De Panam¨¢ hasta Puerto Ban¨²s: as¨ª compran los ricos en Espa?a casas con una sociedad opaca

Dos enormes palmeras dan la bienvenida a Villa Hermes, construida en el a?o 1981 en una finca de 3.000 metros cuadrados en Nueva Andaluc¨ªa, al norte de Puerto Ban¨²s. En este distrito de Marbella, el anonimato y el lujo se dan la mano. La parcela est¨¢ rodeada por un alto muro de blanco inmaculado desde el que vigilan decenas de c¨¢maras de seguridad. Un vistazo a los portales inmobiliarios descubre que el valor medio de los inmuebles ronda en esta zona los dos millones de euros, aunque algunos suben hasta los cinco. Entre las casas se despliegan los 63 hoyos de cuatro campos de golf.

El secretismo que rodea esta mansi¨®n se refleja en la estructura societaria que la controla. Hay que llegar a una sociedad en Malta a nombre de un despacho de abogados local. En esta isla mediterr¨¢nea se acabar¨ªa el hilo del que puede tirar cualquiera con capacidad para moverse por los registros mercantiles, como confirma a EL PA?S un inspector de Hacienda. La informaci¨®n que permite recorrer el entramado societario que esconde al propietario real de esta vivienda es la que despachos de abogados y proveedores de servicios en para¨ªsos fiscales guardan en secreto en sus cajones.

Los 11,9 millones de documentos de los Papeles de Pandora, una investigaci¨®n global coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ), incluyen m¨¢s de 1.600 sociedades fiscalmente opacas que se han utilizado para ocultar operaciones inmobiliarias o los verdaderos due?os de casas de lujo, la mayor¨ªa de ellas en Londres. Los documentos permiten seguir tirando de este y otros hilos que llevan hasta el banquero m¨¢s importante de Colombia, Jaime Gilinski, y su piso de lujo en Madrid, o a fondos de inversi¨®n involucrados en grandes operaciones inmobiliarias en Barcelona.

Ocultar a los due?os de una vivienda detr¨¢s de sociedades creadas en jurisdicciones opacas es legal. En determinados lugares incluso es normal. Pero su aparici¨®n en casos de blanqueo de capitales y las consecuencias que puede tener en el mercado inmobiliario cuestionan su uso.

Una pr¨¢ctica extendida

El due?o de Villa Hermes consta en los archivos internos de Fidelity Corporate Services, uno de los 14 despachos en el centro de la investigaci¨®n. Por encima de la sociedad maltesa, Anahita & Artimisa, est¨¢ otra sociedad, en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas. Se llama JB Commodities BV y su due?o, que no figura en el registro de ese para¨ªso fiscal, es el empresario Mehran Muslimi, ¡°activo en el campo del blockchain [tecnolog¨ªa que permite crear criptomonedas como el bitcoin] y fintech [servicios tecnol¨®gicos financieros[¡±, como explica a este peri¨®dico. Reside en Dub¨¢i y mont¨® la estructura, asegura, por consejo de un abogado espa?ol.

La pr¨¢ctica en s¨ª de comprar viviendas con una sociedad radicada en un para¨ªso fiscal no es ilegal, pero todos los expertos consultados ¡ªen Espa?a y en otros pa¨ªses¡ª coinciden en lo que explica a trav¨¦s de un correo electr¨®nico Benjam¨ª Angl¨¨s Juanpere, profesor de Derecho Financiero y Tributario de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC): ¡°Es muy utilizada por aquellas personas que quieren eludir el pago de impuestos y blanquear capitales¡±.

En Espa?a, la Costa del Sol ha sido durante a?os el objetivo de inversiones extranjeras canalizadas a trav¨¦s de sociedades en para¨ªsos fiscales. En los documentos internos de los despachos en el centro de los Papeles de Pandora hay decenas de ejemplos. Tambi¨¦n en Puerto Ban¨²s, compr¨® una villa en abril de 2015 el empresario egipcio Mansur Amer. Amer encabeza el grupo inmobiliario que lleva su apellido y es el art¨ªfice de media docena de complejos vacacionales en las costas mediterr¨¢neas de ?frica y del mar Negro. Para la compra utiliz¨® una sociedad paname?a, Rema Spain SA, que no adquiri¨® el inmueble en s¨ª, sino todas las acciones de una empresa espa?ola, Real Estate de Comunicaciones SLU. El ¨²nico objetivo de esta era ser due?a de una vivienda en Laguna de Puerto Ban¨²s que vendi¨® a la paname?a por 4,4 millones de euros. En el Registro de la Propiedad, Real Estate sigue figurando como due?a de la casa.

Las casas cambiaban de manos sin que la Agencia Tributaria observara que hab¨ªa habido una transmisi¨®n patrimonial

Lo que no aparece es qui¨¦n se ha hecho con el control de Real Estate y, por lo tanto, de la vivienda. Es un tipo de pr¨¢ctica que se ha visto durante a?os, como recuerda Jos¨¦ Mar¨ªa Mollinedo, secretario general del Sindicato de T¨¦cnicos de Hacienda (Gestha): ¡°Las casas cambiaban de manos sin que la Agencia Tributaria observara que hab¨ªa habido una transmisi¨®n patrimonial¡±. Se sol¨ªan abrir sociedades en Gibraltar o en otros lugares fiscalmente opacos: ¡°En ning¨²n registro de la propiedad figura ese cambio de titularidad, que sigue a nombre de la sociedad offshore [fiscalmente opaca]¡±.

