El mayor bufete de EE UU canaliza la riqueza global hacia para¨ªsos fiscales
Baker McKenzie ha sido pionero en la evasi¨®n fiscal empresarial. Ahora representa a destacados magnates, fabricantes de armas y reg¨ªmenes autoritarios que manejan la econom¨ªa en la sombra

Un asesor del primer ministro de Malasia necesitaba ayuda para gestionar con personas interpuestas empresas en la capital, Kuala Lumpur, y en Hong Kong. Los fiscales afirman que ¨¦l y sus socios las utilizaron para desviar cientos de millones de d¨®lares procedentes de un fondo de desarrollo econ¨®mico del Gobierno.
Un fabricante ruso de rifles kal¨¢shnikov, sometido a sanciones internacionales por conducta indebida, quer¨ªa vender sus acciones de una gran mina de cobre a una turbia empresa de Mongolia. La venta desat¨® una investigaci¨®n por corrupci¨®n contra el entonces primer ministro de este ¨²ltimo pa¨ªs.
El gigante tecnol¨®gico Apple estaba buscando un refugio fiscal para depositar en el exterior su monta?a de dinero en efectivo.
Todos ellos ten¨ªan un amigo en el bufete de abogados m¨¢s grande de Estados Unidos. Cuando los multimillonarios, las multinacionales y las personas con conexiones pol¨ªticas pretenden ocultar su riqueza o evadir impuestos, recurren con frecuencia a Baker McKenzie, el gigante con sede en Chicago.
Con 4.700 abogados en 46 pa¨ªses y unos ingresos de 2.900 millones de d¨®lares (2.500 millones de euros), Baker McKenzie se autodenomina ¡°el bufete global original¡±. Forma parte de una docena de despachos estadounidenses y brit¨¢nicos que han creado grandes redes internacionales y han transformado la profesi¨®n jur¨ªdica. Baker McKenzie asegura que est¨¢ comprometida con el Estado de derecho y con las m¨¢s elevadas normas internacionales en materia de ¨¦tica, derechos humanos y pol¨ªticas anticorrupci¨®n. ¡°Somos veraces y transparentes¡±, afirma el bufete en su c¨®digo de conducta empresarial. ¡°No hacemos negocios con personajes de mala reputaci¨®n¡±.

Detr¨¢s de estas declaraciones se esconde una realidad evidente: Baker McKenzie es un arquitecto y un pilar de la econom¨ªa sumergida, a menudo llamada offshore, que beneficia a los ricos a costa de las arcas de los pa¨ªses y del bolsillo del ciudadano de a pie.
Una investigaci¨®n del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ) revela c¨®mo Baker McKenzie ha ayudado a las multinacionales y a los adinerados a evadir impuestos y a evitar el escrutinio mediante el uso de sociedades instrumentales, fideicomisos y complejas estructuras en para¨ªsos fiscales. Estos instrumentos, envueltos en el secreto, albergan enormes riquezas: casas, yates, acciones y dinero que, en ocasiones, tienen un origen turbio.
Entre los clientes se encuentran personas y empresas relacionadas con la corrupci¨®n pol¨ªtica, pr¨¢cticas empresariales fraudulentas y reg¨ªmenes autoritarios.
Jho Low, que sirvi¨® de asesor de Najib Razak, el entonces primer ministro de Malasia, recurri¨® profusamente a las filiales de Baker McKenzie. Low es ahora un fugitivo, acusado de perge?ar el saqueo multimillonario de un fondo de inversi¨®n p¨²blico; est¨¢ reclamado por Malasia, Estados Unidos y Singapur.

Rostec, el fabricante de armas ruso que vendi¨® su participaci¨®n en la mina de Mongolia, forma parte de la media docena de empresas rusas controladas por el Estado que han adjudicado contratos a Baker McKenzie, al tiempo que se enfrenta a sanciones internacionales.
Y Apple, que recurri¨® a Baker McKenzie para que la ayudase a encontrar un para¨ªso fiscal, se ha convertido en el preclaro ejemplo internacional de la evasi¨®n fiscal de las empresas en para¨ªsos fiscales.
La investigaci¨®n del ICIJ, basada en una nueva filtraci¨®n de registros confidenciales, los Papeles de Pandora, ofrece ahora una mirada desde dentro sobre el papel que desempe?a un selecto despacho de abogados en la econom¨ªa opaca.
Entre el marem¨¢gnum de banqueros, contables, abogados y agentes de creaci¨®n de empresas instrumentales, sobresale Baker McKenzie. El ICIJ descubri¨® que este despacho desempe?¨® un papel en los asuntos de m¨¢s de 440 empresas registradas en para¨ªsos fiscales.
Los documentos filtrados revelan que el bufete de abogados ayud¨® a crear sociedades instrumentales en Chipre para el gigante de la alimentaci¨®n y el tabaco RJR Nabisco. Para Nike, colabor¨® en crear un refugio fiscal neerland¨¦s. Seg¨²n documentos judiciales de Estados Unidos, sus abogados ayudaron a Facebook a redirigir miles de millones de d¨®lares de beneficios a Irlanda, un pa¨ªs de baja tributaci¨®n.
