CiU pacta con el PP la Diputaci¨®n de Barcelona y cede Tarragona al PSC
Los populares se aseguran en el acuerdo dos vicepresidencias. La c¨²pula de CiU forz¨® la ruptura del pacto con el PP de Tarragona para ceder la alcald¨ªa al socialista Ballesteros
Las piezas del complicado puzle municipal que hab¨ªa sobre la mesa de los partidos encajaron el lunes pasado, en cuanto Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) asegur¨® la alcald¨ªa de Badalona al Partido Popular (PP). El PP entreg¨® ayer a CiU lo que esta quer¨ªa a cambio del gobierno de ese municipio: la presidencia de la Diputaci¨®n de Barcelona y, como guinda, los votos para seguir el tr¨¢mite en el Parlament de los presupuestos del Gobierno. CiU y el PP cerraron por la tarde un pacto para repartirse el poder provincial -con 661 millones de presupuesto- y acabar con 32 a?os de hegemon¨ªa socialista, seg¨²n fuentes del PP no desmentidas por CiU.
Tras el 22-M, el PSC se qued¨® en 19 diputados provinciales, por detr¨¢s de los 20 de CiU. El PP, con seis, usar¨¢ su llave para entregar la presidencia a los nacionalistas. El partido de Artur Mas lo pagar¨¢ caro: los populares se aseguran dos importantes vicepresidencias de la instituci¨®n provincial; controlar¨¢n el ¨¢rea territorial -con sus cuantiosas subvenciones para los municipios- y la de promoci¨®n econ¨®mica, y los nacionalistas, la de cultura y conocimiento, y la de pol¨ªtica social. Siguiendo la tradici¨®n que impuso el PSC en los ¨²ltimos a?os, CiU ofrecer¨¢ a los socialistas una quinta vicepresidencia sin competencias.
La buena relaci¨®n que CiU y PP viven tras el 22-M tuvo ayer una de cal y otra de arena. Al pacto en la Diputaci¨®n precedi¨® la ruptura de las negociaciones en Tarragona. La candidata nacionalista, Vict¨°ria Forns, rechaz¨® un acuerdo con el PP que ten¨ªa casi cerrado y dejar¨¢ gobernar en minor¨ªa al socialista Josep F¨¨lix Ballesteros. Forns cedi¨® a las ¨®rdenes del partido, que la oblig¨® a cambiar sus condiciones para hacer imposible un pacto. Inicialmente la nacionalista hab¨ªa acordado con el PP repartirse la alcald¨ªa dos a?os cada uno. La c¨²pula del partido le exigi¨® despu¨¦s que como m¨ªnimo gobernara tres a?os. Todo a sabiendas de que este pacto era inadmisible para el candidato del PP, Alejandro Fern¨¢ndez, que empat¨® el 22-M con Forns. La direcci¨®n de CiU dinamit¨® las base del pacto porque as¨ª respeta la lista m¨¢s votada. Este principio le sirve para justificar, frente a las cr¨ªticas internas, la entrega de Badalona al discurso xen¨®fobo del PP de Xavier Garc¨ªa Albiol. Sin Badalona, los populares no hubieran cedido al pacto en la Diputaci¨®n y los presupuestos.
Pese a salir derrotada en su desaf¨ªo, Forns se hizo fuerte con la militancia. Llegada en 2007 al partido, la candidata contin¨²a levantando suspicacias entre un sector de la federaci¨®n local. Su c¨ªrculo de confianza tem¨ªa que, con la alcald¨ªa partida en dos, Fern¨¢ndez eclipsara a Forns y se consumara una sangr¨ªa de votos hacia el PP en las municipales de 2015. La maniobra de CiU permite a Ballesteros gobernar en minor¨ªa. Tiene sus riesgos: una hipot¨¦tica moci¨®n de censura a medio mandato o tras las elecciones generales podr¨ªa acabar con el desalojo del regidor socialista.?
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