita ahora, a?ade una nueva modalidad contractual indefinida (contrato de actividades cient¨ªfico-t¨¦cnicas) cuyos detalles a¨²n no conocen.
En dos a?os Ciencia, a trav¨¦s de la Agencia Estatal de Investigaci¨®n (AEI), ha aumentado en un 76% los programas Juan de la Cierva y Ram¨®n y Cajal. Estos ¨²ltimos, para seniors, tuvieron un sueldo bruto de 33.250 euros durante cinco a?os desde 2008 y no han dejado de perder poder adquisitivo, hasta un 17,6%. No se actualiz¨® el salario hasta 2019, y en 2020 se subi¨® hasta los 39.900 euros brutos a los tres a?os de contrato (si se pasa una criba), pero la medida no tiene car¨¢cter retroactivo.
Somos el ¨²nico sector en el que cuanta m¨¢s experiencia, menos sueldo. El sistema no te da nada y te pide mucho¡±, dice un cient¨ªfico.
Un cient¨ªfico de 41 a?os que prefiere no identificarse, tras 15 en el extranjero (Michigan y Londres), ha vuelto a una universidad de Catalu?a junto a su mujer, investigadora tambi¨¦n sin puesto fijo. Atesora tantos m¨¦ritos cient¨ªficos que est¨¢ acreditado por la agencia de evaluaci¨®n catalana (AQU) como catedr¨¢tico, cuando nadie le dar¨ªa un cr¨¦dito en su situaci¨®n. Gana 2.000 euros y puede presentarse a los sexenios de investigaci¨®n [que premian la producci¨®n cient¨ªfica con un complemento salarial], pero sin remuneraci¨®n. La pareja vive ¡°mucho menos holgada¡± que en Londres (all¨ª cobraba 3.500 euros), pero disfruta de la ayuda familiar. ¡°Hemos vuelto porque nos daba ansiedad con dos ni?os estar en el pa¨ªs tras el Brexit, que no sabes qu¨¦ va a pasar pol¨ªtica y cient¨ªficamente a largo plazo¡±, cuenta. ¡°Somos el ¨²nico sector en el que cuanta m¨¢s experiencia, menos sueldo. El sistema no te da nada y te pide mucho¡±.
Como pronto, va a estabilizarse con 45 a?os y para entonces tendr¨¢ al menos tres sexenios de investigaci¨®n. Apenas el 2% de los profesores titulares en las universidades tienen menos de 40 a?os. Para los investigadores que han logrado el certificado I3 ¨Dreconoce la trayectoria cient¨ªfica, entre ellos, a los cajales¨D se reserva el 15% de las nuevas plazas en la Universidad.
Miguel ?ngel Fern¨¢ndez, de 36 a?os, ha obtenido un contrato Mar¨ªa Zambrano en la Aut¨®noma de Madrid: 2.200 euros netos de salario. El excepcional programa del Ministerio de Universidades con fondos de la Uni¨®n Europea ¨Dno habr¨¢ en principio otro de la Comisi¨®n¨D trata de recuperar 1.400 talentos que se fueron al extranjero con un contrato de tres a?os atractivo para quienes ans¨ªan volver con un sueldo ¡°aceptable¡± pero sin estabilidad. Fern¨¢ndez trabaja en astrobiolog¨ªa en entornos extremos y se ha pasado los ¨²ltimos dos a?os en la McGill University de Canad¨¢. En ese per¨ªodo, a 25 grados bajo cero, se plante¨® si tanto esfuerzo merece la pena. ¡°Siempre voy con la lengua fuera. En la tesis ten¨ªa tiempo para aprender, pero ahora produces para competir para otro trabajo temporal¡±. Se?ala un problema en los contratos Zambrano, porque duran tres a?os y la direcci¨®n de proyectos p¨²blicos de envergadura cuatro a?os, por lo que no puede solicitarlos. Por eso trata ahora de conseguir fondos de la Fundaci¨®n BBVA para investigar la microbiolog¨ªa de unas cuevas de Tenerife y Lanzarote y ver si le afecta el cambio clim¨¢tico.
El qu¨ªmico Jose Manuel Mar¨ªn Beloqui, 33 a?os, es otro de los zambrano. Ha vuelto a la Universidad de M¨¢laga tras a?os en Reino Unido ¨Den el Imperial College of London y el University College of London¨D y se siente ¡°un privilegiado¡±. ¡°Si me comparo con el resto, estoy bastante mejor¡±, reconoce. Un Juan de la Cierva Incorporaci¨®n, de experiencia parecida, a su lado puede estar cobrando 500 euros menos al mes. El futuro de Mar¨ªn Beloqui, que trabaja con placas solares, pasa por la tasa de reposici¨®n de quienes se jubilan y ahora est¨¢ en el 120% ¨Dpor cada 10 que se van entran en plantilla 12¨D, y el 90% dejar¨¢ su plaza en la pr¨®xima d¨¦cada. ?l entiende que sus compa?eros estiren su permanencia hasta los 70 a?os: ¡°Est¨¢s c¨®modo y ejercitas la mente¡±.
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