Frente a esos datos, Baker McKenzie se?alaba en una serie de declaraciones escritas al ICIJ que procura prestar el mejor asesoramiento jur¨ªdico y fiscal para ayudar a sus clientes a orientarse en el marco de unas normas mundiales ¡°sumamente complejas, en constante evoluci¨®n y a menudo contradictorias¡±.
¡°La transparencia y la responsabilidad son elementos integrales de este tipo de asesoramiento¡±, aseguraba su portavoz John McGuinness. ¡°Nos esmeramos en garantizar que nuestros clientes se adhieran tanto a la ley como a las mejores pr¨¢cticas¡±.
Vista panor¨¢mica de un pionero
Los documentos analizados para esta investigaci¨®n aportan una panor¨¢mica del papel de Baker McKenzie como grupo de presi¨®n sobre leyes y reglamentos en todo el mundo, incluida su labor respecto a las medidas relativas al blanqueo de dinero y los refugios fiscales. El bufete, actuando en nombre de los grandes bancos y las grandes empresas tecnol¨®gicas, se ha opuesto a las propuestas destinadas a reforzar la supervisi¨®n de la regulaci¨®n financiera y las leyes fiscales.
En Emiratos ?rabes Unidos, Baker McKenzie se apunt¨® un tanto por ayudar a crear ¡°zonas libres¡±, ¨¢reas de bajos impuestos y normativas permisivas que seg¨²n muchos cr¨ªticos han propiciado las actividades il¨ªcitas. En Australia, el bufete se opuso a una medida que pretend¨ªa atajar la evasi¨®n fiscal en para¨ªsos fiscales por parte de las grandes compa?¨ªas. Y en Estados Unidos, mediante presiones para favorecer a bancos multinacionales, quiso eximir a m¨¢s clientes extranjeros de las reglas de comprobaci¨®n debida con las que se pretend¨ªa impedir el blanqueo de capitales.
En conjunto, el ICIJ descubri¨®, como parte de la investigaci¨®n de los Papeles de Pandora, que m¨¢s de 300 abogados de Baker McKenzie han asesorado o representado a organismos estatales, nacionales o internacionales en asuntos como la legislaci¨®n fiscal internacional y las reformas anticorrupci¨®n. M¨¢s de 220 empleados de Baker McKenzie en 35 pa¨ªses han ocupado puestos en organismos gubernamentales como los ministerios de Justicia, las oficinas tributarias, la Comisi¨®n de la UE o las oficinas de jefes de Estado.
Aunque no hay registros internos de Baker McKenzie entre los archivos filtrados, el bufete aparece en m¨¢s de 7.500 documentos, mucho m¨¢s que cualquier otro gran despacho de abogados estadounidense.
Muchos de los documentos en los que se menciona a Baker McKenzie proceden de tres proveedores en para¨ªsos fiscales a los que el bufete o sus clientes encargaron trabajos: Trident Trust, con oficinas en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas; Alem¨¢n, Cordero, Galindo & Lee (Alcogal), un bufete de abogados con sede en Panam¨¢; y Asiaciti Trust, con sede en Singapur.
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Baker McKenzie, uno de los bufetes de abogados corporativos m¨¢s conocidos del mundo, es tambi¨¦n pionero en el sector. Ha adoptado un modelo que permite a las empresas asociadas en el extranjero beneficiarse de una marca global sin compartir los beneficios o la responsabilidad. Fue uno de los primeros defensores de las estrategias de planificaci¨®n fiscal que permiten a las grandes empresas y a las personas adineradas trasladar sus beneficios a para¨ªsos fiscales sin tener que trasladar su operativa all¨ª.
La b¨²squeda de para¨ªsos fiscales es desde entonces el pan de cada d¨ªa en el sector, una estrategia por la cual el ciudadano de a pie tiene que soportar la carga financiera de la que se libran los ricos y poderosos.
Los abogados desempe?an una funci¨®n fundamental.
Destacadas organizaciones internacionales, como la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE) y el Grupo de Acci¨®n Financiera Internacional, afirman que la escasa regulaci¨®n de los abogados y otros profesionales es un factor clave en la delincuencia financiera mundial.
Pero a diferencia de los banqueros y otros intermediarios en para¨ªsos fiscales, los abogados han escapado al escrutinio, en parte debido al privilegio abogado-cliente, una doctrina que les obliga a mantener la confidencialidad de la informaci¨®n de sus representados. En algunos pa¨ªses, ese privilegio legal exime a los abogados de informar sobre actividades como el blanqueo de dinero a los reguladores gubernamentales¡±.
