El futuro de la cooperaci¨®n pasa por el reto de la alfabetizaci¨®n digital

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Hace ya m¨¢s de un a?o que comenz¨® la pandemia, un acontecimiento mundial que nos ha aislado y que ha acelerado la tendencia digital que ven¨ªa imponi¨¦ndose. La covid-19 nos ha cambiado, pero ahora,?con m¨¢s del 10% de la poblaci¨®n mundial vacunada?con al menos una dosis, se vislumbra?cierta normalidad?en el horizonte y es el momento de reflexionar sobre los retos que se plantean y hacia d¨®nde debe dirigirse la cooperaci¨®n.

Durante estos meses de distanciamiento social hemos encontrado cobijo en la tecnolog¨ªa. Gracias a ella, muchos de nosotros hemos continuado trabajando, estudiando y nos hemos sentido acompa?ados e informados. Resulta imposible no apreciar su enorme potencial en nuestras sociedades. No obstante, como ya apuntaba en junio de 2020 el secretario general de la ONU, Ant¨®nio?Guterres, en la?Hoja de Ruta para la cooperaci¨®n Digital, un mayor n¨²mero de poblaci¨®n conectada implica vulnerabilidades y problemas m¨¢s complejos.

Los desaf¨ªos a los que se enfrenta la cooperaci¨®n en este nuevo contexto digital son variados, ya que?a pesar de que muchos estamos m¨¢s digitalizados, la brecha no solo sigue existiendo, tambi¨¦n se ha profundizado?en muchos casos.

Durante la pandemia, por ejemplo, nuestros mayores?han?sufrido miedo e incertidumbre por el?virus,?pero tambi¨¦n?aislamiento, a¨²n m¨¢s acusado?para?aquellos que no disponen?de habilidades tecnol¨®gicas?y han visto?limitadas?sus?capacidades?para conectarse con?sus seres queridos.?Naciones Unidas ha declarado el 2020-2030?como?la d¨¦cada del envejecimiento saludable, una fecha para actuar en pro de los beneficios de la vejez y que, entre distintos aspectos, destaca que?ello ¡°requiere de un aprendizaje a lo largo de toda la vida¡± y pasa por la capacitaci¨®n digital.

Conscientes de la importancia de?ense?arles a los m¨¢s mayores las herramientas que van a necesitar para poder desenvolverse en?un?mundo?digitalizado, la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (OEI), junto con?la?Organizaci¨®n Iberoamericana para la Seguridad Social (OISS)?y el apoyo de la?Fundaci¨®n Astur,?est¨¢ elaborando un protocolo sobre?el?acceso a la sociedad digital en Iberoam¨¦rica de las personas adultas mayores. La iniciativa ya se ha puesto en marcha en Colombia, Argentina, Costa Rica y Honduras a trav¨¦s de talleres digitales?en los que?realizan ejercicios de?autobiograf¨ªa m¨ªnima?que permiten a?los mayores generar?v¨ªnculos mediante las herramientas digitales, manejan competencias comunicativas y aprenden mecanismos para gestionar la soledad no deseada.

Naciones Unidas ha declarado el 2020-2030?como?la d¨¦cada del envejecimiento saludable y esto pasa por la capacitaci¨®n digital

En una sociedad como la nuestra en la?que?los?pasaportes de vacunaci¨®n son c¨®digos QR o el?acceso a la cuenta bancaria?se realiza?con un m¨®vil con conectividad,?trabajar la alfabetizaci¨®n digital en un solo sentido no es suficiente.?Por eso, este acuerdo?tambi¨¦n?incluye?mejorar?la accesibilidad en la que se presenta la informaci¨®n digital?con?una serie de recomendaciones a las administraciones p¨²blicas.

