¡°Nos robaron nuestro futuro¡±: los expresos de Abu Ghraib esperan una compensaci¨®n de Estados Unidos 20 a?os despu¨¦s
No hay constancia de que Washington haya indemnizado a los exdetenidos torturados en Irak, seg¨²n una investigaci¨®n de Human Rights Watch, que pide a las autoridades que establezcan responsabilidades y abra una v¨ªa para que reciban una reparaci¨®n
Veinte a?os despu¨¦s de la invasi¨®n militar de Irak, todo indica que el Gobierno de Estados Unidos no ha indemnizado a las personas que sufrieron torturas y otros abusos durante su detenci¨®n en la prisi¨®n de Abu Ghraib y otras c¨¢rceles dirigidas por el ej¨¦rcito norteamericano, pese a que estos expresos han intentado acudir a diferentes instancias para reclamar una compensaci¨®n y denunciar su abandono, concluy¨® la ONG Human Rights Watch (HRW) en un informe publicado este lunes.
¡°No hemos tenido pruebas, ni datos, ni existe ninguna informaci¨®n p¨²blica sobre indemnizaciones o compensaciones a estos exdetenidos que sufrieron torturas y m¨²ltiples vejaciones. Puede que haya habido alg¨²n tipo de reparaci¨®n que se haya hecho por debajo de la mesa, pero tampoco nos consta. Nos hemos dirigido al Gobierno estadounidense para pedir informaci¨®n, pero no nos han respondido¡±, explica a este diario Sarah Sanbar, investigadora para Irak en HRW y coautora del informe.
¡°Y quien ha estado en Bagdad, sabe que un iraqu¨ª no puede llamar a la puerta de la embajada de Estados Unidos y decir que viene a presentar una denuncia contra el ej¨¦rcito. A eso se suma que son personas que salieron estigmatizadas de Abu Ghraib, donde se sab¨ªa que los presos sufr¨ªan violencia sexual, y que muchos optaron por el silencio al recuperar la libertad¡±, agrega la experta.
Para justificar sus conclusiones, entre abril y julio de 2023, la ONG ha hablado con Taleb al-Majli, un iraqu¨ª que estuvo preso m¨¢s de un a?o Abu Ghraib; con otros tres exdetenidos que quisieron permanecer en el anonimato; con un exabogado estadounidense que trabaj¨® en Bagdad; con un exmiembro de la Alta Comisi¨®n de Derechos Humanos de Irak y con otras organizaciones humanitarias especializadas en el tema de la tortura. Tambi¨¦n examin¨® documentos del Gobierno estadounidense y cuestion¨® a responsables sobre las indemnizaciones.
Seg¨²n un informe del Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja (CICR), basado en declaraciones de oficiales de inteligencia militar estadounidense, entre el 70 y el 90% de las personas detenidas por la coalici¨®n internacional en Irak en 2003 fueron arrestadas por error.
Seg¨²n cifras militares, unos 100.000 iraqu¨ªes fueron arrestados por las tropas de Estados Unidos y sus aliados en Irak entre 2003 y 2009. La prisi¨®n de Abu Ghraib, a 30 kil¨®metros de Bagdad, que el r¨¦gimen de Sadam Husein us¨® para torturar a prisioneros pol¨ªticos, qued¨® despu¨¦s de la ca¨ªda de la capital a manos de la coalici¨®n internacional, asociada a las vejaciones, torturas y abusos de poder del ej¨¦rcito estadounidense con los presos iraqu¨ªes. Unas fotograf¨ªas publicadas en 2004 dieron la vuelta al mundo y revelaron estas atrocidades. Al Majli asegura estar en una de esas duras im¨¢genes, la pir¨¢mide humana de presos desnudos y encapuchados junto a dos soldados estadounidenses sonrientes. ¡°Dos soldados estadounidenses, un hombre y una mujer, nos ordenaron que nos desnud¨¢ramos. Nos amontonaron a los prisioneros unos encima de otros. Yo era uno de ellos¡±, describi¨® a los investigadores de HRW.
