Por qu¨¦ gan¨® Pablo Casado y por qu¨¦ perdi¨® Soraya S¨¢enz Santamar¨ªa
El giro a la derecha del candidato y su discurso final le dieron la ventaja sobre su rival
El heredero de Aznar venci¨® a la heredera de Rajoy. Pablo Casado, de 37 a?os, es el nuevo presidente del PP y futuro candidato a La Moncloa tras ganar a Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa con el 57% de los votos. Su victoria supone un giro a la derecha de la formaci¨®n. Casado propone recuperar la ley del aborto de 1985, una convenci¨®n sobre principios para rearmarse ideol¨®gicamente y el regreso de figuras como Jos¨¦ Antonio Ortega Lara, que dej¨® el PP para irse a Vox. Este s¨¢bado pidi¨® a los suyos defender ¡°sin complejos¡± la vida y la familia y propuso endurecer el C¨®digo Penal frente al independentismo. ¡°Vuelve el PP¡±, anunci¨® en su discurso. Casado promete integrar a Santamar¨ªa y su equipo, pero no ser¨¢ f¨¢cil coser al partido, herido tras su primer y traum¨¢tico proceso de primarias.
Durante la campa?a fue h¨¢bil y agresivo. Acudi¨® el primero a visitar al talism¨¢n, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, con el que todos los candidatos quer¨ªan hacerse una foto por ser el sucesor favorito antes de que decidiera retirarse en el ¨²ltimo minuto. Endureci¨® las formas con abiertas cr¨ªticas a su rival ¡ª¡°La soberbia no gana congresos¡±; ¡°Esto no es Operaci¨®n Triunfo¡±; ¡°No supo integrar ni en el Consejo de Ministros...¡±¡ª, pero tambi¨¦n habl¨® del fondo, planteando las primarias como mucho m¨¢s que un cambio de caras. Mientras la candidatura de Santamar¨ªa insist¨ªa en que el programa del PP ya estaba escrito y que ahora se trataba de elegir a un nuevo gestor, ¨¦l present¨® una campa?a presidencial, con propuestas de cambios legislativos en justicia, educaci¨®n... y la promesa que nunca falta en periodo electoral: bajar los impuestos.
Aunque aglutinaba en su equipo y apoyos a pol¨ªticos de distintas sensibilidades ¡ªdesde Esperanza Aguirre a Javier Maroto¡ª, Casado llev¨® su discurso a la derecha de Rajoy, proponiendo medidas como regresar a la ley del aborto de 1985 [de supuestos, la actual es de plazos], prometiendo una defensa de la vida ¡°sin complejos¡±, una batalla sin cuartel contra la ley de eutanasia que pretende impulsar el Gobierno de Pedro S¨¢nchez y la ilegalizaci¨®n de los partidos independentistas con la filosof¨ªa de que es mejor prevenir que curar. Y ese fue el discurso que triunf¨® en el partido.
Un pol¨ªtico popular del sector antiaguirrista y partidario de Santamar¨ªa, explica as¨ª el acierto estrat¨¦gico de Casado: ¡°La media del PP no est¨¢ en el 5, siendo el 5 el centro y el 10 la extrema derecha. Est¨¢, en realidad en un 7,5 o un 8, y Casado entendi¨® que dirigi¨¦ndose al medio no sacar¨ªa m¨¢s votos, pero acerc¨¢ndose al extremo s¨ª¡±. Ese juego, no obstante, tiene riesgos cuando la elecci¨®n no es ante las bases o los compromisarios, sino ah¨ª fuera, en el patio electoral. ¡°Recuperar votos de Vox puede quitarte votos por el centro. Nos pasaba antes con Fuerza Nueva¡±.
Casado dedic¨® la recta final de su campa?a, hasta el mismo congreso, a insistir en que no era el segundo ¡ªpor el resultado de la primera ronda de las votaciones, que gan¨® Santamar¨ªa¡ª, sino el que hab¨ªa conseguido aglutinar ¡ª ¡°en una hora¡±, dijo¡ª a cinco de las seis candidaturas que se presentaron a las primarias para elegir al sucesor de Rajoy. Antes de que la segunda fase de las votaciones, la de los compromisarios, le diera la victoria definitiva frente a su rival, la exvicepresidenta le afe¨® que no se hubiera integrado en su lista. ¡°Yo lo habr¨ªa hecho¡±, le dijo.