Las plataformas sociales han crecido m¨¢s que nunca: 15 nuevos usuarios cada segundo en 2020, seg¨²n arroja el informe?Digital Social en 2020. Y la tendencia en 2021 es imparable

Las plataformas sociales han crecido m¨¢s que nunca: 15 nuevos usuarios cada segundo en 2020, seg¨²n arroja el informe?Digital Social en 2020. Y la tendencia en 2021 es imparable. Sin embargo, emplear las estas herramientas en el d¨ªa a d¨ªa no implica conocer sus riesgos y saber manejarlas. Actualmente, estas aplicaciones de entretenimiento se?usan?como uno de los principales canales de informaci¨®n por parte de la poblaci¨®n.?Miles?de noticias provenientes de fuentes diversas se dan cita en las redes, generando un bombardeo dif¨ªcil de controlar.?Es?lo que se conoce como?infodemia: el exceso de informaci¨®n sobre una tem¨¢tica concreta, un fen¨®meno?que?lleva a la desinformaci¨®n y genera gran hast¨ªo.

Los problemas derivados son m¨¢s variados y sofisticados. Uno de los?m¨¢s conocidos son?las fake news,?que durante la pandemia se han visto incrementadas. Aunque no son algo nuevo, resultan alarmantes en el calado y la rapidez con la que se comparten.?Tampoco son espec¨ªficas de un ¨¢rea, pero s¨ª son especialmente preocupantes en espacios de conocimiento como la ciencia,?donde hemos visto multitud de falsedades sobre la covid-19 o los?procesos?de vacunaci¨®n. Por este motivo, la divulgaci¨®n se hace m¨¢s necesaria que nunca.

En lo que respecta a la infancia, quienes han disfrutado de conectividad y de dispositivos tecnol¨®gicos han podido continuar la escuela. Los centros educativos, los docentes y las familias se han volcado para que no se perdiera el curso escolar. En el otro lado de la balanza, miles de ni?os y ni?as que no contaban con Internet han sufrido un par¨®n irreparable en su formaci¨®n.

Seg¨²n lo planteado, el reto que debemos afrontar en cooperaci¨®n parecer¨ªa claro: digitalizar y eliminar desigualdades llevando Internet a aquellas zonas donde a¨²n no ha llegado. En cooperaci¨®n se trabaja desde hace a?os para paliar la brecha.

?C¨®mo ser¨¢ el futuro de los pandemials, esos ni?os y ni?as que han crecido en la era de la digitalizaci¨®n y las?noticias falsas??Los m¨¢s j¨®venes, los nativos digitales, solamente han conocido esta realidad masificada de contenidos en la que es complicado discernir la verdad.

De nada sirve introducir la digitalizaci¨®n sin el componente pedag¨®gico. Por ello, estamos uniendo esfuerzos con distintos socios para?que los?docentes?puedan aportar las herramientas necesarias a los adultos del futuro.?Con AECID se est¨¢ trabajando para formar a?los?profesores?de la regi¨®n?en?las?competencias tecnol¨®gicas a trav¨¦s del?proyecto ¡®Fortalecimiento institucional y competencia digital¡¯.?Asimismo, con universidades?iberoamericanas?de la regi¨®n?se han?ofrecido?becas?a maestros para que cursen formaciones?en metodolog¨ªas did¨¢cticas en educaci¨®n en l¨ªnea.

Si queremos reducir la brecha digital y no generar m¨¢s desigualdades, el trabajo en cooperaci¨®n debe ir encaminado a dar cobertura, trabajar en la accesibilidad y formar en todas las etapas de la vida. El reto de las instituciones, con el apoyo de familias y sociedad civil, pasa por alfabetizar digitalmente a lo largo de la vida, pero tambi¨¦n por la prevenci¨®n y la generaci¨®n de pensamiento cr¨ªtico en la poblaci¨®n.?Los pr¨®ximos a?os ser¨¢n clave para orientar el futuro de la cooperaci¨®n digital y articular un espacio en el que todos tengamos cabida.

Cristina Ortiz es experta en Comunicaci¨®n de la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (OEI).

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