Oro, carb¨®n y petr¨®leo son vestigios del ma?ana
La muestra ¡®Recordar el futuro¡¯, de la artista y ge¨®loga, Elena Lavell¨¦s, indaga en los fundamentos materiales del capitalismo y en el extractivismo para mostrar en sus obras c¨®mo ambos han cambiado el modo en que formamos parte de la Tierra
Parece un cuadro impresionista, con esa difuminaci¨®n de contornos que dan los pinceles o el aire fuertemente contaminado y brumoso, pero, en realidad, es la fotograf¨ªa panor¨¢mica de una mina de carb¨®n, a cielo abierto. Se trata de la mina de Kolubara, en territorio serbio, a pleno funcionamiento, con una gigantesca excavadora (con rueda de cangilones) en el centro de la escena, que trastoca todas las escalas y hace invisibles a los hombres, quiz¨¢ los mismos operarios que hace veinte a?os protagonizaron las emblem¨¢ticas protestas por mejores condiciones de trabajo. La imagen forma parte de una recopilaci¨®n de trabajos de Elena Lavell¨¦s (Madrid, 1981), reunidos bajo el t¨ªtulo Recordar el futuro, que podr¨¢ verse en la galer¨ªa Luc¨ªa Mendoza, de Madrid, hasta el 30 de abril.
La otra mina de carb¨®n que ayuda a Lavell¨¦s a reflexionar pl¨¢sticamente sobre la extracci¨®n de riquezas de la tierra es la de Senjski Rudnik, la m¨¢s antigua de Serbia a¨²n en funcionamiento, pero, en este caso, subterr¨¢nea, lo que le agrega sensaci¨®n de claustrofobia a la composici¨®n. Estas fotograf¨ªas se integran en la b¨²squeda de Lavell¨¦s ¨Ccon el comisariado de Diana Padr¨®n¨C de la explotaci¨®n de los recursos del planeta, a trav¨¦s tambi¨¦n de dibujos, pinturas, objetos, v¨ªdeos y esculturas.
Serbia, un pa¨ªs que est¨¢ ampliando el peso del carb¨®n en la generaci¨®n de electricidad, seg¨²n datos del think tank Ember Climate, mantiene en funcionamiento algunas de las centrales de carb¨®n con historias significativas en el continente. Un ejemplo es la de Kolubara, una de las m¨¢s grandes a cielo abierto de toda Europa, con una revuelta hist¨®rica reciente del movimiento minero, que trascendi¨® sus fronteras. El otro socav¨®n retratado por Lavell¨¦s evoca la explotaci¨®n subterr¨¢nea de Senjski Rudnik, que fue ¡°la m¨¢s importante durante la revoluci¨®n industrial en esa regi¨®n¡±, en palabras de la artista visual. Lavell¨¦s pas¨® una temporada en Belgrado, invitada a participar en una exposici¨®n colectiva sobre los retos de la sostenibilidad, en colaboraci¨®n con la Universidad de Belgrado.
Obras con sustrato geol¨®gico
Lavell¨¦s estudi¨® geolog¨ªa porque quer¨ªa entender ¡°c¨®mo funciona el planeta, c¨®mo ha evolucionado, y la manera en que formamos parte de la Tierra¡±, en sus propias palabras. Desde siempre, asimismo, dibuj¨® y pint¨®, por lo que tras los estudios de geolog¨ªa, continu¨® con Bellas Artes y Econom¨ªa. Hoy la artista ge¨®loga est¨¢ trabajando en la Academia de Roma, desde donde nos atiende, por videollamada.
