Un ¡®se acab¨®¡¯ sin vuelta atr¨¢s

Los colectivos feministas saldr¨¢n a las calles hoy ¡ªD¨ªa Internacional para la Eliminaci¨®n de la Violencia contra la Mujer¡ª espoleadas por los ¨¦xitos de la lucha protagonizada por las jugadoras de la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol, campeonas del mundo en agosto pasado. El beso no consentido de Luis Rubiales, presidente de la Federaci¨®n Espa?ola, a la futbolista Jenni Hermoso provoc¨® una ola de indignaci¨®n que ha cohesionado de nuevo al feminismo. La actuaci¨®n de Rubiales y el apoyo que recibi¨® de su entorno en un intento de convertir a la v¨ªctima en c¨®mplice, descubri¨® hasta qu¨¦ punto las estructuras del deporte est¨¢n impregnadas de machismo.

Como el MeToo en movilizaciones anteriores, el Se acab¨® de las futbolistas volver¨¢ este s¨¢bado a la calle como eslogan, elegido por el Ministerio de Igualdad junto al Ahora ya Espa?a es otra para este 25-N. Hay que celebrar que en la mayor¨ªa de las ciudades espa?olas las diversas sensibilidades del feminismo salgan juntas en manifestaciones unitarias. En Madrid, en cambio, las heridas abiertas por las diferencias en torno a la ley trans y a la gesti¨®n de la ley del solo s¨ª es s¨ª siguen sin cerrarse y de nuevo habr¨¢ dos marchas separadas: una convocada por la Comisi¨®n 8-M bajo el lema Se acab¨®, nuestra lucha es global ¡ªa la que ya ha anunciado que acudir¨¢ la exministra Irene Montero¡ª y otra bajo el lema Unidad ciudadana y respuesta institucional, a la que acudir¨¢ la nueva titular de Igualdad, Ana Redondo, y convocada por la organizaci¨®n que lleva haci¨¦ndolo desde 1997, el Foro 25-N. La batalla en torno a ese ministerio ha tenido momentos poco edificantes. Es deseable que Redondo encuentre la colaboraci¨®n necesaria para propiciar el reencuentro de las diferentes corrientes del feminismo. La divisi¨®n no ayuda a la lucha contra la violencia machista ahora que se da un repunte de los feminicidios: en lo que llevamos de a?o, 52 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas, dos m¨¢s que en todo 2022.

La confrontaci¨®n debilita al movimiento ante la reacci¨®n de un neomachismo que se crece justo cuando la extrema derecha se lanza a una guerra cultural cuyo objetivo es hacer retroceder las pol¨ªticas de igualdad. La presi¨®n de Vox, del que dependen gobiernos del PP en comunidades y ayuntamientos, amenaza con revertir algunos de los logros conseguidos. Ser¨ªa intolerable que se eliminaran ayudas y servicios, pero la normativa es de obligado cumplimiento para todas las autonom¨ªas. En ella figura la creaci¨®n de los centros de crisis para ofrecer una atenci¨®n integral a las v¨ªctimas de violencia machista. De momento solo hay cuatro en toda Espa?a, pero cada provincia debe tener uno antes de 2025. Entre las asignaturas pendientes figura tambi¨¦n la formaci¨®n en violencia de g¨¦nero de los profesionales que trabajan en servicios sociales, sanitarios y de seguridad. Este Se acab¨® no debe tener vuelta atr¨¢s.