La crisis de los cuidados: un nuevo punto de agenda de g¨¦nero en Am¨¦rica Latina y el Caribe

Desde que la regi¨®n de Am¨¦rica Latina y el Caribe, y el mundo, entraron en una emergencia global sanitaria por la covid-19, la Comisi¨®n Interamericana de Mujeres (CIM) alert¨® y enfoc¨® su trabajo en el impacto diferenciado que la crisis socioecon¨®mica resultante tendr¨ªa en las mujeres. De un d¨ªa para otro, y por las reglas de confinamiento, los hogares se convirtieron en el espacio donde todo ocurr¨ªa: el cuidado, la educaci¨®n de los ni?os, ni?as y adolescentes, la atenci¨®n de las personas con discapacidad y el surgimiento de nuevas necesidades de las personas adultas mayores; todo lo anterior sumado al teletrabajo.

Las cifras ahora muestran que la carga de trabajo en el espacio privado se increment¨® para las mujeres, causando que muchas incluso renunciasen a sus trabajos remunerados para poder ocuparse de estas responsabilidades socialmente asignadas y asumidas. As¨ª, la participaci¨®n laboral de las mujeres se vio fuertemente impactada, a lo que se suma la informalidad que caracteriza su fuerza laboral; impactos que nos llevan a considerar que se trata de una d¨¦cada perdida para las mujeres.

Con esta afectaci¨®n en la participaci¨®n igualitaria de las mujeres en la vida p¨²blica, se avista un gran retroceso, con la agravante de que la recuperaci¨®n econ¨®mica no podr¨¢ avanzar efectivamente sin la participaci¨®n productiva de la poblaci¨®n femenina.

El enfoque de g¨¦nero entiende los impactos diferenciados de la covid-19 en la vida de las mujeres y los hombres, y da cuenta de la necesidad de que los nuevos pactos para salir de la crisis no solo contemplen salud y econom¨ªa, sino tambi¨¦n los pactos de g¨¦nero. Derribar las barreras estructurales que limitan el acceso pleno de las mujeres a sus derechos y al empoderamiento econ¨®mico constituye un reto que debe estar en el centro de la agenda.

Derribar las barreras estructurales que limitan el acceso pleno de las mujeres a sus derechos y al empoderamiento econ¨®mico constituye un reto que debe estar en el centro de la agenda

Desde la CIM denominamos a esta situaci¨®n la ¡°emergencia global de los cuidados¡±, colocando estos como un punto estructural y un requisito para la transici¨®n a la nueva realidad que requiere de un crecimiento econ¨®mico sostenible. Los cuidados deben dejar de ser individuales y exclusivos de la vida familiar, para pasar a ser colectivos y as¨ª posicionarlos en el ¨¢mbito p¨²blico.

Resulta imperante avanzar hacia una sociedad que cuida y que sit¨²a los cuidados como bien p¨²blico fundamental donde todos los actores son corresponsables.

Si bien existen avances en la concepci¨®n de los cuidados, la promoci¨®n de la transformaci¨®n social y cultural hacia una sociedad que cuida nos instala en una nueva ¨¦tica que reconoce por fin una de las contribuciones m¨¢s importantes que las mujeres han asumido desde el principio de los tiempos como es el cuidado de las personas, indispensable para la vida. Con esto, resulta esencial instalar este debate en todos los niveles pol¨ªticos de toma de decisi¨®n y en el dise?o e implementaci¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas, para posicionar esta discusi¨®n de la distribuci¨®n equitativa de responsabilidades del cuidado y avanzar a pactos de cuidados.

Es en esta l¨ªnea, desde la CIM, con el apoyo del Programa EUROsocial+, impulsamos, coordinamos e implementamos el dise?o de la Ley Modelo Interamericana de Cuidados, un instrumento jur¨ªdico para los Estados que reconoce, valora, redistribuye y genera nuevas formas de atenci¨®n de esta tarea, as¨ª como el trabajo dom¨¦stico no remunerado, reconociendo la contribuci¨®n hist¨®rica de las mujeres en esta materia.

Nuestra Ley Modelo recoge elementos clave de instrumentos internacionales y se basa en los m¨¢s altos est¨¢ndares existentes en materia de derechos, no discriminaci¨®n e igualdad entre hombres y mujeres, buscando el fortalecimiento del marco jur¨ªdico interamericano, uno que cree las condiciones necesarias para que las mujeres puedan participar y permanecer en el mercado laboral en igualdad de condiciones, al disminuir la carga de trabajo no remunerado desproporcionada que las limita.

Somos conscientes que un instrumento legal es un primer paso de muchos que esperamos que sigan. Frente a las muchas incertidumbres que enfrenta la agenda de g¨¦nero en la regi¨®n, resulta imperativo el involucramiento de una multiplicidad de socios: los hombres, sociedad civil, sector privado, sindicatos, entre otros, en el marco de una agenda marco de igualdad y de empoderamiento econ¨®mico de las mujeres. Esto, impulsado por la multilateralidad, los mecanismos de adelanto de los derechos de las mujeres existentes en cada pa¨ªs de la regi¨®n y con los liderazgos de sororidad que hist¨®ricamente han acompa?ado esta lucha.

Frente a este panorama, desde la CIM junto a los mecanismos nacionales de las mujeres de la regi¨®n, hemos posicionado la recuperaci¨®n poscovid, entre otros temas, como prioritario para la 39 Asamblea de Delegadas, un espacio estrat¨¦gico para avanzar en la agenda de las mujeres de Am¨¦rica que celebra cada tres a?os.

El 25 y 26 de mayo de 2022 en Panam¨¢, pudimos avanzar colectivamente en nuestra hoja de ruta con acciones concretas frente a desaf¨ªos claros, donde las necesidades diferenciadas de las mujeres y ni?as est¨¦n en centro. La pandemia nos deja con estragos e incertidumbres, pero tambi¨¦n oportunidades y lecciones aprendidas. La m¨¢s contundente para el desarrollo sostenible de nuestra regi¨®n es: nunca m¨¢s sin nosotras.

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