¡®Recordar el futuro¡¯ podr¨¢ verse en la galer¨ªa Luc¨ªa Mendoza, de Madrid, hasta el 30 de abril
?Qu¨¦ hay de nosotros en lo s¨®lido bajo nuestros pies?, le preguntamos. ¡°Quer¨ªa comprender c¨®mo convivimos con el planeta y fue despu¨¦s de estudiar geolog¨ªa cuando pude descubrir, gracias al pensamiento posmarxista y ecofeminista, que todos estamos interconectados¡±. Seg¨²n su criterio, ¡°hay un gran fallo en la idea del antropocentrismo, a partir de la Ilustraci¨®n, que se impone como pensamiento dominante, y que desde las ¨²ltimas d¨¦cadas se est¨¢ revisando y, en la actualidad, se est¨¢ cuestionando de una manera m¨¢s urgente¡±.
Su forma de indagar en la escasez de recursos naturales y sus formas de explotaci¨®n le conduce a equiparar estas pr¨¢cticas con la deriva del sistema capitalista, desde la ¨¦poca colonial al presente: ¡°Me centro en las principales materias primas que han potenciado la evoluci¨®n del capitalismo, desde que se empiezan a sentar las bases del sistema de extracci¨®n del oro en el periodo colonial, en el que este metal est¨¢ ligado al racismo medioambiental y al esclavismo en Am¨¦rica¡±. As¨ª, luego, ¡°cuando el capitalismo est¨¢ instaurado de una manera m¨¢s s¨®lida, su funcionamiento queda determinado por el carb¨®n ¨Cesencial en la Revoluci¨®n Industrial¨C y, desde los a?os setenta, por el petr¨®leo¡±, explica.
Y ni siquiera el carb¨®n se ha ido. En 2020, el ranking mundial de los pa¨ªses con mayores reservas de carb¨®n estaba liderado por Estados Unidos (con 249 mil millones de toneladas), seguido por Rusia, Australia, China e India. Sin embargo, seg¨²n el ¨²ltimo informe de Global Energy Monitor (GEM), los proyectos de los principales productores del mundo estar¨ªan buscando ampliar (m¨¢s con la guerra en Ucrania) esa capacidad de suministro en un 30%, a pesar del clamor por la descarbonizaci¨®n del planeta de quienes luchan contra el calentamiento global. En este mapa interactivo, pueden rastrearse tanto las plantas de carb¨®n existentes, las recientes, las que se desactivan y las planificadas.
Recursos naturales ligados a los humanos
En este recorrido hist¨®rico de Lavell¨¦s a trav¨¦s de materiales tan significativos en la era contempor¨¢nea, la extracci¨®n de recursos naturales aparece claramente ligada a la extracci¨®n de recursos humanos y a la propia ordenaci¨®n del mundo. Por eso en la muestra, junto a los cojines de orlas reales con las tres reliquias f¨®siles (oro, carb¨®n y petr¨®leo) de un futuro cercano, est¨¢ ubicado el libro sagrado de la convertibilidad monetaria o del patr¨®n oro, establecido como tal por 44 pa¨ªses al final de la Segunda Guerra Mundial. En ¨¦l se compilan los acuerdos de Bretton Woods (Estados Unidos), por los que se crearon los organismos de cr¨¦dito internacionales como supervisores de los planes econ¨®micos de las naciones, especialmente de las deudoras.
Este muestrario de reliquias, en t¨¦rminos de la artista madrile?a, simboliza ¡°la expansi¨®n del capitalismo¡± sin ning¨²n tipo de fronteras. ¡°Estas est¨¢n presentadas como los iconos de una religi¨®n, la religi¨®n capitalista, de la que no podemos imaginar su fin, incluso aunque seamos capaces de imaginar el fin del mundo¡±, a?ade. En todo caso, lo que est¨¢ impl¨ªcito en Recordar el futuro es c¨®mo, a trav¨¦s de lo extra¨ªdo de los sustratos de la tierra, ¡°podr¨ªamos llegar a entender no solo el uso que hemos hecho de ellos, sino c¨®mo han afectado a la estructuraci¨®n de los diferentes estratos sociales¡±. Seg¨²n Lavell¨¦s, ¡°recordarlo es una manera de comenzar a imaginar el futuro de una manera distinta¡±.
