?Qu¨¦ queda del asalto a los cielos de Podemos?

Podemos comenz¨® a constituirse hace un a?o como fuerza pol¨ªtica organizada con una declaraci¨®n intenciones que retumb¨® en la plaza de Vistalegre de Madrid, escenario de la asamblea fundacional del partido. ¡°El cielo no se toma por consenso. Se toma por asalto¡±, enfatiz¨® su l¨ªder, Pablo Iglesias, recurriendo a unas palabras que Karl Marx dirigi¨® a su amigo el doctor Ludwig Kugelmann para describir la fugaz insurrecci¨®n de la Comuna de Par¨ªs en 1871. El objetivo del grupo promotor de Podemos, entonces en pleno auge, era quebrar de forma definitiva los moldes del bipartidismo, y hacerlo con la ¨¦pica del ¡°ahora o nunca¡±.

Un a?o y tres citas electorales despu¨¦s, el horizonte ha cambiado. Podemos tiene representaci¨®n en 14 Parlamentos aut¨®nomos y ha impulsado los gobiernos de las principales ciudades, pero la formaci¨®n afronta ahora las generales del 20-D con el peso del mal resultado de las elecciones catalanas. La ca¨ªda de 14 puntos desde enero, seg¨²n Metroscopia, el ascenso de Ciudadanos, interpretada como nueva fuerza del cambio, y la resistencia de PP y PSOE dibujan una campa?a complicada para Podemos, cuyos cuadros saben que deber¨¢n afrontar una reflexi¨®n sobre el futuro del partido en funci¨®n de la correlaci¨®n de fuerzas del 21 de diciembre. ?Qu¨¦ queda de ese asalto a los cielos?

Varios analistas coinciden en que el intento de hacer pol¨ªtica al margen del paradigma cl¨¢sico de la izquierda y de la derecha no ha logrado cuajar. ¡°Cambiar el eje izquierda y derecha por el de arriba y abajo no ha acabado de funcionar. El eje ha vuelto y el mercado es amplio, y la pregunta que tienen que contestar antes del 20-D es para qu¨¦ va a servir el voto de Podemos¡±, reflexiona Jos¨¦ Ignacio Torreblanca, profesor de Ciencia Pol¨ªtica en la UNED, que apunta tambi¨¦n a una "confusi¨®n t¨¢ctica" en relaci¨®n con la estrategia electoral.?

Por otro lado, tambi¨¦n hay consenso sobre otra cuesti¨®n, incluso entre los cr¨ªticos con Podemos: que la formaci¨®n dio pie a la disputa por el voto del cambio. ¡°En Vistalegre naci¨® una fuerza pol¨ªtica que inaugur¨® expectativas de cambio entre mucha gente distinta, pero tambi¨¦n alarmas en las ¨¦lites viejas que quieren que nada cambie y que han descargado toda su artiller¨ªa sobre Podemos. Ha sido un a?o dif¨ªcil porque Goliat se resiste a David, pero hoy las generales llegan en un contexto en el que nadie niega que Espa?a est¨¢ cambiando y va a cambiar tras el 20-D¡±, analiza ??igo Errej¨®n, n¨²mero dos del partido: "No son unas elecciones m¨¢s, o s¨®lo para elegir gobierno, sino para reconstruir un acuerdo de pa¨ªs y ganar una d¨¦cada de avance social, democr¨¢tico y econ¨®mico".

La dificultad de la que habla Errej¨®n tiene mucho que ver con los tiempos. ¡°Si las elecciones hubieran sido en febrero, el resultado habr¨ªa sido muy bueno¡±, se?ala Jos¨¦ Pablo Ferr¨¢ndiz, vicepresidente de Metroscopia, quien recuerda que entonces muchos potenciales votantes de Podemos se ubicaban en el llamado centro. Pero ahora Ciudadanos ¡°se ha llevado a toda esa gente de centro que estaba descontenta con el panorama¡±. El 27-S, adem¨¢s, marc¨® un punto de inflexi¨®n, porque aunque sus resultados no sean extrapolables, instal¨® en el imaginario una ¡°victoria moral¡± de Albert Rivera.

Aun as¨ª, los expertos recuerdan que el electorado est¨¢ retrasando cada vez m¨¢s su decisi¨®n de voto, por eso resultar¨¢n clave los pr¨®ximos meses y los debates electorales. Kiko Llaneras, investigador del colectivo Politikon, observa ¡°un primer ajuste en las municipales¡± y luego un descenso paulatino y constante de intenci¨®n de voto a Podemos, aunque considera dif¨ªcil que baje mucho m¨¢s.

Mientras, los dirigentes del partido buscan reactivar la ¨¦pica de aquellos momentos iniciales, cuando el consenso en torno al diagn¨®stico de Podemos hab¨ªa logrado cambiar el mapa pol¨ªtico. ¡°Vistaalegre nos brind¨® la posibilidad de disputar al PSOE y al PP gobernar Espa?a. Pero una lectura correcta de Vistaalegre nos obliga a regresar a la calle, a la cola del paro, a la salida de los colegios donde esperan los padres, a las panader¨ªas a escuchar a nuestra gente, los que nos hicieron comenzar este proyecto¡±, considera Juan Carlos Monedero, fundador del partido.

El principal objetivo de Podemos es ahora desactivar el efecto Ciudadanos y la resistencia del bipartidismo. ¡°Que el adversario reaccionase de forma tan furibunda contra las tesis de Vistalegre, al mismo tiempo que trata de parecerse a lo nuevo, demuestra por una parte que los poderes conservadores son a¨²n fuertes, pero tambi¨¦n que era una hoja de ruta que les preocupaba porque posibilitaba el cambio. En Vistalegre el adversario a¨²n no hab¨ªa reaccionado, y poco despu¨¦s reaccion¨® tratando de bloquear aquella hoja de ruta. Hoy llegamos en condiciones de equilibrio entre nuestro empuje y su relativa capacidad de bloqueo¡±, concluye Errej¨®n.