La India rural aborda la tercera ola de coronavirus con f¨¢rmacos caducados y m¨¦dicos ausentes

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El agricultor Bildar Pavra ha llevado a su hija Neeti, de seis a?os, al centro de salud de Telkhedi, una localidad en el norte del estado de Maharashtra (en India, pa¨ªs de 1.400 millones de habitantes), para que le traten un for¨²nculo infectado. Tiene algo de fiebre y ¨¦l tambi¨¦n necesita que le revisen la vista. Sin embargo, la familia vuelve decepcionada a casa, en Atharipada, a media hora a pie. En el ambulatorio hay dos m¨¦dicos, pero ninguno est¨¢ disponible. Un asistente da a Neeti paracetamol para aliviar la fiebre, aunque no est¨¢ cualificado para recetar medicinas. All¨ª los m¨¦dicos nunca est¨¢n disponibles, se queja Pavra, y tampoco la ambulancia. Todas sus hijas nacieron en casa y una muri¨® ahogada en un accidente.

Desde inicios de verano, la terrible segunda ola de covid-19 est¨¢ amainando en Maharashtra, pero el aumento de variantes m¨¢s contagiosas y una posible tercera ola podr¨ªan someter de nuevo a su sistema de salud rural a una gran presi¨®n. Sin embargo, el centro sanitario de Telkhedi ha demostrado que no est¨¢ preparado para manejar la covid-19, o incluso necesidades m¨¦dicas m¨¢s corrientes, como las de Pavra.

El procedimiento operativo est¨¢ndar (POE) para la contenci¨®n y gesti¨®n de la covid-19 del Ministerio de Sanidad, publicado el 16 de mayo de 2021, contiene normas especiales para las ¨¢reas periurbanas, rurales y tribales. Estas deben aplicarse a Nandurbar, un distrito predominantemente tribal. El POE asigna a los centros sanitarios responsabilidades cr¨ªticas ante la pandemia, incluida la supervisi¨®n de la atenci¨®n de coronavirus para casos asintom¨¢ticos y con s¨ªntomas leves. Si es necesario, tambi¨¦n se espera que estos se transformen en los llamados Centros de Salud Dedicados a la Covid-19 (CSDC) con soporte de ox¨ªgeno para casos moderados.

Sin embargo, la visita a cinco de estos peque?os hospitales y a otros tres de menos categor¨ªa de Nandurbar, revelan que falta la infraestructura b¨¢sica y que los protocolos, incluida la gesti¨®n del inventario de medicamentos, son desastrosos. Hay medicamentos caducados en tres de los cinco, incluido uno en el que las inyecciones utilizadas para tratar una reacci¨®n adversa a las vacunas de la covid-19 han superado la fecha de caducidad. Estas inyecciones son parte de un equipo de Efectos Secundarios de la Vacuna (ESV) preparados en los centros de inmunizaci¨®n.

Cuando se les pregunta, los m¨¦dicos que dirigen los ambulatorios reconocieron que todos estaban luchando contra una grave falta de personal, especialmente de farmac¨¦uticos, que, supuestamente, deben supervisar las existencias de f¨¢rmacos. Tambi¨¦n hay otros problemas relacionados con la sustituci¨®n del personal, lo que lleva a una escasa rendici¨®n de cuentas.

¡°En Nandurbar, est¨¢ vacante el 30% de los puestos. Es posible que se hayan cubierto los puestos de m¨¦dico, pero los de farmac¨¦utico y otras plazas est¨¢n libres. El alojamiento del personal no cumple con sus expectativas, por lo que la gente evita venir aqu¨ª¡±, explicaba Rajendra Gawde, consejero delegado del consejo municipal de Nandurbar.

