Mi tumor se vende en el extranjero
Un hospital p¨²blico, el Gregorio Mara?¨®n de Madrid, ha cedido miles de muestras de tejido humano a una empresa extranjera que las comercializa
Miles de muestras de tejido humano han salido en los ¨²ltimos a?os de uno de los mayores hospitales p¨²blicos de Espa?a, el Gregorio Mara?¨®n, en Madrid, con destino a distintas empresas farmac¨¦uticas y de diagn¨®stico de todo el mundo que han pagado centenares de d¨®lares por utilizarlas en sus investigaciones. El hospital ha permitido que un intermediario, la empresa estadounidense TriStar, obtenga en exclusiva y de forma pr¨¢cticamente gratuita muestras de las biopsias realizadas durante d¨¦cadas en el centro. En lugar de crear un banco de tejidos p¨²blico (biobanco) al que pudieran acceder otros investigadores, la empresa ha tenido el monopolio de las muestras que los pacientes cedieron para fines de investigaci¨®n sin saber que a?os despu¨¦s contribuir¨ªan al lucro de esta compa?¨ªa privada.
Esta ins¨®lita relaci¨®n comercial de exclusividad entre un hospital p¨²blico y una empresa se ha plasmado en cuatro contratos, el primero de 2009 y el ¨²ltimo de julio de 2014, firmados por el entonces jefe de Anatom¨ªa Patol¨®gica del centro, Emilio ?lvarez, el presidente de TriStar y responsables de la Fundaci¨®n de Investigaci¨®n del Gregorio Mara?¨®n. El objeto son las micromatrices de tejidos (tissue microarrays o TMA, en sus siglas en ingl¨¦s), instrumentos que permiten agrupar en una sola l¨¢mina, y estudiar a la vez, centenares de casos de tumores. El contrato establece que TriStar encarga la fabricaci¨®n de estos TMA ¡ªcuya materia prima son las biopsias de los pacientes¡ª al hospital, que debe ¡°tramitar de inmediato los pedidos¡± porque estos tienen ¡°prioridad sobre cualquier otro proyecto de investigaci¨®n del hospital¡±.
La exclusividad llega hasta el punto de que TriStar exige, y el hospital firma, que el centro no puede ¡°competir de ninguna forma con las actividades de TriStar¡± ni ¡°hacer negocios con empresas farmac¨¦uticas o de diagn¨®stico¡±. El acuerdo, que est¨¢ clasificado como ¡°confidencial¡± pero al que tuvo acceso EL PA?S, recoge una compensaci¨®n econ¨®mica para el centro que, seg¨²n los expertos consultados, supone entregar de forma pr¨¢cticamente gratuita un material que en el mercado internacional alcanza los 1.000 d¨®lares por TMA. De los 462.000 euros ingresados por el hospital y la fundaci¨®n desde 2009, casi 250.000 se han destinado a n¨®minas. El beneficio (overhead) para la fundaci¨®n ha sido de 65.800 euros.
Avisos que cayeron en saco roto
Los avisos de varios m¨¦dicos y otros trabajadores a la direcci¨®n del hospital han ca¨ªdo en saco roto. Uno de ellos es de marzo de 2015. En un informe interno de esa fecha, elaborado por directivos del hospital para saber si
de Madrid son ciertas, uno de los especialistas de Anatom¨ªa Patol¨®gica alerta sobre la salida masiva de muestras biol¨®gicas. ¡°Nos indica que revisemos los proyectos de investigaci¨®n que tiene activos el doctor ?lvarez ya que, en su opini¨®n, est¨¢n saliendo un n¨²mero importante de bloques del archivo del servicio¡±, escriben los autores.
No fue esa la ¨²nica advertencia. Meses antes, los trabajadores de Anatom¨ªa Patol¨®gica escribieron al director m¨¦dico denunciando algo m¨¢s que el uso privado del hospital que hac¨ªan ?lvarez y los otros m¨¦dicos ahora imputados. Dos inspectoras de la Consejer¨ªa de Sanidad lo resumen as¨ª en otro informe al que ha tenido acceso EL PA?S: ¡°Consideran inexplicable la concesi¨®n de dos laboratorios en el servicio a un 'americano' que se beneficia del material existente en el archivo de enfermos operados en el hospital y se acusa al doctor ?lvarez de tener montado un negocio en secreto con ¨¦l¡±. Este escrito, que la direcci¨®n del hospital ignor¨® en su momento, figura ahora en el sumario del caso de malversaci¨®n.
