Le¨®n envuelve a Isabel Carrasco en el olvido

Desde Acebedo a Zotes del P¨¢ramo, en ninguno de los 211 municipios de la provincia de Le¨®n, una placa, una calle, una rotonda o un edificio p¨²blico recuerdan a Isabel Carrasco, la presidenta de la Diputaci¨®n provincial abatida a tiros el 12 de mayo de 2014. El olvido social de la v¨ªctima, una de las pol¨ªticas m¨¢s poderosas de Castilla y Le¨®n, comenz¨® casi el mismo d¨ªa de su funeral ¡ªcon la excepci¨®n de la entrega de la medalla de Oro de la Diputaci¨®n a t¨ªtulo p¨®stumo y un homenaje m¨¢s bien discreto en el primer aniversario del crimen¡ª y se ha extendido al juicio contra sus supuestas asesinas, que arranc¨® el pasado martes.

Carrasco se ha convertido en una figura inc¨®moda tras su muerte. El PP, del que la asesinada fue presidenta provincial y del que eran afiliadas dos de las procesadas ¡ªMontserrat Gonz¨¢lez, autora confesa de los disparos, y su hija Triana, que us¨® el partido como lanzadera laboral¡ª se ha personado en la vista oral como acusaci¨®n particular. Sin embargo, en esta primera semana de juicio ning¨²n dirigente conservador, ni siquiera a nivel local, ha tenido un recuerdo para la v¨ªctima, ni ha expresado p¨²blicamente palabras de aliento para su hija o su pareja sentimental. El mismo silencio se ha apreciado a las puertas de la Audiencia Provincial: la llegada de las acusadas ¡ªmadre e hija desde la c¨¢rcel de Mansilla de las Mulas y la polic¨ªa local Raquel Gago, supuesta c¨®mplice del crimen, en libertad provisional¡ª solo ha despertado el inter¨¦s, ese s¨ª masivo, de los medios de comunicaci¨®n.

La persona que m¨¢s ha reivindicado la figura de la asesinada ha sido en este tiempo Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta de Castilla y Le¨®n, que ha honrado la memoria de la v¨ªctima en sus visitas a la provincia tras el crimen, aunque en las ¨²ltimas campa?as electorales en la provincia Carrasco desapareci¨® del horizonte. A medida que se desciende en la escala institucional, el olvido se hace m¨¢s palpable. En la actual Diputaci¨®n gobierna Juan Mart¨ªnez Majo, uno de los principales rivales pol¨ªticos de Carrasco, y de quien esta se deshizo tras las elecciones municipales de 2011. En ning¨²n pueblo, ni siquiera en Cuadros, donde gobierna Marcos Mart¨ªnez Baraz¨®n, su sucesor y que dej¨® la presidencia de la Diputaci¨®n tras ser detenido y encarcelado en la Operaci¨®n P¨²nica, se ha realizado homenaje alguno a Carrasco.

Precisamente, una de las razones que explican el abandono p¨®stumo de Carrasco tiene que ver con su supuesta implicaci¨®n en esta trama de corrupci¨®n. La Diputaci¨®n contrat¨® los servicios de la empresa de Alejandro de Pedro Llorca, uno de los principales imputados de P¨²nica, para mejorar la imagen de Carrasco en las redes sociales. Los servicios supuestamente incluyeron la creaci¨®n de peri¨®dicos zombi en Internet para alabar la tarea de la dirigente popular al frente del ente supramunicipal leon¨¦s. El hecho de que Carrasco ocupara hasta 13 cargos en administraciones y consorcios p¨²blicos, por los que percib¨ªa en torno a 150.000 euros anuales entre sueldos y dietas, tampoco ha espoleado las ganas de reivindicar su figura entre sus compa?eros de partido.

Carrasco prometi¨® a Triana Mart¨ªnez, la hija de su asesina confesa, un puesto a dedo de funcionaria en la Diputaci¨®n, y posteriormente, con el mismo criterio caprichoso, se lo quit¨®. Seg¨²n confes¨® la propia Triana varios meses despu¨¦s de ser detenida, la ca¨ªda en desgracia lleg¨® tras haberse negado, a finales de 2010, a mantener relaciones sexuales con Carrasco. Personas que trataron en vida con la presidenta de la Diputaci¨®n ¡ªas¨ª como todas las acusaciones del juicio¡ª albergan grandes dudas sobre este supuesto acercamiento sexual, que Triana mantuvo oculto por ¡°verg¨¹enza¡±.

La muerte violenta de la pol¨ªtica no ha venido acompa?ada de ninguna muestra de simpat¨ªa popular, como suele suceder en estos casos. Despu¨¦s de que la Diputaci¨®n concediera a la v¨ªctima la Medalla de Oro de la instituci¨®n a t¨ªtulo p¨®stumo, un total de 10.738 personas firmaron una petici¨®n en la plataforma Change.org para que la distinci¨®n le fuera revocada.

La antipat¨ªa que suscitaba Carrasco m¨¢s all¨¢ de su c¨ªrculo ¨ªntimo de confianza tuvo su expresi¨®n m¨¢s extrema ¡ªy delictiva¡ª en la pintada que un an¨®nimo realiz¨® en el suelo donde cay¨® tiroteada la pol¨ªtica. ¡°Aqu¨ª muri¨® un bicho¡±, escribi¨® alguien, amparado por la oscuridad, en la pasarela sobre el r¨ªo Bernesga, que ha pasado a ser conocida en la ciudad con el mal nombre de ¡°Puente de Triana¡±, en referencia a la hija de la asesina. Un joven de Bembibre estuvo detenido un d¨ªa por un tuit en que injuriaba gravemente a la asesinada y justificaba el crimen.

Aunque estas expresiones de enaltecimiento del crimen son marginales, en la primera jornada del juicio el fiscal jefe de Le¨®n, Emilio Fern¨¢ndez, se vio obligado a recordar una aparente obviedad: la vista oral no va sobre la ¡°supuesta maldad¡± de Carrasco sino sobre su asesinato.

En el inicio del proceso, las estrategias de las defensas quedaron claras: Montserrat Gonz¨¢lez se ha responsabilizado en exclusiva de la preparaci¨®n ¡ªseguimientos, compra del arma¡ª y ejecuci¨®n del crimen. La madre busca exculpar a su hija Triana, que, seg¨²n su versi¨®n, trat¨® de disuadirla de matar a Carrasco y recogi¨® del suelo, sin saber su contenido y por puro instinto, la bolsa que conten¨ªa el revolver Taurus con el que la pol¨ªtica fue asesinada. De creerse el jurado esta versi¨®n, Triana ser¨ªa ¨²nicamente responsable de encubrimiento, lo que adem¨¢s no acarrear¨ªa pena, pues el C¨®digo Penal no castiga a las personas que ocultan los delitos cometidos por sus familiares en primer grado.

En cuanto a la polic¨ªa local Raquel Gago, esta ha rechazado que autorizara a su amiga Triana a esconder en su coche la bolsa con el arma homicida y ha tratado de desvirtuar los informes policiales que la sit¨²an en los supuestos seguimientos a la presidenta de la Diputaci¨®n.

El juicio terminar¨¢ el 17 de febrero. Ese d¨ªa, el jurado se retirar¨¢ a deliberar, y tras el veredicto el silencio sobre Isabel Carrasco ser¨¢ ya absoluto.