Oubi?a, de capo a vendedor ambulante

El que fuera uno de los mayores y m¨¢s famosos capos del contrabando de tabaco y del narcotr¨¢fico en Galicia recorre estos d¨ªas mercadillos de pueblo vendiendo libros y camisetas. Dice Laureano Oubi?a que es la manera que tiene de ganarse la vida de forma legal, pero su presencia en ferias populares ha causado revuelo y protestas de partidos y grupos contra la droga. Despu¨¦s de vivir en la opulencia, gracias al dinero que amas¨® con el tr¨¢fico ilegal de tabaco y de hach¨ªs, y una larga estancia en la c¨¢rcel, el viejo capo intenta ahora explotar su popularidad vendiendo sus memorias.

Oubi?a es la expectaci¨®n en estos mercados populares donde expone su libro, editado el pasado julio, y titulado Toda la verdad. El expresidiario firma los ejemplares que vende junto a productos de merchandising, como camisetas con su caricatura, obra del dibujante gallego Gogue. Con una primera tirada de 5.000 ejemplares, el famoso exnarcotraficante asegura que ya prepara la segunda edici¨®n. ¡°La gente se acerca y habla conmigo, y el que compra el libro quiere que se lo firme. Me dan las gracias y echan una parrafada conmigo, y yo creo que se van pensando que no soy el asesino que han descrito en peri¨®dicos, telediarios y series televisivas¡±, comenta Oubi?a.

Pero el expresidiario, que el pr¨®ximo 2 de septiembre obtendr¨¢ la libertad condicional de la ¨²ltima de sus cinco condenas, despu¨¦s de tres d¨¦cadas pasando por varias c¨¢rceles espa?olas, afirma que su nombre y su pasado son un lastre para su reinserci¨®n. ¡°Ya he pedido perd¨®n y he pagado una penitencia mucho mayor que la de otros y tengo todo legal para ganarme la vida. Pero muchos que presumen de ser progresistas no quieren que me gane el pan decentemente porque no creen en la reinserci¨®n social, prefieren que vuelva a las andadas¡±, se lamenta.

El Ayuntamiento de Cambados (Pontevedra), precisamente el pueblo natal de Oubi?a, fue el primero en frustrarle el negocio al prohibir mediante un decreto que vendiera ejemplares de su libro durante la Fiesta del Albari?o, a principios de este mes. La alcaldesa, la socialista F¨¢tima Abal, revoc¨® la licencia que hab¨ªa otorgado a una persona allegada a Oubi?a que se dedica a la venta ambulante y que ya hab¨ªa abonado las tasas municipales. El Ayuntamiento aleg¨® que la presencia del excapo ¡°pod¨ªa perjudicar la imagen de Cambados¡±.

Abal exigi¨® la retirada de los libros, pero como Oubi?a hizo caso omiso, orden¨® en un segundo decreto a la Polic¨ªa Local que le obligase a desmontar el puesto. Aunque Oubi?a recurri¨® a un juzgado, su solicitud de medidas cautelares para revocar la orden de la regidora fue desestimada. Y ahora ha emprendido un contencioso administrativo contra la alcaldesa.

La pol¨¦mica en torno a la venta del libro de Oubi?a en los mercadillos continu¨® d¨ªas despu¨¦s en la feria de Padr¨®n (A Coru?a), donde el portavoz del BNG exigi¨® explicaciones al gobierno local de coalici¨®n entre el PP y Partido Galeguista Dem¨®crata (PGD). Xo¨¢n Santal¨® remiti¨® un escrito al Ayuntamiento preguntando si esa actividad ten¨ªa licencia y cu¨¢l era el control municipal sobre los puestos del mercadillo dominical. Sin embargo, al domingo siguiente, los libros de Oubi?a volvieron a la feria.

¡°Es grotesco¡±

¡°Mientras venda libros y no droga, nadie puede prohibirle a este se?or que se gane la vida de esta manera¡±, comenta Gonzalo Dur¨¢n, alcalde del PP de Vilanova de Arousa (Pontevedra). ¡°Y al que no le guste que no lo compre y punto. Nadie est¨¢ obligado a hacerlo. Yo no entro en cuestiones morales, solo opino de un ciudadano que tiene unos derechos despu¨¦s de haber cumplido sus condenas¡±.

La Fundaci¨®n Galega contra o Narcotr¨¢fico (FGN) cree, por el contrario, que ¡°Oubi?a est¨¢ dando un grotesco espect¨¢culo de autopropaganda y provocaci¨®n¡±, y recomienda a otros Ayuntamientos seguir el ejemplo de Cambados. ¡°No est¨¢n para eso los mercadillos ni las fiestas populares¡±, insiste el portavoz de la fundaci¨®n, Fernando Alonso.

¡°Podr¨¢ ser legal lo que hace, pero desde luego creemos que no es ¨¦tico ni moral. Las drogas han hecho y hacen mucho da?o a muchas personas, y lamentamos que a pesar de todo, todav¨ªa hoy, Laureano Oubi?a siga pareciendo orgulloso de haber traficado con drogas. Y sin haber pedido ni una sola disculpa a las v¨ªctimas y a la sociedad gallega, a la que tanto da?o han causado los narcotraficantes¡±, subraya Alonso.