M¨®nica Chub, defender el derecho a existir como mujer trans ind¨ªgena en Guatemala

Un p¨¢lido rayo de sol matutino se cuela por la ventana de una casa de bloque enclavada en la exuberante naturaleza de Alta Verapaz, en la regi¨®n del altiplano de Guatemala. La luz alumbra un t¨ªpico cuarto de chica. En las paredes cuelgan collares, aretes y pulseras y la silueta de dos conejitos con la inscripci¨®n ¡°Blessing¡± (Bendici¨®n).

Frente a un espejo, una mujer se est¨¢ ajustando el g¨¹ipil y el traje t¨ªpico. Se maquilla los labios, se peina, adorna sus dedos de anillos y se pone un colgante en forma de b¨²ho. Luego da un paso atr¨¢s, se mira y sonr¨ªe, porque lo que ve es una representaci¨®n aut¨¦ntica de s¨ª misma. En una mesita de madera resalta la bandera roja, amarilla, blanca y negra, que representa a los pueblos xinca, gar¨ªfuna, maya y ladino. Encima de ella, un enorme calendario maya y en la otra pared un afiche que dice: ¡°M¨®nica Chub, Mujer Ind¨ªgena Trans¡±. Todo en la habitaci¨®n revela la identidad de M¨®nica Estefan¨ªa Chub Caal, de 32 a?os, una mujer trans maya q¡¯eqchi¡¯, coordinadora de la Oficina para la Diversidad Sexual y de G¨¦nero de Alta Verapaz y defensora de los derechos humanos de la poblaci¨®n LGBTIQ+ ind¨ªgena. Se dedica a garantizar la salud y el acceso a la justicia para las personas trans ind¨ªgenas y a defender su derecho a existir en los pueblos originarios.

Chub vive en San Pedro Carch¨¢, a unos kil¨®metros de Cob¨¢n, capital de Alta Verapaz, junto a su madre, hermana y sobrinos. Su hermana Irma le trenza el pelo antes de que parta rumbo a Cob¨¢n, para una reuni¨®n sobre las actividades municipales para el 8 de marzo, donde representa la voz de las mujeres trans ¡ªaunque ella prefiere describirse como ¡°identidad plural¡±¡ª. ¡°Los t¨¦rminos ¡®trans¡¯ y ¡°poblaci¨®n diversa¡± nos han sido impuestos por la sociedad actual, colonialista y patriarcal¡± opina. ¡°Yo y muchas otras compa?eras nos definimos ¡°Ixq Jalan Jmuel¡±, que significa Identidades Plurales en idioma Q¡¯eqchi¡¯, m¨¢s inclusivo de todos nuestros matices. Soy una entidad plural al reconocerme en el g¨¦nero femenino, como mujer, persona maya y defensora de los cuerpos plurales y del territorio. Aunque uso el t¨¦rmino ¡®trans¡¯ para que la sociedad me comprenda¡±.

Los t¨¦rminos ¡®trans¡¯ y ¡°poblaci¨®n diversa¡± nos han sido impuestos por la sociedad actual, colonialista y patriarcal

Las mujeres trans ind¨ªgenas enfrentan m¨²ltiples discriminaciones, por ser ind¨ªgenas, a menudo pobres, mujeres y parte de la comunidad LGBTIQ+. Seg¨²n la Asociaci¨®n por la igualdad de las personas LGBTIQ+ Lambda, el a?o pasado se registraron 34 asesinatos por orientaci¨®n sexual o identidad de g¨¦nero, con un aumento del 15% en comparaci¨®n a los ¨²ltimos dos a?os. Las ¨²ltimas tres v¨ªctimas fueron mujeres trans, aunque es posible que haya m¨¢s casos no registrados debido a que muchas v¨ªctimas son clasificadas como hombres al fallecer. La falta de aceptaci¨®n familiar y de las comunidades rurales conservadoras lleva a menudo a las guatemaltecas trans a migrar a la capital y a ejercer el trabajo sexual como ¨²ltimo recurso para sobrevivir. Tambi¨¦n a huir al extranjero, especialmente hacia Estados Unidos. En su ruta enfrentan niveles especialmente altos de violencia, seg¨²n el estudio Migraci¨®n y diversidad sexual de Jorge Mercado Mondrag¨®n y Andrea Veeniza Bollo S¨¢nchez.

En 2023 se registraron 34 asesinatos de personas LGBTIQ+ debido a su orientaci¨®n sexual y/o identidad de g¨¦nero, con un aumento del 15% en comparaci¨®n a los ¨²ltimos dos a?os

A diferencia de otras, Chub ha contado con el apoyo incondicional de su madre y de su hermana. ¡°Cuando a los 10 a?os qued¨® claro que era ni?a y no ni?o, mi madre dijo: ¡®Bueno, est¨¢ bien. Es lo que Dios me ha enviado¡±. No fue lo mismo para Nancy Sacul Tut, tambi¨¦n oriunda de Alta Verapaz, que en 2022 fue v¨ªctima de transfeminicidio despu¨¦s de migrar a la capital debido al rechazo de su familia.

