Rencores fraternales en las primarias del PP

Rafael Hernando, portavoz en el Congreso, y Ana Pastor, presidenta de la C¨¢mara, hicieron de celestinas y sentaron a Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa y Pablo Casado en la misma mesa durante la "cena de verano" del PP, el martes por la noche en Madrid. El partido se encarg¨® de distribuir luego unas fotograf¨ªas en las que se les ve¨ªa juntos y muy sonrientes. Pero la tregua dur¨® lo que la cena: tres horas de picoteo con queso, ensaladilla rusa, croquetas y ceviche de at¨²n. "Esto de las llamadas a compromisarios para que recuerden qui¨¦n les ha puesto es justo lo que hay que erradicar de la pol¨ªtica", dijo el vicesecretario a la ma?ana siguiente en una entrevista con el periodista Federico Jim¨¦nez Losantos, que se refiere a la exvicepresidenta como "la ni?a asesina". Es la guerra. Vuelan los cuchillos y en el PP, novato en primarias, est¨¢n "horrorizados". El nivel de enfrentamiento p¨²blico de los candidatos empieza a parecerse mucho al encarnizamiento del PSOE o Podemos en sus respectivos procesos para elegir al l¨ªder.

Cargos para todos. En la candidatura de Casado acusan a la de S¨¢enz de Santamar¨ªa de "prometer el mismo cargo a varias personas y decir que, si gana ¨¦l, los echar¨¢". El vicesecretario del PP, como en su d¨ªa hizo Pedro S¨¢nchez, se presenta como el candidato de las bases frente al aparato, esa estructura org¨¢nica de poder del que todos reniegan en primarias. "Yo nunca he estado en el aparato", se desmarc¨® la exvicepresidenta. Ella habla de "generosidad" y ha sugerido que le dar¨ªa el antiguo cargo de Cospedal, esto es, la secretar¨ªa general, pero Casado quiere jugar hasta el final. "Ya no s¨¦ c¨®mo decirlo: Me he presentado para ser presidente".

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Guerra de cifras. Ambas candidaturas dicen ir ganando. En la de Casado hablan del apoyo de 2.150 compromisarios (votan 3.184) con una "peque?a bolsa de errores o cambios". Santamar¨ªa niega la mayor: "No sabemos sumar", replic¨® cuando le presentaron las cuentas del vicesecretario. "Ah¨ª hay algo de magia. A lo mejor se llevan sorpresas", a?adi¨®. La exvicepresidenta niega tambi¨¦n que el resultado de la primera vuelta de las votaciones pueda considerarse, como dice su rival, "un empate t¨¦cnico" (sac¨® 1.558 votos, es decir, un 2,68% de ventaja), insiste en que gan¨® en la mitad de las circunscripciones y recuerda que el voto de los afiliados no necesariamente coincide con el de los compromisarios (que tienen la ¨²ltima palabra en el congreso del 20 y 21 de julio).

Falta de neutralidad. La candidatura de Casado asegura que en la direcci¨®n del PP no todos est¨¢n respetando la neutralidad. "Est¨¢ haciendo una campa?a excelente", dec¨ªan con iron¨ªa de un miembro de la c¨²pula al que sit¨²an pr¨®ximo a S¨¢enz de Santamar¨ªa. Rajoy no quiso ni ir a la cena de verano del PP.

Mujeres, hombres y viceversa. Los aspirantes al trono del PP han entrado en esa fase del partido en la que se refieren al personaje inc¨®modo como "ese se?or o se?ora"; ahora, "esa candidatura de la que me habla". Molesta con la idea del pacto con Cospedal para un bloque anti-Soraya, S¨¢enz de Santamar¨ªa declar¨®: "Jugar a dividir entre se?oras para ver si se encuentra hueco no me gusta. Las se?oras nos hemos comportado de forma ejemplar, bastante m¨¢s que algunos se?ores". Aqu¨ª hablaba de Casado, pero sobre todo de Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Margallo, el hombre que se impuso como misi¨®n "hacer todo lo posible" para que la candidatura de la exvicepresidenta no saliera adelante (tuvo 688 votos de 58.304). Algunos apoyos del equipo de Cospedal, no obstante, s¨ª se han pasado al bloque de Casado, como la exministra de agricultura Isabel Garc¨ªa Tejerina, que este jueves arropa al vicesecretario en un acto de campa?a en Valladolid, junto a Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco.?

Una de las ideas fuerza de la campa?a de Santamar¨ªa es que la presidenta del PP y del Gobierno debe ser "una mujer". Ha deslizado que en su d¨ªa no fue bien recibida en el partido ¡ª"me llamaban la novicia"¡ª, pero que ahora es distinto y que tiene que consolidarse el cambio "despu¨¦s de aguantar durante a?os lecciones de la izquierda sobre igualdad". "El 63% de los afiliados han votado a una mujer: a Mar¨ªa Dolores [de Cospedal] y a m¨ª. Espa?a necesita que una mujer sea presidenta", repite. "Una mujer tiene que ser presidenta... o no", replica Casado. "Ser mujer no es un m¨¦rito. Si compras que el g¨¦nero es un plus no haces honor a nuestros principios".

Juventud o "mochila". Desde la candidatura de Santamar¨ªa se?ala "la falta de experiencia" de Casado, de 37 a?os, y sugieren que pretende llegar antes de tiempo al trono popular. "Quien pide un debate de ideas no tiene ni idea", dicen. La exvicepresidenta justific¨® as¨ª su oposici¨®n a un duelo p¨²blico: "Personalmente, me vendr¨ªa muy bien debatir con Casado, contrastar experiencia. He debatido con Rubalcaba, con De la Vega, con Albert Rivera... [rivales dial¨¦cticos m¨¢s dif¨ªciles a juicio de su equipo], pero tengo que pensar en el PP y la confrontaci¨®n entre compa?eros solo ayuda al PSOE". Casado pide confrontar modelos porque ¨¦l -como Aznar- s¨ª ve necesario un rearme ideol¨®gico en el partido. Insiste en que no es "tan joven" y que, en cualquier caso, mejor juventud que "mochilas", en alusi¨®n a errores de gesti¨®n en el pasado. "Los votantes quieren gente sin mochila, con liderazgo pol¨ªtico. La pol¨ªtica no es una marat¨®n, es una carrera de relevos. Pertenezco a una generaci¨®n que ya est¨¢ al frente de otros partidos o presidiendo cinco gobiernos de la Uni¨®n Europea".

Operaci¨®n Di¨¢logo. Catalu?a est¨¢ muy presente en esta campa?a. Sirve para atacar a Pedro S¨¢nchez por reunirse con Torra, pero tambi¨¦n a Santamar¨ªa. La candidatura de Casado critica que mientras dur¨® la Operaci¨®n Di¨¢logo de la vicepresidenta no pod¨ªan "poner un pie" all¨ª.En el equipo de Santamar¨ªa le reprochan que no se quejara cuando estaban en el Gobierno. "A toro pasado es muy f¨¢cil hablar, pero a la que el independentismo puso una querella fue a m¨ª", replic¨® ella, que ha endurecido el tono: "S¨¢nchez no puede ir regalando Espa?a a trocitos"; "En Catalu?a se practica el apartheid...".?