Los abogados tienen el deber de hacer algo m¨¢s que encontrar lagunas legales para el cliente y cobrar cuantiosos honorarios, comentaba Richard Painter, catedr¨¢tico de Derecho de la Universidad de Minnesota, que fue abogado jefe de ¨¦tica del ex presidente de Estados Unidos George W. Bush. ¡°Que algo no sea ilegal no significa que est¨¦ bien¡±, a?ad¨ªa.
Milton Cheng, presidente mundial de Baker McKenzie, con sede en Hong Kong, declin¨® conceder una entrevista. El bufete rehus¨® hacer comentarios sobre asuntos de clientes, citando ¡°obligaciones de confidencialidad y privilegio legal¡±.

El portavoz McGuinness, radicado en Singapur, se?ala que el bufete lleva a cabo estrictamente las comprobaciones debidas y realiza una comprobaci¨®n global de los antecedentes de todos sus posibles clientes. Afirma que Baker McKenzie discrepaba ¡°profundamente¡± con cualquier afirmaci¨®n de que tuviera muchos clientes de riesgo o de mala reputaci¨®n.
¡°En ocasiones, nos encontramos con que los clientes realizan posteriormente actividades que no concuerdan con nuestra comprobaci¨®n debida inicial, o salen a la luz nuevos hechos o sucesos que nos llevan a dejar de representarles¡±, dijo.
Baker McKenzie no respondi¨® directamente a muchas preguntas sobre su papel en la econom¨ªa offshore o por qu¨¦ su nombre aparece tan frecuentemente en los registros de proveedores de servicios en para¨ªsos fiscales. McGuinness ha comentado que Baker McKenzie remite de forma rutinaria clientes y asuntos legales a otros despachos y proveedores de servicios en jurisdicciones donde no tienen oficina.
Chicago: un trayecto en taxi hacia un nuevo mundo
Russell Baker naci¨® en 1901 en el seno de una familia de granjeros en Portage, Wisconsin. Cuando ten¨ªa 12 a?os, la familia se traslad¨® a Texas, seg¨²n cuenta la historia del bufete. A los 16 a?os, los Baker se mudaron a Nuevo M¨¦xico, donde Russell aprendi¨® espa?ol y se apasion¨® por diferentes culturas, lo que le llev¨® a crear el primer bufete mundial. Se traslad¨® a Chicago para asistir a la Universidad de Chicago y a su facultad de Derecho. Con un amigo de la facultad, fund¨® su primer despacho de abogados, especializado en asistir a ciudadanos mexicanos, en 1925.
En 1942, Estados Unidos aprob¨® la Ley de Corporaciones Comerciales del Hemisferio Occidental, que ofrec¨ªa exenciones fiscales a las empresas que fabricaban en Latinoam¨¦rica. Baker ide¨® una manera de que las empresas estadounidenses pudieran beneficiarse de esta ley, trasladando sus beneficios a jurisdicciones de baja fiscalidad.
As¨ª comenz¨® lo que Baker McKenzie denomina una de las mayores pr¨¢cticas de planificaci¨®n fiscal del mundo, orientada a ayudar a las empresas a sacar el m¨¢ximo provecho de las complejidades del extenso c¨®digo fiscal estadounidense. ¡°El contribuyente tiene derecho a organizar sus asuntos de la manera que desee¡±, escrib¨ªan Baker y un compa?ero en un art¨ªculo publicado en 1957.

En 1948, Baker coincidi¨® en un taxi con John McKenzie, un abogado experto en litigios de Chicago, y al poco tiempo ya estaban considerando la idea de crear un bufete internacional. Al a?o siguiente fundaron Baker & McKenzie. En 1955 abri¨® su primera oficina offshore en Caracas, Venezuela.
En un art¨ªculo publicado en Wisconsin Law Review dos a?os despu¨¦s, Baker y un coautor recomendaban constituir sociedades en Venezuela y otros pa¨ªses que permitieran a los propietarios permanecer en el anonimato mediante el uso de lo que se conoce como acciones al portador. Las acciones al portador son certificados de acciones que no necesitan estar registrados a nombre de una persona o compa?¨ªa concreta. ¡°En ning¨²n lugar de Estados Unidos es posible formar una sociedad con acciones al portador¡±, afirmaban Baker y su colega. ¡°Esto es posible en una serie de pa¨ªses extranjeros de primera clase con un potencial econ¨®mico pr¨¢cticamente ilimitado¡±.
Baker McKenzie se expandi¨® velozmente desde finales de la d¨¦cada de 1950, y abri¨® 20 oficinas en 15 a?os, en lugares lejanos como S?o Paulo o Sydney. Se convirti¨® en el gigante no convencional del sector, con 76 oficinas en todo el mundo y 4.700 abogados, el mayor n¨²mero de cualquier bufete estadounidense, seg¨²n National Law Journal.
A medida que iba creciendo el sector de los para¨ªsos fiscales, Baker McKenzie se convirti¨® en un experto en ayudar a las empresas a dirigir sus beneficios, al menos sobre el papel, a pa¨ªses con tipos impositivos bajos. Cuando un gobierno se movilizaba para tapar una laguna legal, Baker McKenzie u otros bufetes buscaban otro nuevo.
