Castilla-La Mancha adeuda 17,5 millones por obras paralizadas por Cospedal

El Gobierno de Castilla-La Mancha tiene que hacer frente al pago de 17,5 millones de euros en concepto de indemnizaciones por la paralizaci¨®n de siete infraestructuras sanitarias. Entre ellas las de tres hospitales, tres centros de salud y un centro sociosanitario cuyas obras se vieron interrumpidas con Cospedal al frente del Gobierno aut¨®nomo entre los a?os 2011 y 2015. Su Ejecutivo aleg¨® entonces falta de disponibilidad presupuestaria, pero no orden¨® la interrupci¨®n con diligencia; es decir, no se siguieron los cauces administrativos pertinentes. Ni siquiera hubo negociaciones con las empresas y por lo tanto no se cerr¨® ning¨²n acuerdo de suspensi¨®n.

En cuatro de esos casos, los de los hospitales de Albacete y Cuenca y los centros de salud de Caudete (Albacete) y Membrilla (Ciudad Real), las empresas adjudicatarias ya han reclamado v¨ªa administrativa el pago de esas indemnizaciones una vez que el actual Ejecutivo ha intentado reactivar su construcci¨®n. Siguen siendo las adjudicatarias legales de esas obras por mucho que est¨¦n paradas y a medio ejecutar.

Reclamaciones

En las reclamaciones las constructoras incluyen conceptos muy diversos: los derivados de la seguridad y vigilancia de las instalaciones, su mantenimiento y limpieza, seguros, alquiler de maquinaria e incluso las tasas municipales, abonadas a los Ayuntamientos para obtener las licencias pertinentes. En el caso del hospital de Albacete, un tercio de la reclamaci¨®n, que asciende a 10.685.652 euros, se imputa al concepto de lucro cesante o beneficio industrial. Lo firma y justifica minuciosamente la Uni¨®n Temporal de Empresas (UTE) creada a tal efecto: Constructora San Jos¨¦, Ortiz Construcciones y Proyectos y Barroso, Nava y C¨ªa. Estas obras se adjudicaron el 25 de noviembre de 2010, se iniciaron en 2011 y se paralizaron al a?o siguiente.

En Cuenca, m¨¢s de lo mismo. La UTE formada por Carrascosa, Sarri¨®n y OHL reclama un montante de 6.593.348 euros. A esa cifra se llega sumando dos cap¨ªtulos de gastos: los de suspensi¨®n de la obra y los de da?os y perjuicios, incluyendo en este ¨²ltimo algunos llamativos como los derivados del protocolo de promoci¨®n e inauguraci¨®n de las obras. La construcci¨®n se inici¨® el 29 de noviembre de 2010, y s eparaliz¨® el 13 de junio de 2011.

Otras dos reclamaciones han llegado a las oficinas del Sescam, el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha. Se trata de las relativas a la detenci¨®n de las obras de dos centros de salud en Caudete y Membrilla. La primera por valor de 116.865 euros, la firma Seranco, a la que se encomend¨® esta obra el 18 de junio de 2010. Aqu¨ª fue la propia empresa la que, tras siete pr¨®rrogas y ante la falta de pago por parte de la Administraci¨®n regional, suspendi¨® la ejecuci¨®n en enero de 2012. La misma compa?¨ªa se encargaba de las obras de finalizaci¨®n del centro de salud de Membrilla desde que logr¨® hacerse con el contrato en verano de 2010 hasta la suspensi¨®n de los trabajos en marzo de 2014. Desde ese a?o reclama da?os y perjuicios por valor de 109.526 euros.

Hay otras tres infraestructuras que no han formulado a¨²n una reclamaci¨®n formal por da?os y perjuicios. Se trata del hospital de Guadalajara, un centro sociosanitario en esa capital y otro centro de salud en Toledo. Para estos casos el Sescam estima una hipot¨¦tica factura de 5.300.000 euros por da?os y perjuicios.

El Hospital Universitario de Toledo es el proyecto sanitario estrella de las ¨²ltimas tres legislaturas en Castilla-La Mancha. Proyectado en 2002, a¨²n es un armaz¨®n de hormig¨®n a pesar de que las obras se reanudaron el pasado mes de abril. En este caso el Gobierno entonces presidido por Cospedal s¨ª negoci¨® con las empresas adjudicatarias, logrando un acuerdo que evit¨® posteriores expedientes de da?os y perjuicios. Eso ha permitido la reactivaci¨®n de unas obras cuya factura en indemnizaciones alcanz¨® la pasada legislatura los 22 millones de euros.