Los candidatos evitan compromisos sobre nuevas inversiones
La amenaza de recortes obliga a pasar de puntillas por las infraestructuras Nadie se atreve a concretar plazos para la conclusi¨®n de las obras en marcha
La campa?a asturiana apenas debate sobre infraestructuras. Solo hay alusiones espor¨¢dicas. Esto es un hecho ins¨®lito. Nada que ver con los debates electorales del pasado, en los que los equipamientos p¨²blicos, y de modo espec¨ªfico las comunicaciones, fueron el ¨¢mbito crucial en el que se dirim¨ªan las pugnas pol¨ªticas.
El gran ajuste fiscal al que est¨¢ abocada Espa?a para reconducir su d¨¦ficit p¨²blico desde el 8,5% de 2011 al 3% en 2013 ha obligado a cambiar el libreto. Los partidos pasan de puntillas y, al cabo de cuatro d¨ªas de m¨ªtines, eluden asumir nuevos compromisos inversores y concretar los plazos de terminaci¨®n de las obras en marcha.
Aunque la ejecuci¨®n de la inversi¨®n en infraestructuras y los estudios acad¨¦micos sobre la distribuci¨®n del capital p¨²blico por regiones sit¨²a al Principado en posiciones elevadas, izquierda y derecha, sindicatos y patronales, l¨ªderes sociales y creadores de opini¨®n, est¨¢n de acuerdo, de modo ins¨®lito, en que Asturias, en pleno siglo XXI, ¡°sigue aislada¡±. Todas las fuerzas pol¨ªticas, de uno u otro color, hicieron promesas en las ¨²ltimas legislaturas de acabar ¡°con el aislamiento¡±. El actual presidente auton¨®mico, Francisco ?lvarez-Cascos, exministro de Fomento con el PP y ahora l¨ªder y candidato de FAC, va m¨¢s lejos y en un mitin en Navia ha vuelto a decir de forma sorprendente que Asturias no solo es que est¨¦ aislada, sino que ¡°cada vez lo est¨¢ m¨¢s¡±.
Sin embargo, y a la vista del escenario de exigente austeridad fiscal, los candidatos evitan hablar del futuro de las infraestructuras. De ah¨ª que debatan sobre su pasado. PP y FAC coinciden en que las ¨²ltimas legislaturas, con el PSOE en los Gobiernos de Espa?a y de Asturias, han sido a?os ¡°perdidos¡±, aunque fuese entonces cuando se acometi¨® el r¨¦cord hist¨®rico de inversi¨®n estatal con la ejecuci¨®n de la macroampliaci¨®n del puerto de El Musel, la perforaci¨®n de la cordillera Cant¨¢brica para el paso del AVE y la apertura de nuevos tramos de autov¨ªas.
El discurso cala por el ¡°frenazo¡± en algunas obras tras los ajustes presupuestarios por la crisis de la deuda soberana. El 5 de febrero, Cascos declar¨®: ¡°Los proyectos de autopistas est¨¢n paralizados¡±. Pero esto lo dijo solo un d¨ªa despu¨¦s de que se hubiesen abierto al tr¨¢fico 12 nuevos kil¨®metros de la autov¨ªa del Cant¨¢brico, entre Navia y Tapia, y cinco antes de que el nuevo Gobierno nacional del PP admitiese que se ha encontrado a punto de conclusi¨®n la primera calzada de la autov¨ªa entre Salas y La Espina. Y un mes antes de que el viernes, el delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, exalcalde de Oviedo, diera por hecho que, dado el estado de la obra, tambi¨¦n abrir¨¢ este a?o al tr¨¢fico el subtramo Pendueles-Llanes de la autov¨ªa del Cant¨¢brico.
El problema empieza a ser m¨¢s de sobrecapacidad que de d¨¦ficit. El Musel est¨¢ acabado y ahora hay que darle ocupaci¨®n. Pero lo que se har¨¢, en plena ca¨ªda de los tr¨¢ficos, ser¨¢ subir tarifas ¡ªesta es ahora una de las grandes pol¨¦micas regionales¡ª para cubrir costes y pagar la obra. Y ning¨²n partido explica cu¨¢ndo recibir¨¢ pacientes el gran hospital construido por el anterior Gobierno socialista asturiano y que ha consumido unos 500 millones de euros a expensas ahora de que sea equipado.
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