No fue el ¨²nico reproche de su discurso porque ambos llegaron al ¨²ltimo minuto de las primarias muy enfrentados. ¡°Qu¨¦ importante es la lealtad, poder mirarse al espejo por las ma?anas y poder mirar a tus compa?eros a los ojos¡±, dijo Santamar¨ªa. ¡°No puede liderar el partido alguien que no est¨¢ orgulloso de su pasado. Yo lo estoy: de Aznar, de Rajoy y de Fraga¡±, replic¨® Casado. Los rifirrafes entre Aznar y la exvicepresidenta han sido continuos durante la campa?a.
Tambi¨¦n hasta el s¨¢bado lleg¨® su pelea por la gesti¨®n del desaf¨ªo independentista. ¡°He defendido la unidad de Espa?a con u?as y dientes¡±, declar¨® Santamar¨ªa. Casado habl¨® de ¡°reconquistar¡± la libertad en Catalu?a para ¡°hacer real esa Tabarnia te¨®rica¡± [la plataforma que propone separar comarcas de Barcelona y Tarragona para ridiculizar el independentismo]. Y aprovech¨® para corregir algunos reproches que hab¨ªan molestado a Rajoy, alabando su ¡°firmeza¡± durante el desaf¨ªo.
Ambos reivindicaron, al pedir el voto, su ADN popular. Presumieron de kil¨®metros recorridos, de manos estrechadas. Casado incluso sac¨® su carn¨¦ de afiliado de un bolsillo para exhibir lo ajado que estaba, los a?os que llevaba con ¨¦l. Con pr¨¢cticamente las mismas palabras, los dos dijeron: ¡°Yo soy uno de vosotros¡±. Casado a?adi¨® que, como representante del PP, hab¨ªa ido ¡°a los plat¨®s y a las tertulias a las que nadie quer¨ªa ir¡± y dado, ¡°las ruedas de prensa que nadie quer¨ªa dar¡±. Pero aquello que en la candidatura de Santamar¨ªa presentaban como ¡°un mito¡±, el de que el partido no la quer¨ªa porque la ve¨ªan como una gestora, una criatura de la Administraci¨®n y no al pie del ca?¨®n, no estaba tan lejos de la realidad: Casado se impuso con un 57% de los votos sobre la exvicepresidenta, que en un momento de su discurso, al pedir el voto, vio necesario aclarar: ¡°Soy Soraya, la del PP, mi partido¡±.
Hay compromisarios que siguen sin verla como alguien suyo. Rajoy no particip¨® en la votaci¨®n para mantenerse neutral.
La derrota de Arenas
Casado encendi¨® m¨¢s al p¨²blico, al que levant¨® varias veces de las butacas para aplaudirle en pie durante su discurso al pedir el voto. El equipo de Santamar¨ªa rest¨® importancia al ¡°aplaus¨®metro¡±, pero si quedaba alg¨²n indeciso en el escenario, pudo decantarse en ese momento. Ten¨ªan fe ciega en el gran fontanero del PP, Javier Arenas, que reclutaba apoyos en la comunidad que m¨¢s compromisarios aportaba a la votaci¨®n, Andaluc¨ªa, pero la de ayer tambi¨¦n fue una de sus primeras derrotas entre bambalinas.
Ambos candidatos se refirieron ¡ªal contrario que Rajoy en su discurso de despedida¡ª al espinoso asunto de la corrupci¨®n. Pero fue Casado quien se llev¨® la ovaci¨®n mayor al decir: ¡°Aqu¨ª no cabe ni un solo corrupto. Pero yo voy a hacer que se respete al PP. Ya basta de insidias, juicios paralelos, de condenas medi¨¢ticas y de que nos hagan las listas de los Ayuntamientos¡±.
