El alcalde acosador sald¨® su delito con 14.000 euros

El exalcalde popular de Ponferrada Ismael ?lvarez, declarado en 2002 acosador sexual de la entonces edil Nevenka Fern¨¢ndez, regres¨® a la pol¨ªtica en 2011 despu¨¦s de haber dimitido tras su condena. Y si no lo hizo antes fue porque no quiso. No exist¨ªa ninguna traba legal que impidiera al regidor seguir en su puesto. Para purgar su pena, a ?lvarez le bast¨® pagar una multa de 2.160 euros y una indemnizaci¨®n de 12.000.

Los tribunales apreciaron que ?lvarez ¡°solicit¨®¡± los favores sexuales de Nevenka Fern¨¢ndez en el marco de una relaci¨®n laboral ¡°habitual¡± que lleg¨® a provocar en la v¨ªctima una situaci¨®n ¡°objetiva¡± y gravemente hostil y humillante. Sin embargo, y pese a los intentos de la defensa, ning¨²n tribunal lo inhabilit¨® para ejercer cargo p¨²blico.

En 2002, el delito de acoso sexual (vigente desde 1995) no preve¨ªa la prisi¨®n como castigo. Quedaba saldado con el pago de una multa o un arresto domiciliario. Al no estar prevista la c¨¢rcel como sanci¨®n, la defensa [de Nevenka Fern¨¢ndez] no pudo pedir la inhabilitaci¨®n como medida accesoria. Seg¨²n los art¨ªculos 56 y 57 del C¨®digo Penal, la inhabilitaci¨®n ser¨¢ ¡°absoluta¡± y autom¨¢tica cuando la prisi¨®n sea superior a 10 a?os. Y ser¨¢ una facultad discrecional del juez en las penas de c¨¢rcel inferiores a un decenio. Si la condena es una multa, no se contempla. Y como en 2002 el acoso sexual no preve¨ªa la pena de prisi¨®n, fue imposible inhabilitar al alcalde.

El abogado de Nevenka Fern¨¢ndez, Adolfo Barreda, intent¨® entonces que, adem¨¢s de por acoso sexual, ?lvarez fuera condenado por ¡°lesiones ps¨ªquicas¡±. Las lesiones s¨ª preve¨ªan una pena de prisi¨®n, por lo que s¨ª se pod¨ªa pedir e imponer de manera accesoria la inhabilitaci¨®n ya que la defensa entend¨ªa que ?lvarez se aprovech¨® de su cargo para delinquir. Ni el Tribunal Superior de Castilla y Le¨®n ni el Supremo apreciaron que existieran tales lesiones. El resultado es que tampoco por esta v¨ªa fue posible solicitar la inhabilitaci¨®n como pena accesoria.

Existen algunos delitos donde el C¨®digo Penal contempla que la inhabilitaci¨®n sea parte de la condena. Por ejemplo, la prevaricaci¨®n: a la autoridad o funcionario que dicte a sabiendas una resoluci¨®n injusta se le castigar¨¢ con la inhabilitaci¨®n para cargo p¨²blico de siete a 10 a?os. Esto no ocurr¨ªa, y tampoco lo hace hoy, con el acoso sexual. ¡°Deber¨ªa contemplarse", defiende Adolfo Barreda, abogado de la concejal acosada. ¡°Para que se d¨¦ la figura del acoso sexual debe haber una relaci¨®n laboral, por lo que no entiendo por qu¨¦ la inhabilitaci¨®n no es parte de la pena¡±, sostiene.

El Gobierno de Aznar reform¨® el C¨®digo Penal a finales de 2003. Tras el caso Nevenka, recogi¨® que la pena para los acosadores ser¨¢ prisi¨®n de hasta cinco meses o una multa. Algunos sectores doctrinales y sociales lo ven a¨²n insuficiente.