El hospital reconoce que solo entre noviembre de 2012 y diciembre de 2015 el hospital ha cedido a TriStar m¨¢s de 4.300 TMA o bloques divididos (un bloque de parafina que contiene una porci¨®n de muestra). Cada TMA puede contener a su vez hasta centenares de muestras de distintos materiales biol¨®gicos. En casi todos los casos los pacientes los cedieron cuando les hicieron las biopsias para uso en investigaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro sin conocer cu¨¢l iba a ser su destino final. Pr¨¢cticamente todas las muestras son de antes de 2007, a?o en que se aprob¨® la Ley de investigaci¨®n biom¨¦dica, lo que permite que no sea necesario un consentimiento informado si los datos est¨¢n anonimizados, como es el caso.
El hospital insiste en la legalidad del contrato con TriStar y afirma que todas las cesiones de muestras se hicieron en el marco de proyectos de investigaci¨®n autorizados por el Comit¨¦ ?tico de investigaci¨®n cl¨ªnica del hospital. En los archivos del centro se conservan siete dict¨¢menes favorables de este comit¨¦ que autorizaron, entre 2010 y 2014, otros tantos proyectos de Emilio ?lvarez en colaboraci¨®n con TriStar. Sin embargo, no consta una sola memoria o informe sobre sus avances o resultados. El centro reconoce que no hizo seguimiento de esos proyectos y carga toda la responsabilidad en Emilio ?lvarez, que lider¨® el servicio de Anatom¨ªa Patol¨®gica durante 30 a?os y que actualmente est¨¢ acusado de liderar una trama de malversaci¨®n que utilizaba las instalaciones y los medios del hospital para fines privados. Este diario, con ayuda de expertos y durante cinco meses, tampoco ha encontrado ninguna publicaci¨®n cient¨ªfica relacionada con los proyectos de investigaci¨®n que supuestamente usaban los TMA.
¡°El objetivo de la cesi¨®n de muestras de un biobanco p¨²blico es compartir conocimiento con la comunidad cient¨ªfica, no el lucro, al menos en Espa?a¡±, se?ala Itziar de Lecuona, investigadora del Observatorio de Bio¨¦tica y Derecho de la C¨¢tedra Unesco de la Universidad de Barcelona y profesora del mismo centro. ¡°No se puede disfrazar la fabricaci¨®n de TMA para cederlos a una empresa como si fueran proyectos de investigaci¨®n¡±, a?ade. Y, sobre el conflicto ¨¦tico que planea sobre este caso, se pregunta: ¡°?Debe un biobanco p¨²blico estar a disposici¨®n de intereses privados?¡±
Enrique de ?lava, presidente de la Sociedad Espa?ola de Anatom¨ªa Patol¨®gica, coincide con la investigadora: ¡°No es un proyecto de investigaci¨®n en sentido estricto sino que es un programa de fabricaci¨®n de matrices de tejidos para que una compa?¨ªa externa los aproveche¡±. En su opini¨®n, se trata de pr¨¢cticas ¡°cuestionables desde el punto de vista ¨¦tico y que revelan descontrol por parte del hospital, que hace recaer en el investigador la responsabilidad de los hechos¡±. ¡°Hay empresas espa?olas y el propio hospital que podr¨ªa haber fabricado las matrices de tejido e investigar con ellas lo que hubiera sido de mucho m¨¢s provecho para la investigaci¨®n nacional¡±, concluye. Otros tres especialistas con los que ha hablado EL PA?S, que pidieron anonimato, coinciden con su diagn¨®stico.
Los responsables del hospital y de la fundaci¨®n declinaron hablar con EL PA?S y solo contestaron por escrito a algunas cuestiones a trav¨¦s de un portavoz. El presidente de TriStar, Milan Bhagat, que en febrero se ofreci¨® a responder preguntas por email, no volvi¨® a estar localizable y poco a poco fue reduciendo los pedidos de TMA al hospital. En marzo fue despedida una t¨¦cnica contratada con los fondos de TriStar y a finales de abril, la otra. Las dependencias permanecen cerradas y el proyecto parece desmantelado. El hospital, sin embargo, se niega a confirmar si ha cancelado el proyecto o si ha abierto una investigaci¨®n. ?lvarez asegur¨®, a trav¨¦s de sus abogados, que el acuerdo cuenta ¡°con la debida asesor¨ªa y dictamen legales¡±, la aprobaci¨®n de la fundaci¨®n y del comit¨¦ de ¨¦tica.
investigacion@elpais.es
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