Desde las ¡°fusiones¡± a ¡®McLey¡¯, con un aire suizo
Por ejemplo, las ¡°fusiones¡±. Una empresa se fusiona con otra, normalmente m¨¢s peque?a, en una jurisdicci¨®n de baja fiscalidad, logrando a menudo un gran ahorro de impuestos. La estrategia surgi¨® en la d¨¦cada de 1980 con las ¡°fusi¨®n de buz¨®n¡±, en las que las empresas estadounidenses creaban empresas instrumentales en un apartado de correos en el para¨ªso fiscal de las Bermudas. En 2002, el entonces senador estadounidense Max Baucus, dem¨®crata de Montana, denunci¨® a Baker McKenzie, citando el asesoramiento del bufete a Helen of Troy, una empresa estadounidense de cosm¨¦ticos que se constituy¨® nuevamente en Bermudas en 1994.
¡°Esta cuesti¨®n de las fusiones me parece un gran problema, tambi¨¦n quienes las fomentan¡±, afirmaba Baucus en una audiencia sobre los refugios fiscales. ¡°Promotores bien reconocidos que las fomentan¡±. Al denunciar estas ¡°farsas¡± que ¡°roban al resto de los contribuyentes¡±, el Congreso aprob¨® una legislaci¨®n contra la inversi¨®n-fusi¨®n que se promulg¨® en 2004.
Desde que cre¨® sus primeros despachos en el exterior, Baker McKenzie siempre se ha promocionado como una ¡°ventanilla ¨²nica¡±. Se inclinaba por un modelo de franquicia, con despachos locales independientes que compart¨ªan la misma marca. Por el camino, el bufete se gan¨® el apodo de ¡°McLey¡±.
A principios de la d¨¦cada de 2000, Christine Lagarde, una destacada abogada del despacho de Par¨ªs y la primera mujer presidenta mundial de Baker McKenzie, se propuso imponer normas uniformes para los despachos miembros en todo el mundo. Bajo el mando de Lagarde, ahora presidenta del Banco Central Europeo, Baker McKenzie se reorganiz¨® como una ¡°verein [sociedad] suiza¡±, centralizando todas sus operaciones de marca, administrativas y de financiaci¨®n en un nuevo centro corporativo en Pa¨ªses Bajos.

Sin embargo, los despachos nunca se unificaron realmente. Baker McKenzie se mantuvo como una confederaci¨®n de despachos miembros independientes que compart¨ªan la marca, los servicios administrativos y el marketing, pero no as¨ª los beneficios o la responsabilidad legal¡±.
Otros importantes bufetes siguieron su ejemplo.
Hong Kong: confecci¨®n de una ciudad de secretos
Mientras las dependencias caribe?as de Reino Unido ya florec¨ªan como para¨ªsos fiscales en la d¨¦cada de 1970, Hong Kong, al otro lado del mapa offshore, floreci¨® hasta convertirse en el principal para¨ªso fiscal y de secretos de Asia. Tambi¨¦n bajo la batuta de Reino Unido, la isla pas¨® del comercio a la banca, de las columnatas a las torres brillantes, y se convirti¨® en un patio de recreo para Wall Street y los ricos que nunca dej¨® que los sentimientos se interpusieran en el camino de los beneficios.
En esas lleg¨® Baker McKenzie. Su traslado a la isla en 1974 coincidi¨® con la metamorfosis de Hong Kong y allan¨® el camino para que el bufete se beneficiara posteriormente de la eclosi¨®n de China como potencia mundial.
Gracias a la innovaci¨®n, las alianzas locales y el cabildeo, Baker McKenzie ayud¨® a transformar Hong Kong en un centro financiero mundial, famoso por sus bajos impuestos, su alto grado de confidencialidad y sus m¨ªnimas normas.
En dos entrevistas por videollamada, el multimillonario de Hong Kong, Allan Zeman, contaba al ICIJ su viaje empresarial de Canad¨¢ a Hong Kong, y el papel desempe?ado por los abogados de Baker McKenzie. Afirmaba que acudi¨® al bufete para que le aconsejaran sobre la creaci¨®n de empresas en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas por razones de privacidad, no para evadir impuestos. ¡°Los impuestos de Hong Kong ya son lo suficientemente bajos¡±, se?alaba Zeman, y a?ad¨ªa que las sociedades an¨®nimas instrumentales ofrec¨ªan cierta protecci¨®n contra la atenci¨®n y las demandas no deseadas. ¡°Muchas veces tienes socios que simplemente prefieren que su nombre no est¨¦ asociado a algo¡±.
Zeman, de 73 a?os, se cri¨® en Canad¨¢ e hizo su fortuna comerciando con prendas de vestir por todo el mundo. Promovi¨® un distrito de ocio que estuvo muy de moda en Hong Kong y se convirti¨® en uno de los magnates empresariales m¨¢s destacados del pa¨ªs.