¡°Su relato es cre¨ªble. Este hombre tiene documentos que muestran que estuvo preso en Abu Ghraib en ese momento, conoce al dedillo la prisi¨®n, cita con detalle eventos que tuvieron lugar en esa ¨¦poca¡±, afirma Sanbar.
Seg¨²n un informe del Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja (CICR), basado en declaraciones de oficiales de inteligencia militar estadounidense, entre el 70 y el 90% de las personas detenidas por la coalici¨®n internacional en Irak en 2003 fueron arrestadas por error. Fue el caso de este hombre, liberado sin cargos en marzo de 2005. ¡°Est¨¢bamos completamente indefensos (...) Me torturaron con perros polic¨ªa, bombas de sonido, munici¨®n real, agua a presi¨®n¡±, explic¨® Al-Majli a HRW.
Al-Majli arrastra hasta hoy secuelas f¨ªsicas y psicol¨®gicas de estas vejaciones, que incluyeron violencia sexual. En la c¨¢rcel comenz¨® a morderse las manos y las mu?ecas del estr¨¦s y lo sigue haciendo hasta hoy, como pudieron comprobar los investigadores de HRW. ¡°La prisi¨®n nos destruy¨® a m¨ª y a mi familia. Nos robaron nuestro futuro¡±, lamenta.
Durante dos d¨¦cadas, al-Majli ha buscado alg¨²n tipo de reparaci¨®n. Primero acudi¨® al Colegio de Abogados iraqu¨ª, pero no aceptaron su caso, despu¨¦s se dirigi¨® al Alto Comisionado Iraqu¨ª para los Derechos Humanos, pero tambi¨¦n fue en vano. El expreso explic¨® que no sab¨ªa c¨®mo ponerse en contacto con el ej¨¦rcito estadounidense para presentar una reclamaci¨®n. En junio de 2023, HRW hizo varios contactos en su hombre, pero no recibi¨® respuesta ni pudo encontrar ninguna v¨ªa legal para que al-Majli haga una denuncia formal.
¡°Pedimos al Gobierno de Estados Unidos que abra una v¨ªa para que estos supervivientes puedan hacer llegar su caso a las instancias procedentes, en total transparencia, y accedan a una compensaci¨®n¡±, reclama Sanbar.
Unas pocas manzanas podridas
En 2004, el entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se disculp¨® por la ¡°humillaci¨®n sufrida por los prisioneros iraqu¨ªes¡± en Abu Ghraib, consider¨® que esos actos innobles eran obra de unas ¡°few bad apples¡±, literalmente unas pocas manzanas podridas, al tiempo que prometi¨® que ser¨ªan compensados.
¡°No. La tortura era una pr¨¢ctica sistem¨¢tica. Hab¨ªa un clima general y unas decisiones tomadas bien arriba que permitieron estos actos¡±, insiste Sanbar.
Abu Ghraib y las prisiones iraqu¨ªes gestionadas por Estados Unidos son solo un cap¨ªtulo de los ¡°lugares negros de la de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en todo el mundo¡±, seg¨²n HRW. En esos lugares, ¡°las fuerzas estadounidenses, los agentes de inteligencia y los contratistas llevaron a cabo torturas y otros malos tratos, llamadas t¨¦cnicas de interrogatorio mejoradas¡±, sostiene HRW, que cita Afganist¨¢n y Guant¨¢namo como los m¨¢s claros ejemplos adem¨¢s de Irak.
Pedimos al Gobierno de Estados Unidos que abra una v¨ªa para que estos supervivientes puedan hacer llegar su caso a las instancias procedentes, en total transparencia, y accedan a una compensaci¨®nSarah Sanbar, HRW
Por ello, la ONG pide que se investiguen las denuncias de tortura y otros abusos contra personas detenidas por Estados Unidos en el extranjero y se ¡°emprendan las acciones judiciales pertinentes contra todos los implicados, sea cual sea su rango o cargo¡±.
