El caso Esperanza Aguirre

Hay que poseer el talento de un mago para repetir una y otra vez con ¨¦xito asegurado, en primer lugar entre los medios de comunicaci¨®n, el mismo ejercicio de prestidigitaci¨®n. Esperanza Aguirre y el Partido Popular lo han vuelto a conseguir.

El caso Naseiro de financiaci¨®n ilegal fue archivado porque el Tribunal Supremo estim¨® en 1992 la nulidad de las grabaciones que la Polic¨ªa aport¨® al juez. El fiscal retir¨® pues su acusaci¨®n. El caso Naseiro se transform¨®, pues, en caso Manglano, el nombre del magistrado que llev¨® adelante la investigaci¨®n en Valencia.

Algo parecido pretend¨ªa el PP en la investigaci¨®n de la trama G¨¹rtel. En cierto momento Federico Trillo, miembro del equipo que impulso la nulidad de actuaciones en el caso Naseiro, pareci¨® acariciar con su famoso ¡°giro copernicano¡± la nulidad y el caso G¨¹rtel se convert¨ªa en caso Garz¨®n.

El juez fue sentado en el banquillo, suspendido y m¨¢s tarde condenado por un delito de prevaricaci¨®n. Pero Trillo se qued¨® cort¨®: las fiscales Concha Sabadell y Miriam Segura siguieron en la investigaci¨®n.

El caso de la contabilidad B del PP, que ha llevado desde 1990 primero el gerente Luis B¨¢rcenas y, m¨¢s tarde, desde febrero de 1993, B¨¢rcenas junto con el tesorero ?lvaro Lapuerta, hasta 2008, se convirti¨® en el caso contabilidad de B¨¢rcenas.

Ahora, el caso de la declaraci¨®n fiscal de Esperanza Aguirre, que no es un tema judicial, sino el de una filtraci¨®n period¨ªstica, es un tema de seguridad jur¨ªdica nacional.

La candidata del PP, que ha prometido transparencia como ant¨ªdoto a los casos de corrupci¨®n en Madrid (G¨¹rtel, P¨²nica en curso y espionaje interno dentro del PP y el gobierno que presid¨ªa Aguirre en Madrid) ha reaccionado contra esa transparencia de facto que supone la publicaci¨®n de sus emolumentos de 369.000 euros en la firma Seeliger & Conde para el a?o 2013. La firma de cazatalentos anunci¨® su contrataci¨®n a mediados de enero de aquel a?o para presidir un consejo asesor de la compa?¨ªa.

Ahora el caso pol¨ªtico de Esperanza Aguirre ¡ªunos pagos cuya raz¨®n de ser convendr¨ªa conocer en quien ha cobrado despu¨¦s de ser presidenta de la Comunidad de Madrid y ahora es candidata a la alcald¨ªa de esta ciudad¡ª se ha convertido en el caso de la filtraci¨®n de su declaraci¨®n.

El ministro Montoro ha reaccionado con celeridad de comisario de polic¨ªa. Hace mucho que es m¨¢s ministro-comisario del PP que ministro del gobierno de la naci¨®n.

Pero no debe olvidarse que el caso de Esperanza Aguirre no es rayo en cielo sereno. Sigue al caso reciente de Juan Carlos Monedero por sus ingresos, tambi¨¦n filtrados a los medios de comunicaci¨®n.

Cuando los ministros o gobiernos se?alan con el dedo a los medios de comunicaci¨®n que publican noticias inc¨®modas, solemos decir: quieren matar al mensajero.

Recientemente, en el caso Monedero esa m¨¢xima volvi¨® a ponerse en pr¨¢ctica. Monedero reaccion¨® contra la filtraci¨®n, como ha hecho Aguirre. Pero la diferencia es que Montoro actu¨® como comisario del PP y encabez¨® la cruzada contra uno de los l¨ªderes del partido que sub¨ªa entonces como la espuma en las encuestas.

Esperanza Aguirre y el PP consiguen una y otra vez rizar el rizo a aquel proverbio chino tan popular entre nosotros: ¡°Cuando el sabio se?ala la luna, el tonto mira el dedo¡±.

Si a Monedero se le exigen en Hacienda pruebas de sus trabajos cobrados en Am¨¦rica Latina, ?por qu¨¦ no solicitar tambi¨¦n alguna prueba de los asesoramientos de Esperanza Aguirre? ?O es que eran verbales como aquellos realizados por Vicente Mart¨ªnez Pujalte a una empresa constructora?