Andaluc¨ªa equipara a las v¨ªctimas de violencia sexual con las de g¨¦nero

Por ley. La v¨ªctima de violencia sexual ser¨¢ considerada v¨ªctima de violencia de g¨¦nero en Andaluc¨ªa, con independencia de si su agresor era o no su pareja o expareja. Es una de las medidas que aprobar¨¢ el mi¨¦rcoles el Parlamento andaluz en la revisi¨®n de su normativa auton¨®mica contra violencia de g¨¦nero, aprobada en 2007. La equiparaci¨®n permitir¨¢ a estas otras v¨ªctimas asistencia letrada durante 24 horas, acceder a servicios sociales o a recursos y ayudas p¨²blicas de educaci¨®n, de vivienda o de salud, entre otras novedades.

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Andaluc¨ªa da un paso adelante con este cambio en la adaptaci¨®n del llamado convenio de Estambul, un tratado europeo que Espa?a ratific¨® en 2014 pero cuyo contenido a¨²n no ha trasladado a la normativa nacional. El convenio recopila todas las formas de violencia que pueden ejercerse contra la mujer por el mero hecho de serlo, tanto dentro como fuera de la pareja. Castilla-La Mancha es otra de las comunidades que tramita una adaptaci¨®n a la normativa europea, aunque su proyecto est¨¢ a¨²n pendiente de aprobaci¨®n.

La propuesta andaluza, a cuyos principales cambios ha tenido acceso este peri¨®dico, no va acompa?ada de memoria econ¨®mica. Fuentes de la Consejer¨ªa de Justicia aseguran, no obstante, que tiene garantizada la financiaci¨®n en los Presupuestos. ¡°Andaluc¨ªa da un paso adelante. Fortalecemos nuestra lucha y damos mejor respuesta a las mujeres v¨ªctimas y a sus familias¡±, se?al¨® Rosa Aguilar, consejera de Justicia, tras la inclusi¨®n de las enmiendas. Estas son otras novedades:

Sin atestado policial. Hasta ahora, para ser considerada como v¨ªctima y tener acceso a la atenci¨®n y las ayudas era necesario acreditarlo por resoluci¨®n judicial, mediante un informe fiscal o un atestado policial. Con este nuevo texto, se pueden gestionar tambi¨¦n a trav¨¦s de certificados de los servicios sociales, sanitarios o de centros p¨²blicos de atenci¨®n a v¨ªctimas. Adem¨¢s, valdr¨¢n informes de la Inspecci¨®n de Trabajo y de la Seguridad Social en los casos de acoso sexual y por raz¨®n de sexo en el ¨¢mbito laboral.

M¨¢s familiares. El concepto de v¨ªctima de violencia de g¨¦nero incluir¨¢ tambi¨¦n a otros miembros del entorno familiar: personas mayores, con discapacidad o en situaci¨®n de dependencia que est¨¦n sujetas a la tutela, guardia o custodia de la mujer agredida. Queda reglamentado tambi¨¦n que las madres cuyos hijos hayan sido asesinados con la intenci¨®n de da?arla, ya sea su pareja o expareja, sean tambi¨¦n v¨ªctimas, un supuesto previsto en el nuevo pacto de Estado contra la violencia de g¨¦nero, aprobado en septiembre y para el que se acaban de librar los primeros 200 millones de euros anuales.

Prostituci¨®n y acoso. El nuevo texto detalla y ampl¨ªa las cuatro formas de la violencia reconocidas; f¨ªsica, psicol¨®gica, econ¨®mica y sexual. Se identifican as¨ª las agresiones y abusos sexuales contra las mujeres, la violencia contra sus derechos sexuales y reproductivos, la trata, el matrimonio precoz o forzado y las violencias originadas por la aplicaci¨®n de tradiciones culturales que atenten contra sus derechos. Tambi¨¦n contempla en su normativa actos violentos como los feminicidios, el asesinato ejercido en el ¨¢mbito de la prostituci¨®n y la trata; el acoso sexual, ¡°cualquiera que sea el ¨¢mbito en el que se produzca, incluido el laboral¡±, o la explotaci¨®n sexual de mujeres y ni?as y la mutilaci¨®n genital femenina, ¡°a¨²n con consentimiento de la v¨ªctima¡±, avanza la consejer¨ªa.

Formaci¨®n especializada. ¡°Queremos incidir fuertemente en la formaci¨®n. Y que el personal de la Administraci¨®n p¨²blica que preste atenci¨®n a las v¨ªctimas est¨¦ formado en violencia de g¨¦nero de forma obligatoria¡±, se?ala la viceconsejera de Justicia, Isabel Mayo, que destaca que la ley promueve el rechazo de la sociedad hacia el agresor ¡°para eliminar la posible sensaci¨®n de impunidad¡±, as¨ª como protege la dignidad de las mujeres supervivientes. Tambi¨¦n se dispondr¨¢n cursos de formaci¨®n para quienes prestan atenci¨®n a los agresores y para el personal que pudiera formar parte de las comisiones de investigaci¨®n y tratamiento de acoso sexual y acoso por raz¨®n de sexo.

Ciberviolencia. La ciberviolencia, la pornograf¨ªa no consentida, los insultos y el acoso por motivos de g¨¦nero, la extorsi¨®n sexual, la difusi¨®n de im¨¢genes de la v¨ªctima y las amenazas de violaci¨®n y muerte son otros de los actos sobre los que legisla la normativa, que tambi¨¦n contempla en sus disposiciones la violencia ejercida a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n o la publicidad.

M¨¢s investigaci¨®n. La norma tambi¨¦n tiene como objetivo potenciar la investigaci¨®n, en la l¨ªnea del ya publicado Estudio de los casos de v¨ªctimas mortales por violencia de g¨¦nero en Andaluc¨ªa (2005-2015), que conclu¨ªa que el maltratador mata en casa, a traici¨®n y con alevos¨ªa. Se incorporan tambi¨¦n actuaciones dirigidas a la poblaci¨®n masculina, con especial atenci¨®n a los j¨®venes, destinadas a reforzar la sensibilizaci¨®n y prevenci¨®n de la violencia de g¨¦nero.