No quiso decir el nombre de su pr¨®ximo secretario general ¡ªque debe salir de la lista que present¨® al congreso¡ª, para pactarlo con Santamar¨ªa, a la que prometi¨® integrar, como a su equipo. Casado deb¨ªa favores a los exministros que le apoyaron ¡ªIsabel Garc¨ªa Tejerina, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Margallo, Jos¨¦ Manuel Soria, Rafael Catal¨¢, Dolors Montserrat, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, Juan Ignacio Zoido¡¡ª y al equipo de campa?a que fue ara?ando votos compromisario a compromisario, como Teodoro Garc¨ªa. Todos, salvo el exministro de Industria, forzado a dimitir por los papeles de Panam¨¢, y la exsecretaria general¡ª ¡°en plena forma pol¨ªtica¡±, dijo¡ª est¨¢n en los nuevos ¨®rganos de direcci¨®n del partido. Feij¨®o, el hombre que empez¨® todo esto al retirarse en el ¨²ltimo momento, ve ¡°urgente y necesaria¡± la integraci¨®n. ¡°Ahora, a coser¡±, dijo al marcharse de regreso a Galicia.
Medidas conservadoras con las que Casado promete ¡°la vuelta del PP¡±
1. Regreso a la ley del aborto de 1985. "No nos gusta la ley de Zapatero [de plazos] y la vamos a modificar. Queremos volver a la ley de 1985 [de supuestos]. El aborto no es un derecho. No puede ser barra libre y un coladero como con esta ley", declar¨® durante la campa?a. En su discurso para pedir el voto en el congreso del que sali¨® proclamado nuevo l¨ªder del PP, pidi¨® "defender la vida y la familia sin complejos". Rajoy no cambi¨® la ley del aborto durante sus casi ocho a?os de gobierno y el asunto le cost¨® el puesto a Alberto Ruiz Gallard¨®n, entonces ministro de Justicia. La divisi¨®n que este tema provoca en las filas del PP hizo que el partido modificara sus estatutos en su anterior congreso, en 2017, para permitir el voto de conciencia (y por tanto, sin sanci¨®n por romper la disciplina). El ultracat¨®lico grupo Hazte o¨ªr, celebre por sus autobuses tr¨¢nsfobos, hizo campa?a a su favor. Sus pancartas y caravanas anti-Soraya rodearon el hotel donde se celebraba el congreso del PP este fin de semana.
2. El regreso de Mar¨ªa San Gil y Jos¨¦ Antonio Ortega Lara. La primera, expresidenta del PP vasco, abandon¨® la primera l¨ªnea hace diez a?os por entender que su partido se estaba "desdibujando" y "aparcaba en un altillo principios y valores". El segundo se fue a Vox.
3. Mano dura con Catalu?a. Casado quiere "reforzar el C¨®digo Penal" contra el desaf¨ªo soberanista, recuperando los delitos de sedici¨®n impropia y convocatoria ilegal de refer¨¦ndum, y actuar preventivamente. Durante la campa?a ha propuesto ilegalizar a los partidos independentistas. "No podemos hacer una pol¨ªtica reactiva, hay que prevenir. Se puede hacer con la ley de partidos, como se hizo con el entorno de Batasuna. En este caso no hay violencia, pero s¨ª coacciones, amenazas, ni?os que sufren en los colegios...". No se hizo durante el Gobierno de Rajoy.
4. Batalla contra la ley de eutanasia. Casado considera que el plan la norma que pretende impulsar Pedro S¨¢nchez es "injusta e innecesaria" y promete batallar contra ella en el Congreso.
5. Enmienda a la totalidad a la memoria hist¨®rica. El nuevo l¨ªder del PP ha criticado todas las propuestas de memoria hist¨®rica del Ejecutivo de S¨¢nchez. "No gastar¨ªa ni un euro en desenterrar a Franco". "No podemos tolerar que se siga haciendo una agenda de ruptura con nuestro pasado, con nuestros sentimientos m¨¢s hondos", a?adi¨®. Esperanza Aguirre, uno de sus apoyos m¨¢s entusiasmas, reproch¨® a Rajoy que no hubiera derogado la ley de memoria hist¨®rica en los a?os que estuvo en el Gobierno, aunque el expresidente s¨ª la dej¨® sin efecto al eliminar las partidas presupuestarias para su cumplimiento.
6. Educaci¨®n concertada. "Nuestro compromiso con la educaci¨®n es para evitar que el nuevo Gobierno vaya contra la libertad de elecci¨®n de la concertada, intente abrazar el adoctrinamiento educativo o dividir a nuestros hijos por la lengua que empleen en el colegio", declar¨® durante su primer discurso como presidente del PP.
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