El valor de una beca
El cambio impuesto por el PP nos hace retroceder en igualdad de oportunidades, deshaciendo un modelo que compensaba las diferencias socioecon¨®micas
En el comienzo de curso, es preciso llamar la atenci¨®n sobre quienes van a ser privados del derecho a la educaci¨®n por la pol¨ªtica de becas. ?ltimamente se habla mucho de la cultura del esfuerzo y se ha presentado con naturalidad como requisito para la obtenci¨®n de una beca. Ahora bien, no debe obviarse que su fin es contribuir a una pol¨ªtica educativa basada en la igualdad de oportunidades, compensado las desigualdades socioecon¨®micas, para lo que resulta imprescindible que sea justa y capaz de atender la necesidades de familias y estudiantes.
No es el mismo esfuerzo el que debe realizar un joven que proviene de una familia con una renta media o alta y habitualmente asociada a un nivel educativo superior, que el que debe realizar otro en los umbrales de renta fijados como condici¨®n de una beca. En el primer caso, un estudiante suele contar no s¨®lo con los recursos econ¨®micos en su familia, que le ayudan en caso de necesidad de apoyo educativo, de materiales o recursos educativos, sino que tambi¨¦n ha podido optar a lo largo de su escolarizaci¨®n obligatoria con el apoyo diario al estudio. Es obvio que el segundo caso implica menos recursos destinados al estudio en el hogar e incluso menos motivaci¨®n y est¨ªmulo por parte de las familias.
El cambio impuesto por el PP nos ha hecho retroceder en igualdad de oportunidades, deshaciendo un modelo que permit¨ªa compensar dichas diferencias socioecon¨®micas, pasando de ser reconocido nuestro sistema educativo como uno de los de mayor equidad del mundo, a tener un modelo profundamente injusto.
El Gobierno podr¨ªa haber optado por defender abiertamente que considera que hay demasiados estudiantes universitarios; los socialistas diferimos radicalmente de esta visi¨®n, pero entender¨ªamos que el PP leg¨ªtimamente lo considerase as¨ª; ahora bien, su aut¨¦ntica preocupaci¨®n no es la idea de que haya demasiados universitarios sino determinar qui¨¦n tiene la posibilidad de obtener esta formaci¨®n, imponiendo una selecci¨®n social justificada en la cultura del esfuerzo.
As¨ª pues, no es justo que un becario deba aprobar con m¨¢s nota que el resto para obtener su beca al curso siguiente. Si un alumno tiene derecho a ella es porque tiene necesidad de los recursos que esa beca implica. La misma raz¨®n por la que las cuant¨ªas deben ingresarse de manera inmediata, y no esperar a que pasen meses, porque muchos j¨®venes deben abandonar los estudios ante la imposibilidad de hacer frente a matr¨ªcula, residencia o libros.
Los socialistas defendemos que haya una pol¨ªtica de becas que no abandone a quien lo necesite y que no lo someta a una incertidumbre injusta. Nuestra sociedad avanzar¨¢ y progresar¨¢ con m¨¢s igualdad, con m¨¢s conocimiento y con mayor formaci¨®n, no excluyendo y reduciendo las oportunidades educativas.
M? Luz Mart¨ªnez Seijo es secretaria de Educaci¨®n y Universidades del PSOE y portavoz de Educaci¨®n en el Congreso
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