El activismo de Chub comenz¨® en 2017, con su participaci¨®n en la primera marcha del orgullo en Ciudad de Guatemala. Para la ocasi¨®n, pidi¨® prestada una indumentaria t¨ªpica q¡¯eqchi¡¯ a una vecina. ¡°Fue entonces cuando abrac¨¦ mi identidad de mujer ind¨ªgena maya¡±, recuerda. Hoy lidera la lucha pol¨ªtica por la existencia y la visibilizaci¨®n de las personas plurales ind¨ªgenas a trav¨¦s de alianzas con entidades municipales y organizaciones locales. Su trabajo fue reconocido en 2018, cuando se convirti¨® en la primera mujer trans en formar parte de la Comisi¨®n de la Mujer de la Municipalidad de Cob¨¢n.

El reconocimiento social tambi¨¦n tiene sus costos y Chub enfrenta acoso y miradas prejuiciosas. Mientras se dirige a su reuni¨®n, toma un autob¨²s y un hombre le dice con descaro: ¡°M¨®nica, siempre tuve la ilusi¨®n de conocerte¡­¡± mientras ella lo ignora. ¡°Siempre hay comentarios agresivos, pero yo no le doy importancia porque no quiero que ganen. Muchas veces son las mujeres que nos atacan porque piensan que nos burlamos de ellas¡±.

El logro de cambiar el nombre

En 2020, Chub logr¨® cambiar legalmente su nombre de nacimiento por M¨®nica Estefan¨ªa en su partida de nacimiento y en su Documento Personal de Identificaci¨®n (DPI), con el respaldo de L¨ªderes Profesionales Guatemala una organizaci¨®n de 55 abogados voluntarios. El C¨®digo Civil de Guatemala admite el cambio de nombre, con un costo de unos 8.000 quetzales (alrededor de 950 euros), explica Julio Enrique Rodr¨ªguez Argueta, director de L¨ªderes Profesionales. ¡°Desde el 2017 hemos logrado legalizar el nombre de 187 personas entre mujeres y hombres trans, gracias al apoyo econ¨®mico de organizaciones, como el Colectivo Amigos contra el Sida y OnuSida¡±.

En Guatemala la ley no permite la modificaci¨®n del sexo en los documentos oficiales, incluso despu¨¦s de someterse a una cirug¨ªa de reasignaci¨®n de sexo, la cual pocas personas desean o pueden realizar debido a su alto costo econ¨®mico y al impacto f¨ªsico que implica.

En el DPI de Chub aparece una foto de mujer y su firma con el nombre M¨®nica Estefan¨ªa, pero a¨²n se especifica ¡°sexo masculino¡±. ¡°La legalizaci¨®n del nombre es un logro inicial que refleja nuestra identidad¡±, subraya. ¡°El nombre masculino me dio muchos problemas. En banco, no pude retirar un cheque porque el empleado pens¨® que hab¨ªa robado el DPI, a ver un nombre masculino. Lo mismo sucedi¨® en el hospital, donde me llamaban con el nombre masculino frente a todos, lo cual era muy inc¨®modo. Sin embargo, el cambio de nombre no es suficiente, el Estado guatemalteco tiene una deuda con la poblaci¨®n trans en cuanto al reconocimiento de nuestra identidad de g¨¦nero¡±. En 2018 lleg¨® al Congreso la Ley de Identidad de G¨¦nero (Iniciativa 5395) que pretend¨ªa reconocer la identidad de g¨¦nero de las personas trans y habr¨ªa garantizado el derecho a solicitar la rectificaci¨®n del g¨¦nero en la partida de nacimiento. ¡°Esta ley fue engavetada¡±, recuerda el abogado Julio Rodr¨ªguez. ¡°El Gobierno usaba argumentos religiosos en contra de la ley, afirmando que afectar¨ªa a la ni?ez y a las familias. Sin embargo, existe la posibilidad de reactivar la discusi¨®n para reiniciar el proceso [con el nuevo Gobierno, presidido por el progresista Bernardo Ar¨¦valo]¡±, apuesta.

Mientras, M¨®nica Chub sigue luchando tanto en p¨²blico como en privado. Sentada en el campo frente de su casa con los pies desnudos en la hierba, se cubre con un chal de colores y sonr¨ªe. ¡°Me gusta mi vida y estoy enamorada. Tengo pareja desde hace un a?o. ?l viene a casa y a veces salimos a la calle. ?Es dif¨ªcil? S¨ª. ?Lo hago de todos modos? S¨ª, porque que todo lo que hago es para que en el futuro personas como yo puedan vivir libres¡±.

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