Barrab¨¦s, el compa?ero, el amigo
Su voluntad de compromiso hizo que dij¨¦ramos de ¨¦l que "era un pol¨ªtico en el sindicato y un sindicalista en el partido"
Con Paulino muere un hombre profundamente ¨¦tico, que con la autoridad que le daban sus convicciones transmiti¨® siempre la importancia de luchar por los valores que para ¨¦l representaban sus dos organizaciones: la Uni¨®n General de Trabajadores y el Partido Socialista Obrero Espa?ol. Fue una gran persona cuyo trabajo y convicciones pervivir¨¢n en todos y todas los que tuvimos la suerte de compartir con ¨¦l una parte de su trayectoria.
Su formaci¨®n sindical y pol¨ªtica naci¨® del ejemplo de unos padres comprometidos y la comparti¨® desde la infancia con su querid¨ªsima hermana Marisol. En el exilio inici¨® la militancia en defensa de sus valores. All¨ª, en el Burdeos de tantos republicanos, se afili¨® a la UGT y al PSOE, as¨ª como a sus muy queridas Juventudes Socialistas, con las que siempre le uni¨® una especial relaci¨®n. Tambi¨¦n all¨ª conoci¨® a la que fue su compa?era, Josette, y naci¨® su hijo Pablo.
Siempre fue un hombre accesible, de fuerte car¨¢cter pero dispuesto a ayudar a todos, y especialmente en cualquier causa favorable al sindicalismo; era un hombre sencillo, bueno, austero, tanto en su vida en el exilio como en su trabajo en la Espa?a democr¨¢tica que ¨¦l contribuy¨® a construir. Vivi¨® al servicio de la ideolog¨ªa, que seg¨²n ¨¦l se defend¨ªa a trav¨¦s de las organizaciones, siempre intentando cumplir con su deber. Su voluntad de compromiso y responsabilidad hizo que siempre dij¨¦ramos de ¨¦l que era ¡°un pol¨ªtico en el sindicato y un sindicalista en el partido¡±.
De todas esas virtudes basta con un ejemplo: en 1975, en una generosa y arriesgada apuesta de futuro, abandon¨® una excelente situaci¨®n econ¨®mica en Burdeos, conseguida tras a?os de dificultades para volver a Espa?a porque su sindicato y su partido necesitaban de su notable poder de organizaci¨®n. Adem¨¢s, promovi¨® activamente la vuelta de tantos exiliados ugetistas y socialistas que hab¨ªan rehecho sus vidas como ¨¦l. Solo siete a?os despu¨¦s UGT era la primera fuerza sindical espa?ola y el PSOE ganaba las elecciones generales. En aquel momento Paulino ya era un pilar fundamental del sindicato, como lo fue durante la Transici¨®n y m¨¢s all¨¢.
Consciente de su condici¨®n de depositario de la memoria hist¨®rica de las organizaciones a las que perteneci¨®, nunca dej¨® de participar activamente en su promoci¨®n y difusi¨®n, y fue profusamente reconocido y premiado por ello. Le hac¨ªa especial ilusi¨®n formar parte del patronato de la fundaci¨®n de su admirado y querido Ram¨®n Rubial.
En 2008, la UGT conmemor¨® el centenario de la Casa del Pueblo de Madrid. Tuvimos la suerte de que Paulino Barrab¨¦s aceptara formar parte del comit¨¦ de honor que organiz¨® los actos conmemorativos y culturales que realizamos. En esos meses todos pudimos comprobar la autoridad moral que a¨²n ten¨ªa sobre personalidades y cargos p¨²blicos. A la vez, esa apabullante autoridad contrastaba con la humildad con que ¨¦l siempre reconoc¨ªa la jerarqu¨ªa org¨¢nica; nunca perd¨ªa la oportunidad de recordarnos el gran deber que pesa sobre los hombros de los que tenemos responsabilidades en la lucha por la causa obrera.
En una ocasi¨®n, hablando del compa?ero Rodolfo Llopis y de los conflictos vividos por el socialismo en los a?os setenta, Paulino me dijo que el final de la vida, la vejez, era a veces muy injusta. Que grandes hombres del socialismo hab¨ªan sido juzgados por sus ¨²ltimas acciones, y no por su trayectoria pol¨ªtica. A un hombre, dec¨ªa, hay que valorarlo por las cosas que ha hecho a lo largo de su vida, no por una circunstancia puntual. Paulino tuvo una larga y fruct¨ªfera vida, de la que tomamos y tomaremos ejemplo muchos y muchas ugetistas y socialistas, ahora y en los a?os venideros.
Jos¨¦ Ricardo Mart¨ªnez es secretario general de UGT Madrid.
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