Zeman afirma que pag¨® a Baker McKenzie no solo para que le ayudara a mantener sus intereses financieros en privado, sino tambi¨¦n para que le asesorara sobre formas legales de eludir la estricta normativa de Hong Kong. El bufete, explicaba, es una ¡°ventanilla ¨²nica¡± que le ayuda a navegar por un entramado global de regulaciones en 36 pa¨ªses.
¡°Te dicen cu¨¢l es la mejor manera... y se aseguran de que lo haces todo bien a la primera, legalmente¡±, dec¨ªa Zeman, y remachaba: ¡°No salen baratos, pero merecen la pena¡±.
B. & McK. Nominee se encarg¨® de facilitar consejeros, accionistas y secretarios a centenares de empresas y empresarios de Hong Kong, entre ellos el socio de Zeman en el sector de la confecci¨®n, Bruce Rockowitz, as¨ª como a gigantes corporativos como Nike y Apple.
Ni Nike ni Apple respondieron a las preguntas sobre por qu¨¦ recurrieron al servicio de nominados de Baker McKenzie en Hong Kong. Nike afirmaba en un comunicado que se atiene a todas las normas locales. Apple se defin¨ªa como ¡°el mayor contribuyente del mundo¡±. Rockowitz no respondi¨® a las peticiones de comentarios.

Malasia: una carrera desenfrenada en un fraude de 4.500 millones de d¨®lares
Low Taek Jho, un carism¨¢tico v¨¢stago de una familia malasia bien relacionada, cre¨® su primera empresa cuando era un estudiante de empresariales en la Universidad de Pensilvania. Y regres¨® a casa donde empez¨® una carrera deslumbrante en las finanzas que le hizo ser tan rico que le dieron un nombre de tabloide, Jho Low. Adquiri¨® una participaci¨®n en El lobo de Wall Street, el gran ¨¦xito de taquilla de Hollywood de Martin Scorsese de 2013, y se hizo amigo de Paris Hilton, Leonardo DiCaprio y Miranda Kerr, la modelo de Victoria¡¯s Secret, a la que colm¨® de joyas valoradas en 8 millones de d¨®lares.

En 2004, Low empez¨® a confiar en Baker McKenzie y sus filiales, junto con un pu?ado de asociados de confianza, para construir una red de empresas en Malasia y Hong Kong. Entr¨® en un mundo de conseguidores pol¨ªticos, de discotecas exclusivas y de acuerdos de miles de millones de d¨®lares con los que sue?an la mayor¨ªa de los licenciados de facultades de empresariales. Low y sus asociados utilizaron las empresas para comprar hoteles de lujo en Nueva York y Beverly Hills, financiar inversiones de capital riesgo y canalizar fondos hacia Najib Razak, el por aquel entonces primer ministro de Malasia, seg¨²n muestran los registros judiciales.
Despu¨¦s de que Najib jurase su cargo como primer ministro en 2009, Low se convirti¨® en un conseguidor de acuerdos para un fondo de inversi¨®n del Gobierno para realizar proyectos de obras p¨²blicas y proporcionar buenos empleos a los malasios. El fondo, llamado 1Malaysia Development Berhad, se har¨ªa famoso por su abreviatura: 1MDB.
Lim Poh Seng, el secretario corporativo afiliado de Baker McKenzie, trabaj¨® para 1MDB desde el principio. Hace poco, reconoci¨® p¨²blicamente por primera vez que trabaj¨® como empleado para empresas de Jho Low como B&M Consultancy. Poco tiempo despu¨¦s, Wong & Partners, el despacho de abogados miembro de Baker McKenzie en Malasia, represent¨® al fondo 1MDB en una transacci¨®n de 1.000 millones de d¨®lares con una empresa petrolera saud¨ª privada llamada PetroSaudi. Se supon¨ªa que este acuerdo y otros financiar¨ªan proyectos de energ¨ªa y desarrollo. En vez de ello, una gran parte del dinero fluy¨® hacia empresas instrumentales y otras entidades opacas controladas por Low y sus asociados, seg¨²n las autoridades estadounidenses y malasias.
Los fiscales aseguran que se desviaron m¨¢s de 4.500 millones de d¨®lares de 1MDB hacia bolsillos privados a trav¨¦s de un laberinto de empresas instrumentales, empresas fiduciarias y cuentas bancarias en uno de los fraudes financieros m¨¢s importantes del mundo.
Se?ales de alarma por todas partes
Los expertos en lavado de dinero se?alan que Low encaja en la definici¨®n de libro de cliente de alto riesgo. Usaba cuentas en bancos suizos y empresas llenas de miembros de su familia. Y tambi¨¦n manten¨ªa estrechos v¨ªnculos con pol¨ªticos, incluido Najib, el ex primer ministro.
¡°Todo el mundo miraba para otro lado con Low¡±, afirma Keith Prager, un ex agente de aduanas estadounidense experto en lavado de dinero que revis¨® el caso para el ICIJ. ¡°Hab¨ªa se?ales de alarma por todas partes¡±.
