El PP perder¨ªa cinco autonom¨ªas si los electores repitiesen el voto de las europeas

Los resultados de las elecciones europeas han removido los cimientos de los grandes partidos. No en vano, proyectando los resultados por comunidades aut¨®nomas en un puro ejercicio de pol¨ªtica-ficci¨®n, PP y PSOE tienen motivos para estar preocupados. O no. Porque cada cita con las urnas tiene sus propias variables. Las europeas est¨¢n marcadas por la baj¨ªsima participaci¨®n (45%) y porque los ciudadanos deciden con par¨¢metros distintos a sus representantes en Bruselas frente a los que gobernar¨¢n Espa?a o su comunidad aut¨®noma. Por eso, lo que va a leer usted aqu¨ª es una proyecci¨®n de lo que habr¨ªa ocurrido si ma?ana se convocasen auton¨®micas en toda Espa?a: con el mismo n¨²mero de votantes que votasen lo mismo que en las europeas.

Con esas cautelas, la proyecci¨®n realizada para EL PA?S por Victoriano Ram¨ªrez, director del Grupo de Investigaci¨®n en M¨¦todos Electorales de la Universidad de Granada, estima que los 1.268 esca?os en juego en las elecciones auton¨®micas bascular¨ªan hacia formaciones minoritarias, pero no con la misma intensidad que el 25 de mayo, porque las barreras obligatorias de alcanzar un n¨²mero m¨ªnimo de votos (del 3% o el 5%, dependiendo de la legislaci¨®n de cada regi¨®n), restan o incluso impiden a algunos partidos irrumpir en el escenario auton¨®mico (caso de UPyD en Galicia, que no tendr¨ªa 2 diputados, o de Ciudadanos en Madrid, que se quedar¨ªa sin seis esca?os en la Asamblea por no llegar al 5% exigido).

Con estos mimbres, el PP perder¨ªa 122 esca?os en las pr¨®ximas auton¨®micas frente a los 13 del PSOE. Juntos tienen ahora el 73% de los esca?os y pasar¨ªan a ocupar el 62,8% de los puestos, pese a que ambos no suman ni la mitad de los votos. En este escenario, IU y Podemos estar¨ªan presentes en todas las autonom¨ªas excepto en la ciudad de Melilla, mientras que UPyD lograr¨ªa llegar a todos los parlamentos salvo a los de Catalu?a y Galicia.

Por comunidades, y pensando en que UPyD mantenga su postura de dejar gobernar a la lista m¨¢s votada, el PP mantendr¨ªa mayor¨ªas en Castilla y Le¨®n, Castilla-La Mancha (ante una imposible coalici¨®n de PSOE, IU, Podemos e UPyD), Murcia, Cantabria, La Rioja, Ceuta y Melilla. Madrid tambi¨¦n ser¨ªa gobernada por el PP por los pelos, ya que la suma de los 48 diputados que le asigna esta proyecci¨®n sumados a los 17 de UPyD est¨¢ un esca?o por encima de la hipot¨¦tica suma de PSOE, IU y Podemos. En Canarias se dar¨ªa un empate entre la suma de PP y Coalici¨®n Canaria junto a UPyD y la suma de PSOE, IU y Podemos. Te¨®ricamente ser¨ªa el PP el que gobernar¨ªa por haber obtenido un mayor n¨²mero de votos. En Navarra la estad¨ªstica desdibuja la realidad, con la ausencia de UPN, pero el auge de Bildu har¨ªa imprescindible su presencia en cualquier coalici¨®n que quisiese gobernar.

Los populares perder¨ªan sin embargo los Gobiernos de Valencia, Arag¨®n, Extremadura, Baleares y Galicia, que podr¨ªan pasar a manos de hipot¨¦ticas coaliciones de izquierda con el PSOE al frente. Los socialistas mantendr¨ªan, adem¨¢s, Andaluc¨ªa y Asturias. En Catalu?a ERC gobernar¨ªa tras superar en dos esca?os a CiU. En el Pa¨ªs Vasco, el PNV restar¨ªa 6 a sus 27 esca?os actuales para igualarse con Bildu en 21.

¡°El electorado ha mostrado, en esta elecci¨®n, que existe una diversidad de tendencias pol¨ªticas en Espa?a mucho mayor que el cl¨¢sico bipartidismo sumado a los partidos nacionalistas¡±, subraya el profesor granadino de matem¨¢tica aplicada.

En esta extrapolaci¨®n, el c¨®mputo se ha efectuado procesando los resultados del escrutinio de este domingo aplicando la ley D'Hondt, las leyes electorales de cada comunidad y los diputados asignados a cada circunscripci¨®n. En Murcia y Asturias ha sido necesario hacer una estimaci¨®n por la ausencia de datos exactos de sus circunscripciones. Tampoco se ha tenido en cuenta la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa de Castilla-La Mancha, que modifica la distribuci¨®n de esca?os por provincias de modo que dificultar¨¢ la entrada de un tercer partido que enfrente el poder de PP o PSOE.