Hasta el 2 de septiembre, Maharashtra hab¨ªa comunicado 6,43 millones de casos de covid-19 y 137.551 fallecimientos por el virus. El Niti Aayog, el grupo de expertos del Gobierno, describe Nandurbar como un distrito con aspiraciones, sin desarrollar y que necesita atenci¨®n adicional. Hasta el 1 de marzo de 2021 hab¨ªa comunicado 220 muertes, una cifra que subi¨® a 947 el 2 de septiembre. El 1 de abril, el distrito registraba 18.498 casos y el 2 de septiembre, la cifra se hab¨ªa disparado hasta casi 20.000 casos, elevando el total a 39.028.

Existencias caducadas, falta de farmac¨¦uticos

Yogesh Kalkonde, un investigador sobre salud p¨²blica que trabaja en el distrito de Gadchiroli, opina que los centros de salud y el compromiso de la comunidad pueden desempe?ar un papel importante en la batalla contra la covid-19, aliviando la presi¨®n de las unidades de cuidados intensivos. El personal y los activistas de salud social acreditados (ASSA), deber¨ªan estar capacitados para clasificar y aislar a los pacientes y determinar si necesitan ser derivados a otras instalaciones.

¡°Los concentradores de ox¨ªgeno deben asignarse a los pueblos, o al menos a los ambulatorios: es dif¨ªcil destinar ventiladores a las aldeas, porque requieren personal altamente capacitado, pero se pueden adquirir concentradores¡±, insinua. Todo esto, junto con la formaci¨®n de los activistas de salud y el r¨¢pido desarrollo de capacidades, basado en protocolos creados en colaboraci¨®n con los jefes de la comunidad, ya deber¨ªa haberse puesto en marcha, se?ala Kalkonde. Pero, sobre el terreno, no hay se?ales de ning¨²n tipo de preparaci¨®n.

El centro de salud de Telkhedi, que atiende a una poblaci¨®n de 19.304 personas distribuidas en siete aldeas o 41 poblados, deb¨ªa haberse trasladado a un nuevo edificio hace cinco a?os. Pero el contratista abandon¨® el trabajo por acusaciones de corrupci¨®n y el edificio sin terminar no se puede usar. Se supone que el departamento de pacientes externos (DPE) funciona seis d¨ªas a la semana, pero durante una visita, el personal indica que hace tres d¨ªas que los m¨¦dicos no atienden a estos enfermos.

Latika Rajput, una activista de Nandurbar, visita algunos sanatorios como miembro del Comit¨¦ central de desnutrici¨®n del Estado, lo que le permite inspeccionar las existencias de medicamentos, encontr¨¢ndose varios caducados.

En el de Telkhedi, que funciona tambi¨¦n como centro de vacunaci¨®n de covid-19, las medicinas utilizadas para tratar los efectos secundarios de las vacunas tambi¨¦n han superado la fecha l¨ªmite de caducidad. Esto incluye las inyecciones de succinato s¨®dico de hidrocortisona, que caducaban en diciembre de 2020, y las inyecciones de bitartrato de adrenalina, en noviembre de 2020. Dado que en India la campa?a de inmunizaci¨®n ha comenzado este a?o, parece que nadie hab¨ªa comprobado la fecha de vencimiento de este equipo.

Las normas operativas sobre la vacuna establecen que debe haber disponible en todo momento un equipo para tratar los efectos secundarios de la inmunizaci¨®n con hidrocortisona y adrenalina. Seg¨²n las normas, ¡°el m¨¦dico se asegura de que las ampollas de adrenalina no hayan superado la fecha de caducidad¡±. Sin embargo, el farmac¨¦utico, D.P. Pavra, lleva all¨ª desde el 15 de mayo de 2021, y ni el m¨¦dico a cargo ni el segundo m¨¦dico se encuentran presentes en el momento de la visita.

Despu¨¦s de la inspecci¨®n, Rajput sella una muestra de los medicamentos vencidos y redacta un detallado panchnama o informe de hallazgos. El personal presente en el momento lo firma y despu¨¦s, el panchnama, junto con los preparados, se env¨ªa a la oficina de Sanidad del distrito para que se tomen medidas adicionales.