La gu¨ªa ¨¦tica de Baker McKenzie aconseja a sus abogados que se hagan preguntas a s¨ª mismos para ayudarles a tomar las decisiones correctas: ¡°?Me avergonzar¨ªa si mis amigos o mi familia supieran que hice esto? ?Podr¨ªa esto da?ar a la empresa o a su reputaci¨®n? ?Me avergonzar¨ªa si esto se publicase en un blog o en una noticia?¡±

Baker McKenzie no respondi¨® a las preguntas sobre clientes particulares. McGuinness se?alaba que las normas contra el lavado de dinero y los criterios de diligencia debida han evolucionado, y algunos asuntos de clientes podr¨ªan haber ocurrido antes de que se aplicaran normas y criterios de control estrictos. ¡°Hemos mejorado nuestros sistemas con el paso de los a?os, y, actualmente, tenemos una s¨®lida gesti¨®n de toma de riesgos¡ Y siempre nos esforzamos por mejorar m¨¢s¡±, explica McGuinness.
Lim Poh Seng, el secretario corporativo afiliado de Baker McKenzie, declin¨® hacer comentarios sobre el caso Jho Low. Wong & Partners, la empresa miembro de Baker McKenzie en Malasia, no respondi¨® a las peticiones para hacer comentarios. Wong & Partners calific¨® previamente su papel en 1MDB estrictamente de ¡°asesoramiento¡± y dijo que no hab¨ªa hecho nada irregular.
Jho Low, de 39 a?os, lleva m¨¢s de cinco a?os escondido. Los intentos de encontrarle no han tenido ¨¦xito.
Miami: mansiones en el laberinto de dinero
Como jefe del grupo de gesti¨®n de patrimonio norteamericano de Baker McKenzie, Simon P. Beck es un conferenciante muy solicitado.
Beck es abogado, asesor fiscal y experto en fondos fiduciarios, y habla habitualmente en conferencias y en cursos de formaci¨®n del sector, que a veces se celebran en hoteles de cinco estrellas. Algunos de los temas son el uso de fondos fiduciarios y herramientas en para¨ªsos fiscales para proteger a los clientes de los acreedores y c¨®mo colocar activos fuera del alcance de familiares o mujeres divorciadas ¡°derrochadores u hostiles¡±.
Aunque trabaja en Nueva York, Beck tambi¨¦n forma parte del formidable equipo de expertos en fiscalidad y fondos fiduciarios de Miami de Baker McKenzie, que ha asesorado a algunas de las personas m¨¢s ricas del mundo sobre c¨®mo proteger sus fortunas. Como muestran los Papeles de Pandora, a menudo la soluci¨®n es ocultarlas en una empresa instrumental o en un fondo fiduciario creado en un para¨ªso fiscal.
Desde sus oficinas del 17? piso a una manzana de Cayo Vizca¨ªno, la oficina de Miami ha gestionado docenas de empresas y fondos fiduciarios an¨®nimos para clientes extranjeros.
El copropietario de los Ottawa Redblacks, un equipo de la liga de f¨²tbol americano canadiense, es un cliente que buscaba ¡°aislamiento¡± de los impuestos de sucesiones y donaciones estadounidenses. Igual que un ejecutivo de seguros peruano al que ahora se investiga por corrupci¨®n p¨²blica relacionada con el esc¨¢ndalo de la construcci¨®n de Odebrecht y la madre de 100 a?os de un condenado por evasi¨®n fiscal y blanqueo de dinero.
El propio Beck gestionaba los asuntos de Thais Neves Birmann, la ex mujer de Daniel Birmann, un antiguo financiero, banquero y accionista en una de las empresas de munici¨®n m¨¢s grandes de Latinoam¨¦rica.
En 2005, las autoridades brasile?as multaron a Daniel Birmann con unos 90 millones de d¨®lares por beneficiarse indebidamente con la reestructuraci¨®n del fabricante electr¨®nico SAM Industrias SA. En aquella ¨¦poca, era la multa m¨¢s grande que hab¨ªan impuesto nunca los reguladores burs¨¢tiles brasile?os. Birmann se declar¨® en quiebra y supuestamente escondi¨® activos transfiri¨¦ndolos a miembros de su familia, como Neves Birmann.
Una d¨¦cada m¨¢s tarde, mientras la quiebra segu¨ªa su curso, las autoridades brasile?as se incautaron de un yate de 20 millones de d¨®lares del que dec¨ªan que Birmann era propietario en secreto a trav¨¦s de una empresa instrumental constituida en la Isla de Man. Los reguladores burs¨¢tiles brasile?os pidieron autorizaci¨®n a un tribunal para vender el yate y as¨ª pagar la multa de 90 millones de d¨®lares. En abril de 2016, solicitaron permiso para incautarse de otros activos no revelados, entre los que hab¨ªa 4,6 millones de d¨®lares en pr¨¦stamos impagados que Birmann le hizo a su ex mujer y a otros familiares.