Este muestrario de reliquias, en t¨¦rminos de la artista madrile?a, simboliza ¡°la expansi¨®n del capitalismo¡± sin ning¨²n tipo de fronteras
En la misma sala de las reliquias, se muestra un v¨ªdeo llamado Pattern of dissolution (Patr¨®n de disoluci¨®n) que representa la fundici¨®n del oro. La pieza que, a ratos, resulta de una belleza abstracta y envolvente, se asemeja en otros a un temerario gusano dorado que todo lo aplana y que acelera su marcha, volvi¨¦ndose m¨¢s y m¨¢s l¨ªquido, col¨¢ndose en todos los resquicios: ¡°Pretendo plasmar c¨®mo el oro ha ayudado a la expansi¨®n econ¨®mica de forma fluida y sin l¨ªmites, de un modo que invade a la vez que hipnotiza¡±. Esta pieza audiovisual, que lleva al espectador a sumergirse en un espacio que destella y magnetiza, se ha presentado ya en diferentes museos del mundo.
En la actualidad, los subsuelos sudafricanos son los dep¨®sitos de oro m¨¢s ricos del planeta, seg¨²n informaci¨®n de Mining Technology, que cita a los Estados Unidos como el segundo gran productor mundial de este preciado metal. El resto de las reservas subterr¨¢neas de oro se encuentra en Indonesia, Rusia, Pap¨²a Nueva Guinea, Chile... El otro dato interesante en la historia del oro es que apenas quedar¨ªa un 20% del total existente por extraer (calculado en algo m¨¢s de 50 mil toneladas), seg¨²n datos del World Gold Council, que apunta a que cerca de 190 toneladas ya fueron extra¨ªdas a lo largo de la historia.
M¨¢s all¨¢ de los destellos del oro, en la muestra, hay, adem¨¢s, fotograf¨ªas de formas microsc¨®picas que componen piezas de arte abstracto impresas sobre papeles nobles no contaminantes y objetos escult¨®ricos obtenidos de desechos de plantas el¨¦ctricas donde combustiona el carb¨®n. En estos vol¨²menes, Lavell¨¦s trabaj¨® junto a Ana Fern¨¢ndez, qu¨ªmica del Instituto de Ciencias de la Construcci¨®n Eduardo Torroja, dependiente del CSIC, donde realizan experimentos sobre c¨®mo reutilizar las cenizas inertes que, de otro modo, habr¨ªa que almacenar.
¡°Desde la ciencia y la tecnolog¨ªa, y tambi¨¦n desde la teor¨ªa art¨ªstica, podemos dar visibilidad a los usos pr¨¢cticos de los materiales reciclados¡±, asegura. Adem¨¢s, la artista aclara que usa papeles desarrollados ¡°con m¨¦todos medievales que provienen de la India, y de f¨¢bricas que garantizan condiciones laborales dignas y de comercio justo¡±. Lavell¨¦s aboga porque desde el gremio del arte, se d¨¦ ejemplo en cuanto al buen uso de los materiales durante todo el proceso de creaci¨®n.
Lavell¨¦s, que antes trabaj¨® sobre el tema de la vivienda con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y ha expuesto en el museo de Arte Contempor¨¢neo de Belgrado, con curaci¨®n de Blanca de la Torre, se encuentra actualmente en Roma, investigando en las antiguas minas de oro del Imperio y expone su pieza audiovisual Pattern of dissolution en una muestra colectiva en el Museo de Ciencias de Trento, Italia. Adem¨¢s, algunas de sus obras, podr¨¢n verse, durante el oto?o, en el Centro de Arte y Naturaleza (CDAN) de Huesca, y en la Kunsthalle de Praga, durante 2023.
¡°Siempre intento hablar de lo local, en diferentes geograf¨ªas, porque desde lo local podemos comprender lo global; los problemas de unos suelen ser extrapolables a las preocupaciones de otros¡±, remata la artista.
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