¡°Todos los ciudadanos de este pa¨ªs deber¨ªan tener derecho a comprobar si los f¨¢rmacos que se les administran est¨¢n dentro de la fecha de caducidad y si los sistemas de salud p¨²blica est¨¢n en condiciones; la ley sobre el derecho a la informaci¨®n nos permite acceder a los datos¡±, asiente Rajput. ¡°Pero la gente no tiene tiempo ni acceso para ello. Lo ideal ser¨ªa que ni siquiera hubiera que hacerlo y que nuestros sistemas tuvieran garant¨ªas internas. Lo que yo hago es redactar un informe puntual y archivar un registro de las pruebas, para que la administraci¨®n del distrito pueda tomar una decisi¨®n sobre los hallazgos¡±.

Existen problemas similares en el sanatorio de Mandvi, donde varias personas de las aldeas vecinas hacen cola en busca de un tratamiento para varios problemas y tambi¨¦n para vacunarse. Entre los medicamentos expirados encontrados se incluyen ciprofloxacino, que se usa para tratar la disenter¨ªa, gotas para ojos y o¨ªdos de Ciprobact y tabletas de atenolol. Rajput repite tambi¨¦n aqu¨ª el proceso de emitir un panchnama y sellar las medicinas.

En el de Padalda, en Shahada, el m¨¦dico C.K. Samudre est¨¢ ocupado recogiendo hisopos con muestras de personas con s¨ªntomas similares a los de la covid-19, mientras su esposa y segundo m¨¦dico, Swati Sadaphule, supervisa el departamento de pacientes externos. Aqu¨ª puso en marcha recientemente una instalaci¨®n para hacer pruebas PCR de covid-19 y atiende a una poblaci¨®n de 29.000 personas distribuidas en 18 aldeas. A pesar de no encontrarse tan alejado como los dem¨¢s, este centro tambi¨¦n guarda medicinas pasadas de fecha, incluidas tabletas de ¨¢cido asc¨®rbico y loci¨®n de benzoato de bencilo para tratar los piojos y la sarna.

Sanidad desastrosa

¡°Es lamentable encontrar medicamentos que han expirado no solo en los ambulatorios de ¨¢reas extremadamente remotas del distrito, sino tambi¨¦n en los de la relativamente desarrollada ¨¢rea de Shahada¡±, explica Rajput. ¡°Es muy grave que, durante una pandemia, encontremos caducados los compuestos utilizados para tratar los efectos secundarios de la vacuna. Existe un proceso para deshacerse de esas existencias, y es el deber m¨¢s importante del farmac¨¦utico. La gente no deber¨ªa tener que luchar por algo tan b¨¢sico. El proceso de licitaci¨®n implica que la adquisici¨®n real de vacunas se produce muy lentamente debido a que existe una brecha entre la oferta y la demanda¡±.

Rajput explica que el 4 de junio, en una ronda de inspecci¨®n de los CS de Mandvi y Pimpalkhuta, encontr¨® existencias fuera de fecha y present¨® un panchnama a la oficina de salud del distrito. Bas¨¢ndose en esto, Gawde, el CEO del consejo municipal de Nandurbar, expidi¨® un requerimiento judicial a ambos. Despu¨¦s de la inspecci¨®n de los tres centros sanitarios de este reportaje, el funcionario se lo envi¨® tambi¨¦n a ellos.

Los m¨¦dicos de todos estos sanatorios afirman que las existencias caducadas se eliminan seg¨²n el protocolo. ¡°Le hab¨ªa dado repetidas instrucciones [al personal para que] verificara [las] existencias todos los meses. Tambi¨¦n le ped¨ª al personal que mantuviera un inventario de productos y de sus fechas de caducidad¡±, afirma Rahul Munde, m¨¦dico del ambulatorio de Mandvi.

Santosh Pavra, el m¨¦dico del ambulatorio de Telkhedi, argumenta que el farmac¨¦utico de all¨ª hab¨ªa sido sustituido desde el 15 de mayo de 2021. Sobre la familia Pavra de Atharipada que hab¨ªa regresado a casa sin recibir tratamiento, se excusa: ¡°Ese d¨ªa yo estaba de guardia en la secci¨®n covid-19 y el otro m¨¦dico estaba de vacaciones¡±.

