Homs, el tipo que midi¨® mal
De tanto mezclar partido y naci¨®n, la parte y el todo, el exconseller se hizo un l¨ªo y ha acabado en un juicio demasiado serio como para que pensara que era para ¨¦l
Los primeros en comparecer esta ma?ana en el juicio a Francesc Homs, antes de la arenga final de acusaci¨®n y defensa, han sido dos agentes de la Guardia Civil. Suele ser en esas situaciones cuando uno se da cuenta de que algo puede ser una cosa seria. Su partido ya se ha topado m¨¢s veces con ellos, en los casos 3% y Palau, y resulta de lo m¨¢s desagradable. Mucho m¨¢s para un partido de orden y conservador, que aspira a manejar la polic¨ªa, no a que le persiga. Adem¨¢s era el ¨²ltimo d¨ªa del proceso, llegaba la hora de la verdad y todo se hizo inc¨®modamente decisivo, se acababan las tonter¨ªas. El fiscal lo dej¨® bien claro con una exposici¨®n esquem¨¢tica y quir¨²rgica, como quien describe las instrucciones de una lavadora, la maldita previsibilidad del Estado de derecho. Menos mal que lleg¨® entonces para rebajar la tensi¨®n la abogada de Homs, Eva Labarta, que se quej¨® de tanto mal rollo. ¡°Me hubiera gustado acabar de forma dulce¡±, lament¨®. A lo mejor es que se esperaban que sacaran unos lacasitos, unos cacahuetes o algo y todo quedara en risas. Los de CiU siempre esta dificultad para rematar. La idea es que les hubiera gustado que esto se hubiera tratado de otra manera, y sobre todo a ellos, gente seria, y no como si fuera ¡°un asunto de un terreno de ganados¡±, un suponer.
Habl¨® hora y veinte de estas peculiaridades hist¨®ricas y pol¨ªticas del caso, que las tiene, y solo despu¨¦s de la hora entr¨® en materia. La d¨¦cima vez que dijo que iba a ser breve fue para echarse a temblar. Dominada por el sarcasmo, los puntos suspensivos e interjecciones del tipo ¡°en fin¡± y ¡°pues bueno¡± vino a decir de forma confusa que no saquemos las cosas de quicio, que hay que dejar de lado los sentimientos, pero que de todas maneras los jueces no miraran tanto la ley y relativizaran con el contexto, que dejaran estar, que esto es un l¨ªo muy gordo, y se apiadaran del acusado, porque ven¨ªa imbuido en algo m¨¢s fuerte que ¨¦l, el pueblo catal¨¢n. Se ve¨ªa que iba a acabar saliendo.
Todo viene, advirti¨® la letrada, de cuando el Constitucional rechaz¨® en 2010 parte del Estatuto catal¨¢n aprobado en refer¨¦ndum en 2006, donde por cierto solo fue a votar el 48%, pasando bastante del tema. ¡°De aquellos polvos estos lodos¡¡±, resumi¨® la abogada. Pero el caso es que ellos mismos han acabado sorprendidos del giro imprevisto de los acontecimientos: ¡°?C¨®mo iban a pensar que iban a acabar aqu¨ª?¡±. Pero qu¨¦ falta de imaginaci¨®n. La culpa, insisti¨®, fue del Gobierno de Rajoy y el Constitucional, que no les dijeron veinte veces que aquello no se hac¨ªa: ¡°Si hubieran contestado aqu¨ª no habr¨ªa nadie¡±. Si es que dialogando se entiende la gente, vino a decir. Como Puigdemont, todo luz y taqu¨ªgrafos para proclamar la rep¨²blica. Labarta lament¨® un Ejecutivo chapucero y lento, que se movi¨® mal para pararles. No, si ya, si es que lo sufrimos todos. Luego la imaginaci¨®n les sobra con los n¨²meros al contar todo el pueblo catal¨¢n en la consulta del 9-N, un tercio del censo, y en el bloque independentista de las elecciones de 2015, que obtuvo un 47,7%. Para la mayor¨ªa raspada le falt¨® el 3%, es gracioso. Sin pensar que se contradec¨ªa, sino todo lo contrario, Labarta concluy¨® con una referencia al juicio de 1934 al expresidente de la Generalitat Llu¨ªs Companys, por proclamar la rep¨²blica catalana, y cit¨® una frase de los cinco jueces que votaron contra su condena: ¡°En este tipo de cuestiones los ¨²nicos que juzgan son los ciudadanos con su voto¡±.
En su discurso final, Homs fue mejor que su abogada en lo paneg¨ªrico y adem¨¢s mucho m¨¢s breve. ¡°En este juicio se mezcla derecho y pol¨ªtica¡±, advirti¨®, algo evidente, porque ¨¦l es pol¨ªtico y mira donde est¨¢. Sigui¨® de hecho mezclando el derecho y el rev¨¦s al proclamar que actu¨® ¡°en defensa de la dignidad del pueblo de Catalu?a¡±, siempre confundiendo la parte con el todo, el partido y la naci¨®n. ¡°Lo que ustedes decidan generar¨¢ jurisprudencia y un precedente¡±, avis¨® a los jueces, para decir que aquello les sobrepasaba, cuando el que est¨¢ superado por los acontecimientos es ¨¦l. Se explic¨®: la respuesta pol¨ªtica al deseo de independencia del pueblo catal¨¢n ha sido no, la constitucional ha sido no y ahora la respuesta penal tiene mala pinta. Se le volvi¨® a olvidar que las urnas, de momento, tambi¨¦n dicen que no, aunque insisti¨® en que har¨¢n refer¨¦ndum porque tienen ¡°un mandato contrastad¨ªsimo en las urnas¡±. Las apuestas daban por hecho que acabar¨ªa con un poema, y efectivamente, fue uno de Joan Maragall, que no se merecer¨ªa tampoco que le mezclaran en esto. ¡°Nosotros somos los que hacemos patrias nuevas¡±, parafrase¨® Homs antes de irse. Pese a su esfuerzo de ¨²ltima hora, no logr¨® que aquello le quedara ¨¦pico, porque simplemente ha quedado como un tipo que midi¨® mal, un personaje secundario empujado a un papel que le queda grande. Ahora a ver si puede ser martirio sin inhabilitaci¨®n. Y a ver qui¨¦n corre m¨¢s, si el Supremo con su sentencia o el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a con la suya a Mas y compa?¨ªa, para que el l¨ªo siga.
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