La ¨²ltima milla en el futuro del desarrollo urbano

Uno de los cambios m¨¢s significativos en la operativa de la ciudad de los ¨²ltimos a?os ha sido el auge de la log¨ªstica de ¨²ltima milla. Las principales arterias y las calles de nuestras urbes se han transformado, y ahora son transitadas por un conjunto de veh¨ªculos, desde camiones, furgonetas y coches de reparto, motocicletas o bicicletas que trasladan constantemente mercanc¨ªas o comida. Este nuevo uso del espacio p¨²blico habr¨ªa sido inimaginable hace solo 20 a?os.

Esta disrupci¨®n, impulsada en gran medida por la aparici¨®n de la digitalizaci¨®n del comercio, ha transformado c¨®mo, cu¨¢ndo y por qui¨¦n se utilizan las carreteras, las aceras y las infraestructuras de transporte.

La pandemia de covid-19 y sus cierres asociados aceleraron r¨¢pidamente la tendencia preexistente hacia las compras online. Se espera que el n¨²mero de transacciones de comercio electr¨®nico en 2024 sea cinco veces mayor que en 2014, y representar¨¢ el 22% de todas las transacciones minoristas a nivel mundial. Aunque este cambio ha sido positivo en muchos aspectos, tambi¨¦n ha provocado una serie de efectos secundarios no esperables. Adem¨¢s de los gigantes del comercio electr¨®nico, nuevas l¨ªneas de productos y comercios minoristas ofrecen la entrega a domicilio. En consecuencia, se espera que el n¨²mero de veh¨ªculos de reparto en las carreteras de las 100 ciudades m¨¢s importantes del mundo aumente un 36% de 2019 a 2030.

Como planificadores y dise?adores urbanos debemos adaptarnos a las nuevas formas de configurar nuestro espacio p¨²blico, dando respuesta a los retos que plantean estas nuevas tecnolog¨ªas para equilibrarse con los costes operativos y minimizar las externalidades negativas.

En cuanto al cambio clim¨¢tico, el sector del transporte es responsable de una gran proporci¨®n de emisiones, empeorando as¨ª la calidad del aire en nuestras ciudades. Para alcanzar el objetivo de emisiones cero, ser¨¢ fundamental abandonar los veh¨ªculos impulsados por combustibles f¨®siles. Sin embargo, el auge de las compras online, impulsado por la pandemia, ha hecho que haya m¨¢s veh¨ªculos en las carreteras, m¨¢s entregas y m¨¢s paradas. Nuevas flotas, impulsadas por energ¨ªas renovables y nuestras infraestructuras de recarga en los centros de transporte, ser¨¢n clave en una nueva concepci¨®n de la log¨ªstica urbana.

Nuevas flotas, impulsadas por energ¨ªas renovables y nuestras infraestructuras de recarga en los centros de transporte, ser¨¢n clave en una nueva concepci¨®n de la log¨ªstica urbana

Asimismo, desde todas las instituciones es necesario trabajar en la concienciaci¨®n. Algunos consumidores se est¨¢n volviendo mucho m¨¢s conscientes de las cuestiones relacionadas con la sostenibilidad, y una encuesta descubri¨® que el 62% de los consumidores j¨®venes en el Reino Unido favorec¨ªan a las marcas que eran m¨¢s transparentes sobre su impacto ambiental.

El Green Button Project del Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT) persegu¨ªa entender mejor si se pod¨ªa influir en el comportamiento de los consumidores d¨¢ndoles informaci¨®n sobre el impacto de sus opciones de entrega en el medio ambiente. El estudio, realizado con el principal minorista de M¨¦xico, descubri¨® que el 30% de los consumidores que inicialmente no estaban dispuestos a aplazar la entrega elegir¨ªan esperar m¨¢s tiempo cuando se les presentaban datos sobre el efecto sobre el medio ambiente de la entrega r¨¢pida.

Desde el punto de vista de la innovaci¨®n, la financiaci¨®n dirigida a las empresas emergentes de la ¨²ltima milla aument¨® dr¨¢sticamente, pasando de 375 millones de euros en 2014 a 3.750 millones de euros a nivel mundial en 2018. Y en una encuesta efectuada en 2020 a m¨¢s de 200 expertos de la industria log¨ªstica, el 45% cree que los robots o los veh¨ªculos guiados automatizados (AGV) entregar¨¢n paquetes en los pr¨®ximos cinco a?os. Sin embargo, entre los problemas que dificultan actualmente la adopci¨®n de los veh¨ªculos rob¨®ticos de reparto se encuentran la duraci¨®n de las bater¨ªas y la aceptaci¨®n social: tanto los proveedores como los consumidores tendr¨¢n que confiar en que la inteligencia artificial ser¨¢ capaz de transportar mercanc¨ªas de forma segura.

?Y usar veh¨ªculos a¨¦reos no tripulados o drones? Aunque durante a?os se ha estudiado como la soluci¨®n a la congesti¨®n log¨ªstica, cabe destacar que DHL y Amazon han reducido o eliminado discretamente sus operaciones con drones. El problema reside en que los drones que pueden volar sobre edificios en l¨ªnea recta, solo pueden entregar una peque?a carga ¨²til en un viaje de ida y vuelta.

Una alternativa ser¨ªan las bicicletas de carga, que tienen la ventaja de poder sortear los atascos o evitarlos por completo utilizando carriles exclusivos para bicicletas. A menudo pueden llegar a los destinos de entrega directamente, en lugar de tener que aparcar ilegalmente, un problema end¨¦mico de las entregas en furgoneta. Seg¨²n un estudio de ?msterdam, el tiempo medio de carga y descarga de las furgonetas y camiones de reparto es de 12 minutos; la misma cantidad de carga puede descargarse de una bicicleta de carga en tres.

El sector p¨²blico y la industria tendr¨¢n que colaborar para ampliar las infraestructuras, como los puntos de recarga de veh¨ªculos el¨¦ctricos, los carriles prioritarios y los centros de consolidaci¨®n urbana de mercanc¨ªas.

Con el tiempo, flotas enteras tendr¨¢n que cambiar a veh¨ªculos de bajas emisiones y se espera que la tecnolog¨ªa predominante sea la de los autom¨®viles el¨¦ctricos. La eficiencia de las bater¨ªas tendr¨¢ que mejorar para aumentar la autonom¨ªa y mejorar el funcionamiento de los veh¨ªculos para lograr su completa adopci¨®n, pero la industria automovil¨ªstica est¨¢ avanzando en este sentido, ya que algunos coches el¨¦ctricos pueden recorrer m¨¢s de 640 kil¨®metros con una sola carga.

Las autoridades tambi¨¦n pueden incentivar determinados tipos de comportamiento, como ofrecer tarifas especiales a las empresas que utilicen m¨¦todos de entrega verdes. Sin normas claras, el sector no puede planificar con eficacia. Los dise?adores debemos dar una respuesta hol¨ªstica, que a¨²ne los requisitos de acceso y circulaci¨®n para la log¨ªstica integrada en nuestros barrios, tanto en los ya existentes como en los nuevos desarrollos, con un bajo impacto ambiental y una mejora en las condiciones sociales.

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