M¨¢s adelante, en julio de 2017, Baker McKenzie y Trident Trust crearon una empresa llamada Waymoore Partners de la que Neves Birmann era la propietaria. Ten¨ªa una casa de cinco habitaciones en Miami Beach valorada en 1.875.000 d¨®lares.
Ni Birmann ni su exmujer respondieron a las preguntas sobre la supuesta ocultaci¨®n de activos a los acreedores o sobre el origen de los fondos usados para comprar la casa de Miami. Beck no respondi¨® a las preguntas sobre el caso Birmann o su trabajo en para¨ªsos fiscales con otros clientes muy adinerados, como el multimillonario nacido en Colombia Jaime Gilinski Bacal.
Gilinski, de 63 a?os, convirti¨® una peque?a fortuna heredada en un imperio inmobiliario y bancario en todo el mundo de 3.700 millones de d¨®lares, seg¨²n Forbes. Los documentos filtrados muestran que al menos algunos de sus activos se han depositado en m¨¢s de tres docenas de empresas en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas y Panam¨¢, pa¨ªs del que es ciudadano y en el que ocup¨® un puesto diplom¨¢tico.
En una carta de 2017 a Trident Trust, el abogado Beck afirmaba que representaba a Gilinski desde 2003. Gilinski siempre se ha comportado de una manera honorable y muy respetable¡±, dec¨ªa en la carta.
En 2004, los reguladores financieros estadounidenses ordenaron al Eagle National Bank of Miami de Gilinski que impidiera que figuras pol¨ªticas operaran con cuentas bancarias posiblemente relacionadas con ¡°el lavado de dinero, las ganancias de la corrupci¨®n extranjera, la financiaci¨®n del terrorismo u otras actividades sospechosas¡±. Unos meses m¨¢s tarde, Estados Unidos emiti¨® una orden de cese y desistimiento ordenando a la matriz del banco que dejara de realizar pr¨¦stamos internos a Gilinski y sus empresas.
Gilinski no respondi¨® a las solicitudes para hacer comentarios.
Los reguladores financieros de Colombia han sancionado al Banco GNB Sudameris de Gilinski 16 veces desde 2005, incluida una vez por violar los procedimientos contra el lavado de dinero, seg¨²n muestran los registros. En total, los reguladores ordenaron al banco pagar alrededor de 394.000 d¨®lares en multas. El banco dijo que se planteaba recurrir la multa.
Los documentos revisados por el ICIJ muestran que Beck formaba parte de un equipo de intermediarios profesionales que trabajaban en el imperio empresarial del banquero, como Jaime Alem¨¢n, el fundador pol¨ªticamente influyente del despacho de abogados paname?o Alem¨¢n, Cordero, Galindo & Lee (Alcogal), que tambi¨¦n era socio comercial de Baker McKenzie desde hac¨ªa mucho tiempo y amigo de Gilinski.
En agosto de 2012, durante un momento de intensificaci¨®n de la presi¨®n internacional sobre el sector offshore de Panam¨¢, Beck ayud¨® a Gilinski a trasladar su empresa paname?a, Glenoaks Investments, a las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas. Gilinski hab¨ªa utilizado Glenoaks para invertir en su banco con sede en Bogot¨¢. El motivo para trasladarse era ¡°la planificaci¨®n fiscal de Estados Unidos¡±, escribi¨® Beck en un correo electr¨®nico a Alcogal.
Gilinski utiliz¨® otras dos empresas de las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas gestionadas por Baker McKenzie para mantener una mansi¨®n en Londres valorada en 2013 en 38 millones de d¨®lares, seg¨²n muestran los registros.
Y los registros muestran que pag¨® 14,5 millones de d¨®lares por una casa de siete habitaciones, una de las cuatro propiedades que adquiri¨® utilizando otras dos empresas instrumentales, en una isla privada en Miami conocida como ¡°el b¨²nker de los multimillonarios¡±. La propiedad vigilada y cerrada est¨¢ al final de la calle de una propiedad de m¨¢s de 5.000 metros cuadrados que Ivanka Trump y Jared Kushner supuestamente compraron por 24 millones de d¨®lares este a?o.
Rusia: una mezcla embriagadora para un experto en sanciones
En marzo de 2016, la empresa estatal de armas rusa Rostec busc¨® ayuda para vender su participaci¨®n en una de las minas de cobre m¨¢s grandes del mundo. La mina est¨¢ en Mongolia y se llamaba Erdenet, ¡°tesoro¡± en mongol.
Rostec fabrica casi todo lo que usa el Ej¨¦rcito ruso, desde aviones de combate y gafas de visi¨®n nocturna montadas en el casco hasta veh¨ªculos blindados y rifles Kalashnikov.

