?Por qu¨¦ este es el pueblo con el aire m¨¢s limpio de Espa?a y el tercero del mundo?

"Hoy es un d¨ªa malo, el viento viene del sur", comenta Pedro Jos¨¦ Mar¨ªa de Pablo, alcalde de Campis¨¢balos, junto a una de las estaciones que miden los niveles de contaminaci¨®n del aire en Espa?a. En este peque?o pueblo de Guadalajara, el viento suele llegar desde el noroeste sin toparse con grandes focos industriales. Esta circunstancia, unida a un reducido censo de 68 vecinos y a su ubicaci¨®n, hacen de Campis¨¢balos la poblaci¨®n con el aire m¨¢s limpio de Espa?a y el tercero del mundo, seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS).

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El pueblo se ubica en el noroeste de la provincia de Guadalajara. Para llegar, hay que atravesar varias carreteras secundarias hasta que el cartel de Castilla-La Mancha aparece poco antes de avistar las primeras casas. "Cuando no hab¨ªa autonom¨ªas ten¨ªamos casi m¨¢s relaci¨®n con la gente de Soria que con la de Guadalajara", cuenta de Pablo. "Y eso se nota en el car¨¢cter. El clima influye mucho, el fr¨ªo nos hace trabajadores. Muchos nos fuimos a Madrid, donde casi todos hemos tenido ¨¦xito", sentencia. A un lado de la v¨ªa, las vacas pastan con la misma quietud que transmite el paisaje, solo interrumpida por unos 50 molinos de viento. Los pocos vecinos que resisten en la aldea se dedican principalmente a la ganader¨ªa y a la agricultura. Apenas transitan coches. Solo un tractor pasa junto a la iglesia. El ruido de su motor se mezcla con el del goteo de la fuente y el ta?ido de las campanas a las seis de la tarde.

El alcalde es un f¨ªsico jubilado que trabaj¨® como funcionario del Ministerio de Medio Ambiente antes de postularse a regidor del municipio por el Partido Popular, en un puesto en el que lleva tres legislaturas. Una profesi¨®n f¨¢cil de advertir cuando comienza a hablar con total soltura sobre la pureza del aire del pueblo: "Su procedencia es fundamental para que tengamos unos niveles tan buenos". Los otros dos factores determinantes son la escasa poblaci¨®n ¡ªen invierno apenas residen 20 personas¡ª y la altitud a la que se encuentra: m¨¢s de 1.300 metros.

La contaminaci¨®n atmosf¨¦rica se produce con la concentraci¨®n de part¨ªculas nocivas en el aire, muchas de ellas generadas por el hombre. La OMS recomienda que aquellas de tipo PM2,5 no deben superar los 10 microgramos por metro c¨²bico de media anual y las de tipo PM10, los 20. En la estaci¨®n de medici¨®n de Campis¨¢balos, situada sobre una colina a 800 metros del municipio y con cierto aspecto de estaci¨®n lunar, los valores recogidos son de 5 y 6 microgramos, respectivamente.

Pero en Campis¨¢balos no es que no haya part¨ªculas, es que no hay nada. Por sus calles, pobladas por casitas de piedra, lo ¨²nico que corre es el viento, fuerte, eso s¨ª, y alg¨²n que otro perro. Ni comercios, ni negocios, solo un centro de interpretaci¨®n que hace las veces de bar del pueblo. En todo el mundo, solo el municipio de Muonio, en Finlandia, y Norman Wells, en Canad¨¢, gozan de una mejor calidad del aire que esta aldea castellanomanchega. En el lado opuesto se encuentra la ciudad de Onitsha, en el sureste de Nigeria, donde los niveles superan en 30 veces los recomendados por la OMS.

En noviembre pasado, la Agencia Europea del Medio Ambiente alert¨® de que la contaminaci¨®n causa al a?o unas 30.000 muertes prematuras en Espa?a y 520.000 en toda la UE. De hecho, Bruselas dio la semana pasada un ultim¨¢tum a Espa?a para que mejore la calidad del aire, aunque en ese informe se refer¨ªa a valores distintos de los utilizados por la OMS para el r¨¢nking en el que aparece Campis¨¢balos. Algunos originarios del pueblo guadalajare?o subrayan que sus familiares suelen sobrepasar los 90 a?os. "Mi abuela muri¨® con 94; mi t¨ªa, con 96, mi madre, con 94 tambi¨¦n. La del alcalde tiene m¨¢s de 100. La gente suele vivir mucho, ?ser¨¢ por el aire? Pues tampoco se sabe", manifiesta Carmen Garc¨ªa, nacida en Campis¨¢balos y residente en Madrid. Su marido, David ?lvarez, naci¨® en Ponferrada (Le¨®n), pero acompa?a a su esposa con frecuencia al municipio: "Tengo una enfermedad bronquial y en Madrid tengo que tomar medicaci¨®n, pero aqu¨ª no me hace falta. No la necesito, me encuentro muy bien".