Un a?o despu¨¦s de la tragedia de Melilla todo sigue igual
La muerte de al menos 37 seres humanos en la frontera hispano-marroqu¨ª sigue sin ser explicada por las autoridades de ambos pa¨ªses. Tanto el PP como el PSOE han aceptado una l¨®gica en la que la inmigraci¨®n solo puede ser concebida como amenaza o problema humanitario
Un a?o despu¨¦s, la muerte de al menos 37 seres humanos en la frontera hispano-marroqu¨ª de Melilla sigue sin ser explicada por las autoridades de ambos pa¨ªses. Otras 76 familias, seg¨²n un informe de Amnist¨ªa Internacional (AI), esperan noticias sobre sus hijos, hermanos o amigos, de quienes no se sabe nada desde que intentaron acceder irregularmente a Espa?a ese 24 de junio de 2022. En Marruecos, el aniversario coincide con la excavaci¨®n de un segundo foso para impedir el acceso a la valla.
Un a?o despu¨¦s, el ministro Fernando Grande-Marlaska sigue en su puesto. La acumulaci¨®n de evidencias que prueban la negligencia o la complicidad del Estado espa?ol en la masacre del 24J no ha sido suficiente para provocar su dimisi¨®n. No lo ha sido la constataci¨®n de que el ministro minti¨® en sus comparecencias parlamentarias, cuando neg¨® el fallecimiento de al menos una persona en suelo espa?ol, como sugieren las evidencias recogidas por una investigaci¨®n period¨ªstica. Tampoco las 470 devoluciones en caliente que el Defensor del Pueblo ha considerado ilegales en un informe oficial. O la omisi¨®n de socorro a las v¨ªctimas, documentada por el mismo informe de AI. La fiscal¨ªa no vio ni omisi¨®n de socorro ni ilegalidad en las devoluciones. Grande-Marlaska no ha dimitido, el presidente S¨¢nchez no le ha cesado y el PSOE le ha renovado su confianza: en la convocatoria electoral del pr¨®ximo 23 de julio, el ministro del Interior encabezar¨¢ la lista de este partido por C¨¢diz.
Un a?o despu¨¦s, la ciudad de Melilla vuelve a ser gobernada por los mismos representantes y siglas pol¨ªticas que la convirtieron durante dos d¨¦cadas en una excepci¨®n al Estado de derecho. En los a?os que conformaron su etapa previa en la presidencia de la ciudad aut¨®noma, el Gobierno de Juan Jos¨¦ Imbroda, de Partido Popular, acumul¨® acusaciones y condenas por la adjudicaci¨®n de contratos a dedo, el incumplimiento de la Ley de Memoria Hist¨®rica, el sostenimiento pol¨ªtico de imputados, la compra de votos y la cooptaci¨®n u hostigamiento de medios de comunicaci¨®n. Durante su mandato, los ni?os extranjeros fueron estigmatizados y el centro de menores de La Pur¨ªsima se convirti¨® en un s¨ªmbolo de los peores excesos de la pol¨ªtica migratoria espa?ola.
En Marruecos, el aniversario [de la tragedia] coincide con la excavaci¨®n de un segundo foso para impedir el acceso a la valla [de Melilla]
Un a?o despu¨¦s, el nacionalpopulismo se ha convertido en un determinante del mapa pol¨ªtico nacional. Como en media Europa y en tantos otros lugares del mundo, la xenofobia, la islamofobia y la desinformaci¨®n migratoria constituyen una se?a de identidad en su actuaci¨®n p¨²blica. Vox influye donde gobierna o donde decide qui¨¦n lo hace, pero su verdadero ¨¦xito reside en la capacidad de establecer el marco narrativo de la conversaci¨®n. Tanto los populares como los socialistas han aceptado una l¨®gica binaria en la que la inmigraci¨®n solo puede ser concebida como amenaza o problema humanitario, nunca como soluci¨®n.
Un a?o despu¨¦s, el Pacto Europeo de Migraciones y Asilo est¨¢ a punto de consolidar una interpretaci¨®n parcial, temerosa y cruel de la movilidad humana. Un modelo que debilita el sistema internacional de protecci¨®n, alimenta a la cada vez m¨¢s poderosa industria del control migratorio e ignora los intereses econ¨®micos y demogr¨¢ficos de Europa.
Un a?o despu¨¦s, nada ha cambiado. La pen¨²ltima tragedia migratoria, esta vez en el mar J¨®nico, se salda con la muerte de al menos 82 seres humanos y la desaparici¨®n de centenares. Su estela medi¨¢tica se desvanecer¨¢ tan r¨¢pido como se desvaneci¨® la de los muertos de Melilla. Pero sus vidas fueros reales, como lo fueron las de Qusai Ismail Abdel Qader, Marwan Mohiuddin, Muhammad Abdullah Abdul Rahman, Jalal Abdul Shakour, Mustafa Abkar Yahya, Muhammad Yaghioub Abdel Rasoul, Muhannad Mamoun Issa, Abdullah Omar, Mustafa Aber, Al-zubair Mursal, Ibrahim Othman, Adel Youssef, Pararse en Ali, Ahmed al Mahdi, Bakri Saleh, Khaled Abkar, Ahmed al Hajj, Muhammad Haroun, Nabil Abkar, Ahmad Adam, Ibrahim Sedik, Yasser Elias, Ahmed al Tom, Ibrahim al Tijani, Saleh Kamal, Core William, Adel Abdul Rahman, Tariq Ibrahim, Abdul Razzaq Ibrahim, Yousef Abdullah, Othman Abdul Rahim, Saddam Ahmed, Hassan Youssef, Abazar Salah, Abdullah Omar, Ibrahim Mohamed, Omar Ahmed, Farouk Saleh, Abdulaziz Mohammed, Mohamed Salah, Ahmed Muhammadin Ahmed, Moatasem Adam Abdel-Bashir, Jalal Abdul Shakour Yahya, Mohamed Wad Angeli, Isaac Issa, Ibrahim Ali Muhammad, Mahdi Muhammad, Imam de Herencia, Abdullah Omar, Bagdad Hussein, Wali al-din Muhammad Ali, Abdul Basit Muhammad Ishaq, Nasruddin Abkar Khamis, Abdul Rahim Abdul Latif Ali Ibrahim, Ahmed Babiker Mohammed, Bechara Ibrahim Idris, Mazen Daffa Allah, Adam Khamis Ahmed, Hamed Youssef, Abu Bakr Hussein, Ibrahim Al-Helou, Suleiman Abkar Haroun, Adam Mustafa Harin, Abdel, as¨ª como otros fallecidos en Melilla sin identificar.
Si alguno de nosotros sigue record¨¢ndoles, tal vez su muerte no haya sido completamente en vano y un d¨ªa podamos poner fin a esta locura.
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