Informes de HRW en 2005 y 2011 suministraron pruebas que justificaban la investigaci¨®n de altos miembros del Gobierno por su papel en estos interrogatorios y detenciones en Irak, incluidos Bush, su vicepresidente Dick Cheney, el entonces secretario de Defensa Donald Rumsfeld (ya fallecido) y el director de la CIA, George Tenet.
¡°Todas las administraciones estadounidenses, desde George W. Bush hasta Joe Biden, han rechazado los esfuerzos de rendici¨®n de cuentas por la tortura¡±, zanja el informe de HRW.
En los a?os que siguieron al esc¨¢ndalo de Abu Ghraib, el Congreso estadounidense aprob¨® la Ley de Tratamiento de Detenidos, que proh¨ªbe someter a cualquier persona bajo custodia o control estadounidense, ¡°independientemente de su nacionalidad o ubicaci¨®n f¨ªsica¡±, a ¡°tratos o castigos crueles, inhumanos o degradantes¡±. En 2009, el entonces presidente Barack Obama anul¨® todos los memorandos que permit¨ªan la tortura. En agosto de 2022, el Pent¨¢gono public¨® un plan de acci¨®n para reducir los da?os causados a civiles en operaciones militares estadounidenses, pero no incluye ninguna v¨ªa para recibir indemnizaciones por casos anteriores de da?os a civiles.
La responsabilidad de mando
Entre 2003 y 2005, la Divisi¨®n de Investigaci¨®n Criminal (CID) del ej¨¦rcito estadounidense abri¨® al menos 506 investigaciones sobre presuntos abusos contra personas en manos de las fuerzas estadounidenses y de otras fuerzas de la coalici¨®n en Irak, seg¨²n un documento del Departamento de Defensa de Estados Unidos revisado por HRW. Un total de 38 de esas investigaciones confirmaron las denuncias o la culpabilidad de los acusados y 97 soldados estadounidenses fueron sancionados. Pero solo 11 fueron enviados ante un consejo de guerra y ¨²nicamente nueve de ellos cumplieron penas de c¨¢rcel. HRW afirma que tampoco existen ¡°pruebas p¨²blicas de que se haya responsabilizado a ning¨²n militar estadounidense de delitos cometidos por sus subordinados en virtud de la doctrina de la responsabilidad de mando¡±.
Algunas v¨ªctimas iraqu¨ªes tambi¨¦n intentaron solicitar una indemnizaci¨®n v¨ªa la Ley de Reclamaciones Extranjeras de Estados Unidos (FCA, por sus siglas en ingl¨¦s), prevista para los no estadounidenses. Pero tiene una cl¨¢usula que excluye reparaciones en contextos de combate y, adem¨¢s, prev¨¦ un plazo de dos a?os tras los hechos que se denuncian. HRW no tiene constancia de esta instancia haya favorecido el pago de ninguna indemnizaci¨®n a detenidos que sufrieron abusos en Irak en estos 20 a?os.
Jonathan Tracy, exabogado militar estadounidense que se ocup¨® de analizar reclamaciones en Irak en 2003, dijo a Human Rights Watch que no sab¨ªa de ning¨²n pago en virtud de la Ley de Reclamaciones Extranjeras a supervivientes de torturas por parte del Ej¨¦rcito. Y probablemente no exista, ya que ¡°podr¨ªa interpretarse como una admisi¨®n por parte del Gobierno¡±.
Hasta ahora, las ¨²nicas demandas que han podido avanzar se han dirigido contra contratistas militares, uno de ellos contra CACI, empresa contratada por el Gobierno estadounidense para interrogar a prisioneros en Irak, concretamente en Abu Ghraib. CACI ha intentado desestimar el caso 18 veces, pero el juicio parece cada vez m¨¢s probable, tras el rechazo de la ¨²ltima moci¨®n presentada por la compa?¨ªa por parte de un juez federal el pasado julio.
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