Marruecos propina un escarmiento al mayor fustigador de Espa?a

La Justicia marroqu¨ª ha dado un escarmiento al que ha sido estos ¨²ltimos a?os el mayor hostigador de las autoridades espa?olas en la frontera de Melilla, en el Pe?¨®n de V¨¦lez y hasta en el interior de la ciudad aut¨®noma, donde sus secuaces amputaron, en noviembre, el brazo de la estatua de Pedro de Estopi?¨¢n, el conquistador de la plaza en 1497. Posteriormente trasladaron el brazo a Marruecos y se fotografiaron con ¨¦l en el centro de Rabat.

Said Chramti, de 36 a?os, fue condenado la semana pasada a un a?o de c¨¢rcel y el equivalente de 110 euros de multa por un tribunal de Nador, la ciudad vecina de Melilla. Los tres jueces le consideraron culpable de haber proferido ¡°amenazas¡± contra agentes de las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes el 27 de octubre pasado en la frontera internacional de Beni Enzar.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso este peri¨®dico, se se?ala que Chramti tir¨® piedras, junto con otros manifestantes, y bloque¨® el ¨²nico paso fronterizo internacional de Melilla, pero no se le condena por esta actuaci¨®n.

Chramti tiene otras muchas ¡°haza?as¡± en su biograf¨ªa como la intrusi¨®n, en agosto pasado, de media docena de activistas en el Pe?¨®n de V¨¦lez; un intento similar, pero frustrado, en el de Alhucemas; el env¨ªo de dos de sus adeptos a las islas Chafarinas coincidiendo con la celebraci¨®n, en octubre pasado, de la cumbre hispano-marroqu¨ª.

Pero su mayor ¡°gesta¡± fue la paliza propiciada a Vicente Goya, inspector jefe de la frontera, en septiembre de 2008, cuando regresaba a pie de una reuni¨®n en la sede de la aduana marroqu¨ª. A Goya le acompa?aban el teniente coronel de la Guardia Civil de Melilla, el Jefe Superior de Polic¨ªa y el Delegado de Hacienda en la ciudad que solo pudieron ayudarle a refugiarse en una peluquer¨ªa. Estuvo dos meses de baja.

Junto con Chramti han sido condenados, a dos meses de c¨¢rcel y 45 euros de multa cada uno, tres de los m¨¢s de cien j¨®venes que le secundaron en el apedreamiento de la polic¨ªa espa?ola en octubre. El tribunal considera demostrado que participaron en una ¡°manifestaci¨®n ilegal con el agravamiento de embriaguez en p¨²blico y posesi¨®n de estupefacientes¡±. Adem¨¢s ¡°insultaron¡± y ¡°desobedecieron¡± a las fuerzas del orden. La pena parece peque?a a la vista de los delitos probados y de la severidad de la Justicia marroqu¨ª.

A lo largo de ambas sentencias, la de Chramti y la de sus seguidores, aparece en varias ocasiones Yahya Yahya, senador marroqu¨ª y alcalde de Beni Enzar, que preside el Comit¨¦ para la Liberaci¨®n de Ceuta y Melilla. Queda claro que este pol¨ªtico, condenado en Italia en 2008 por agresi¨®n sexual, es el instigador de los cortes en la frontera, pero no se ha sentado en el banquillo porque, aparentemente, no pudo ser localizado. En Marruecos los parlamentarios no gozan de la misma inmunidad que en Espa?a.

Chramti, al que los polic¨ªas espa?oles han apodado ¡°el gigante¡± por su gran altura, fue detenido en noviembre por la polic¨ªa judicial que registr¨® su domicilio. Es vicepresidente del comit¨¦ para la liberaci¨®n de las dos ciudades aut¨®nomas, una asociaci¨®n no legal que fustiga el colonialismo espa?ol y sus secuelas. Ha contratado a un nuevo abogado y ha anunciado que recurrir¨¢ la sentencia por lo que no ha ingresado, por ahora, en prisi¨®n.

?? El Rey de Espa?a efectuar¨¢ una visita a Marruecos, acompa?ado por empresarios espa?oles, del 3 al 5 de marzo.