C.K. Samudre, m¨¦dico del centro de Padalda, cita problemas similares. ¡°El farmac¨¦utico asignado, V.M. Patel, no se present¨® a trabajar durante casi un a?o¡±, afirma. ¡°Necesitamos desesperadamente un sustituto, aunque sea provisional. Es un puesto clave, porque es responsable del inventario. Solo tenemos una enfermera que considera esto una responsabilidad adicional¡±.

Problemas cr¨®nicos y clamor por las soluciones

Seg¨²n los expertos, los problemas de los sanatorios y del sistema de salud p¨²blica en Nandurbar podr¨ªan ser representativos de las zonas rurales de todo el pa¨ªs. ¡°Ya sean pruebas, vacunaci¨®n o prestaci¨®n de servicios de salud, no se est¨¢ haciendo nada¡±, se lamenta Shobha Suri, investigador principal de la Observer Research Foundation. ¡°El Procedimiento Operativo Est¨¢ndar para la covid-19 dice mucho, pero en realidad, nuestra infraestructura siempre ha sido desastrosa, a pesar de que la gente depende en gran medida de ella. Hay una gran falta de mano de obra y de mecanismos de control debido a que ni ellos mismos saben cu¨¢les son sus reservas de f¨¢rmacos y cu¨¢les han caducado. La escasez de mano de obra es su mayor problema. Recaen demasiadas responsabilidades en los activistas de la salud y los AWW [Trabajadores Anganwadi, especializados en atenci¨®n sanitaria infantil en zonas rurales]. Necesitamos soluciones pr¨¢cticas que tengan en cuenta nuestras realidades b¨¢sicas, soluciones que realmente lleguen¡±.

El especialista en salud rural Kalkonde se?ala que se trata de problemas cr¨®nicos. ¡°Nuestro sistema de sanidad p¨²blica siempre ha sido decr¨¦pito y ahora tiene una carga adicional con el coronavirus¡±, afirma. ¡°Los ambulatorios nunca se crearon para la atenci¨®n cl¨ªnica de alto nivel. Se crearon como centros perif¨¦ricos, seg¨²n los Objetivos de Desarrollo del Milenio (anteriores a los Objetivos de Desarrollo Sostenible) para la atenci¨®n maternoinfantil, con el fin de reducir la mortalidad. Son una reliquia de esa era y, de repente, les pedimos que presten servicios de covid-19¡±.

Gawde, el consejero delegado del consejo municipal de Nandurbar, asegura que su oficina est¨¢ tomando medidas urgentes contra el absentismo en los ambulatorios. ¡°Tambi¨¦n hemos mantenido una reuni¨®n para dar instrucciones [sobre reglas y protocolos] y asegurarnos de que esto no vuelva a ocurrir. Hemos sensibilizado mucho a nuestro personal, me sorprende que se hayan encontrado medicamentos caducados¡±, dijo.

En Telkhedi, mientras Pavra se prepara para regresar a casa con Neeti, habla sobre la muerte de su cuarta hija. ¡°Falleci¨® cuando la barcaza en la que estaba con su amiga volc¨® en el r¨ªo. Anunciaron una compensaci¨®n de 200.000 rupias (2.300 euros), pero nunca la recibimos. Por los partos en casa de mi esposa, se supon¨ªa que ¨ªbamos a recibir 500 rupias [alrededor de seis euros, pagados por Janani Suraksha Yojana, un organismo institucional para fomentar los alumbramientos asistidos y seguros] pero tampoco llegaron. Siempre ocurre lo mismo con personas como nosotros. A nadie le importa¡±.

Este art¨ªculo es versi¨®n actualizada del original en ingl¨¦s publicado por IndiaSpend. Tanvi Deshpande es periodista independiente de Maharashtra, especializada en sanidad, g¨¦nero, medio ambiente y covid-19.

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