Un compromiso para invertir en nuestra salud com¨²n

Todos valoramos nuestra salud y la de nuestros allegados. Sin embargo, a pesar de los grandes avances en ciencia e innovaci¨®n, nuestra salud est¨¢ amenazada, incluso en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados. Como l¨ªderes del ¨¢mbito de la salud, tenemos la responsabilidad de garantizar la salud y la seguridad de nuestros ciudadanos, y debemos hacerlo de forma equitativa. No hay que dejar a nadie atr¨¢s. Sabemos que se trata de una inversi¨®n necesaria para ayudar a asegurar y construir la riqueza de los pa¨ªses y establecer la confianza en los gobiernos, las instituciones mundiales y los enfoques multilaterales para promover la salud para todos. Uno de los pasos m¨¢s importantes es apoyar y fortalecer los sistemas nacionales de salud, algo que todos los pa¨ªses se han comprometido a hacer al suscribir los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Sin embargo, sabemos que esto por s¨ª solo ya no es suficiente: todos los pa¨ªses deben invertir en su seguridad y protecci¨®n comunes: nadie estar¨¢ a salvo hasta que todos lo est¨¦n. Esto solo podemos hacerlo mirando m¨¢s all¨¢ de las fronteras, a escala regional y mundial. Debemos reforzar los sistemas de salud y la seguridad sanitaria en todo el mundo apoyando a todos los pa¨ªses, especialmente a los menos desarrollados. As¨ª lo hemos expresado mediante declaraciones y medidas en el seno de las Naciones Unidas y otros foros multilaterales.

Debemos reforzar los sistemas de salud y la seguridad sanitaria en todo el mundo apoyando a todos los pa¨ªses, especialmente a los menos desarrollados

Una de las inversiones m¨¢s costoeficaces y sostenibles que pueden hacerse con el fin de lograr un mundo m¨¢s sano y seguro para todos es invertir en una Organizaci¨®n Mundial de la Salud s¨®lida desde el punto de vista t¨¦cnico y operativo. Al representar a 194 pa¨ªses, la OMS tiene un alcance y un mandato ¨²nicos para actuar como fuerza rectora en el ¨¢mbito de la salud mundial, convocando por igual a los mejores cient¨ªficos, a los responsables nacionales de la toma de decisiones y a los asociados de la esfera de la salud. Sin embargo, para tener ¨¦xito, la OMS debe estar equipada para ser flexible, fiable y eficiente. Por ello, los Estados miembros de la OMS han decidido invertir en la organizaci¨®n y apoyar la hist¨®rica primera ronda de inversiones en la OMS.

La ronda de inversiones en la OMS, que ocupar¨¢ un lugar central en la Cumbre Mundial de la Salud que se celebra hoy en Berl¨ªn, ofrece una oportunidad ¨²nica para que los pa¨ªses se unan en apoyo de la salud mundial. Cada d¨®lar invertido en la OMS ofrece un rendimiento de 35 d¨®lares (32 euros) y puede contribuir a salvar 40 millones de vidas en los pr¨®ximos cuatro a?os. Una financiaci¨®n plena y sostenible permitir¨¢ a la OMS ayudar a los pa¨ªses a construir comunidades m¨¢s sanas, fuertes y pr¨®speras.

Muchos gobiernos se han comprometido con la salud mundial apoyando la vacunaci¨®n infantil, la lucha contra el VIH/sida y la erradicaci¨®n de la poliomielitis; creando programas de salud comunitarios y construyendo hospitales; y apoyando la investigaci¨®n y la ciencia. Sin embargo, estos ¨¦xitos y programas se ven amenazados por las numerosas crisis simult¨¢neas que ejercen una inmensa presi¨®n sobre los presupuestos nacionales.

Los ¨¦xitos [sanitarios] se ven amenazados por las numerosas crisis simult¨¢neas que ejercen una inmensa presi¨®n sobre los presupuestos nacionales

Sin embargo, la covid-19 nos ense?¨® que, en el mundo hiperconectado de hoy, los brotes de enfermedades pueden desencadenar una pandemia que puede infligir p¨¦rdidas econ¨®micas y sociales mucho mayores que la inversi¨®n esencial necesaria para prevenirlos y responder a ellos. Hemos aprendido, brote tras brote, que esa inversi¨®n requiere una respuesta y un compromiso de toda la sociedad y de todas las instancias gubernamentales. Al mismo tiempo, exige solidaridad y acuerdos internacionales para que los pa¨ªses, cuando se produzca la pr¨®xima crisis, sepan que pueden confiar los unos en los otros, ya sea para compartir conocimientos y contramedidas o para apoyar acciones que eviten interrupciones importantes en el comercio internacional, todo ello con el fin de proteger la vida y los medios de subsistencia de las personas.

Cada ni?o sin vacunar, cada aldea sin un trabajador de salud comunitario y cada brote ponen a prueba nuestro compromiso con la equidad en materia de salud. Debemos ir m¨¢s all¨¢ de los intereses particulares para apoyar a los m¨¢s vulnerables y, al hacerlo, protegernos a todos. Sostenemos que una de las inversiones m¨¢s s¨®lidas en salud mundial es la que se hace a favor de la OMS. Los pa¨ªses ya lo est¨¢n haciendo a trav¨¦s de sus contribuciones peri¨®dicas. Sin embargo, existe un claro entendimiento de que en tiempos de crisis esto no es suficiente. Por eso es tan importante la ronda de inversiones en la OMS. Invertir en la OMS es tanto un compromiso financiero con la organizaci¨®n como un compromiso pol¨ªtico con el multilateralismo. Sobre todo, es una inversi¨®n en la salud de todas las naciones del mundo y en la salud mundial. Pedimos a los dem¨¢s que se unan a nosotros. No tenemos elecci¨®n: debemos trabajar juntos.