En el momento del acuerdo con la mina, a Rostec ya se se le hab¨ªan impuesto sanciones occidentales despu¨¦s de la invasi¨®n rusa de Crimea en 2014. Con algunas de sus filiales, la empresa tambi¨¦n hab¨ªa sido objeto de una vigilancia medi¨¢tica debido a unos acuerdos armament¨ªsticos presuntamente corruptos. Y seg¨²n los Papeles de Pandora, los familiares del consejero delegado de Rostec, Sergei Chemezov, un viejo amigo del presidente ruso Vlad¨ªmir Putin, hab¨ªan creado una empresa instrumental en un para¨ªso fiscal para mantener bienes inmobiliarios.
Al solicitar la ayuda de un bufete de abogados en la venta de la mina de Mongolia, Rostec buscaba ¡°experiencia en el asesoramiento a organizaciones rusas que han sido sancionadas ... por Estados Unidos y la Uni¨®n Europea¡±.
Baker McKenzie consigui¨® el trabajo a trav¨¦s de una filial, Baker & McKenzie CIS.
El ICIJ y sus colaboradores en el Proyecto de denuncia de la delincuencia organizada y la corrupci¨®n y el medio de comunicaci¨®n IStories descubrieron que Baker & McKenzie CIS ha representado al menos a seis empresas sancionadas propiedad del Gobierno ruso, como Rostec y el gigante bancario VTB.
En junio de 2016, Rostec vendi¨® su participaci¨®n en la mina Erdenet a una compa?¨ªa poco conocida llamada Mongolian Copper Corp. por 400 millones de d¨®lares. M¨¢s o menos en el momento de la venta, los supervisores que vigilan el lavado de dinero de Deutsche Bank presentaron unos informes de actividades sospechosas que detallan el flujo de cientos de millones de d¨®lares a Mongolian Copper. ¡°Hay poca o ninguna informaci¨®n sobre la creaci¨®n y el negocio espec¨ªficos¡± de Mongolian Copper, informaba Deutsche Bank, seg¨²n los registros obtenidos por BuzzFeed News y compartidos con el ICIJ como parte de su investigaci¨®n de los Archivos de FinCEN de 2020.
Tormenta pol¨ªtica en Mongolia
En Mongolia, la venta desencaden¨® una tormenta pol¨ªtica, batallas judiciales e investigaciones de corrupci¨®n de alto nivel, en la que el entonces primer ministro Chimed Saikhanbileg era uno de los objetivos. El Parlamento de Mongolia dictamin¨® que la venta era ilegal, al descubrir que Saikhanbileg la autoriz¨® sin la aprobaci¨®n de los legisladores. Los investigadores mongoles tambi¨¦n descubrieron pruebas de que Mongolian Copper era una fachada para el Banco de Comercio y Desarrollo de Mongolia, de propiedad privada. Este banco pol¨ªticamente influyente, entre cuyos inversores se encontraba Goldman Sachs, hab¨ªa utilizado indebidamente fondos p¨²blicos para financiar la compra, afirmaron los investigadores. Goldman Sachs ten¨ªa una participaci¨®n del 4,8% en el banco, pero dijo que no ejerc¨ªa ning¨²n control estrat¨¦gico.
Robert Amsterdam, un abogado de Saikhanbileg, se?alaba que el ex primer ministro no desempe?¨® ning¨²n papel en la venta y no hizo nada malo. Rostec identific¨® a Mongolian Copper Corp. por su cuenta, afirmaba Amsterdam, y no estaba dispuesta a vender su participaci¨®n a ning¨²n otro comprador. ¡°La reputaci¨®n de Mongolia como lugar para hacer negocios se ha visto perjudicada por la naturaleza pol¨ªtica de la investigaci¨®n sobre Erdenet¡±, aseguraba.
Baker McKenzie, acogi¨¦ndose a la confidencialidad del cliente, se neg¨® a responder preguntas sobre el contrato de Rostec. Rostec declin¨® hacer comentarios.
Colaboradores: Karrie Kehoe, Maggie Michael, Emilia D¨ªaz-Struck, Ben Hallman, Dean Starkman, Fergus Shiel, Delphine Reuter, Miguel Fiandor, Mago Torres, Jelena Cosic, Richard H.P. Sia, Tom Stites y Denise Hassanzade Ajiri. Informaci¨®n de todo el mundo de EL PA?S; Le Monde de Francia; Malaysiakjni de Malasia; Stand News de Hong Kong; OCCRP e iStories en Rusia; Tanya Kozyreva en Ucrania; Australian Broadcasting Corp. y Australian Financial Review en Australia; Karlijn Kuijpers en Holanda; The Guardian y la BBC en Reino Unido; The Washington Post, The Miami Herald y The Wire China en Estados Unidos; Agencia Publica de Brasil; El Espectador/Connectas de Colombia; Quinto Elemento Lab de M¨¦xico; woxx de Luxemburgo; Convoca de Per¨²; Korea Center for Investigative Journalism Newstapa en Corea del Sur; Indian Express en India; Armando.info en Venezuela; Tempo de Indonesia; L¡¯Espresso de Italia; Expresso de Portugal; WDR en Alemania, y NZME de Nueva Zelanda.
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