De la calle de Lagasca de Madrid a la Diagonal de Barcelona

En los ¨²ltimos a?os, el mercado inmobiliario boyante en zonas de lujo tambi¨¦n ha convertido Madrid en una ciudad atractiva para los inversores extranjeros. Muchos han optado por hacerse con una propiedad a trav¨¦s de una sociedad, como los notorios casos de venezolanos vinculados al r¨¦gimen de Hugo Ch¨¢vez. Las ventajas fiscales de comprar con una sociedad extranjera son considerables: ¡°Adem¨¢s de no estar sujeta a las obligaciones contables o registrales de las empresas espa?olas, tampoco lo estar¨ªa al impuesto de sociedades, ni tendr¨ªa que pagar el IVA en el caso de comprar un inmueble de nueva construcci¨®n o el impuesto sobre transmisiones patrimoniales si se tratase de un inmueble de segunda mano. Tampoco pagar¨ªa el impuesto sobre el patrimonio que se devenga cada a?o. Solo estar¨ªa obligada a pagar la cuota anual del IBI municipal¡±, resume Angl¨¨s Juanpere, profesor de Derecho Financiero y Tributario de la UOC.

Uno de los compradores m¨¢s selectos del Barrio de Salamanca de Madrid es Jaime Gilinski, segundo hombre m¨¢s rico de Colombia. Con una fortuna de m¨¢s de 3.400 millones de euros, seg¨²n Forbes, es due?o del mayor banco de Am¨¦rica Latina, GNB Sudameris. En diciembre de 2018 utiliz¨® Colden Investments SA, sociedad de Panam¨¢, para firmar el contrato de compraventa de un apartamento en Lagasca 99, una de las promociones de viviendas m¨¢s exclusivas de Madrid. Su vest¨ªbulo, de 650 m2, es seg¨²n los promotores el m¨¢s grande de la capital. La vinculaci¨®n de Gilinski con la sociedad no aparece en registros p¨²blicos, sino en los documentos internos de Alem¨¢n Cordero y Galindo, uno de los bufetes cuyos archivos se encuentran entre los Papeles de Pandora.

Los lazos con los para¨ªsos fiscales son comunes en las grandes inversiones inmobiliarias. Muchos de los fondos que invierten en Madrid o Barcelona, como han denunciado asociaciones vecinales de ambas ciudades, gestionan sus activos desde territorios opacos. Entre los Papeles de Pandora, una memoria anual de 2017 del fondo Patron Capital, que gestiona activos por 4.000 millones de euros en toda Europa, muestra el detalle de las estructuras que usan para invertir. ¡°BCN2¡å es el nombre del proyecto con el que en 2005 compraron 244 viviendas de alquiler, 700 plazas de aparcamiento y m¨¢s de 30.000 metros cuadrados dedicados a oficinas. El fondo compr¨® el 37% del complejo, por 207 millones de euros, a la Inmobiliaria de La Caixa a pesar de las protestas de los inquilinos de los pisos, que presentaron una oferta (de unos 180 millones) que ¡°no se ajust¨® a las condiciones ni ofrec¨ªa garant¨ªas¡±, seg¨²n expres¨® la inmobiliaria. Toda la operaci¨®n fue controlada y gestionada a trav¨¦s de una sociedad en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, accionista de la matriz inglesa de Patron, que a su vez era accionista de una sociedad en Luxemburgo. Un portavoz de Patron explica: ¡°Como en la mayor¨ªa de casos en la industria de capital de riesgo y fondos de inversi¨®n, nuestros fondos est¨¢n domiciliados en diferentes jurisdicciones. Nosotros y las compa?¨ªas en las que invertimos pagamos impuestos seg¨²n las normas de cada jurisdicci¨®n y cumplimos con la ley aplicable¡±.

Legal en las Islas V¨ªrgenes y con consecuencias en Europa

No es sencillo medir las consecuencias de este tipo de inversiones, precisamente por el secretismo de las sociedades creadas para eludir obligaciones tributarias. Se calcula que a causa del uso de para¨ªsos fiscales, solo en Europa, los gobiernos pierden 46.000 millones de euros en impuestos cada a?o.

El problema es el encaje legal de estas estructuras, como resume Christoph Trautvetter, experto tributario que ha asesorado a grandes compa?¨ªas y al Parlamento Europeo: ¡°Cierto, no es ilegal mantenerse en el anonimato seg¨²n la ley de las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas. Por eso los proveedores de servicios de muchos pa¨ªses europeos tienen inter¨¦s en que esas leyes se mantengan como est¨¢n¡±.

Donde se est¨¢ analizando su impacto sobre el mercado inmobiliario se ven consecuencias. As¨ª ocurre en Londres, la ¨²nica ciudad donde cualquier sociedad radicada en un para¨ªso fiscal due?a de un inmueble tiene que estar incluida en un registro p¨²blico y accesible. Varios estudios han destacado la subida de precios de las casas y la distorsi¨®n de la actividad inmobiliaria hacia el lujo, que deja inmuebles infrautilizados o en desuso. Esto, en una ciudad donde m¨¢s de 36.000 viviendas dependen de una sociedad en otro pa¨ªs. Seg¨²n un estudio de Transparencia Internacional, all¨ª el 75% de las propiedades cuyos due?os est¨¢n siendo investigados por la justicia utilizan estructuras fiscalmente opacas para ocultar su identidad. Un escenario parecido al que se analiz¨® tambi¨¦n en el momento de m¨¢xima expansi¨®n del mercado inmobiliario de S?o Paulo, en Brasil.

Nacho S¨¢nchez ha colaborado en la elaboraci¨®n de este reportaje