La extrema derecha de Vox llena Vistalegre con m¨¢s de 9.000 simpatizantes

Suena Resistir¨¦, del D¨²o Din¨¢mico, y los simpatizantes y afiliados de Vox ondean las banderas de Espa?a?dentro del Palacio Vistalegre de Madrid,?donde han conseguido reunirse este domingo m¨¢s de 9.000 simpatizantes en su mayor muestra de fuerza desde que se fund¨® el partido en 2014.

Desde antes de las diez de la ma?ana, los seguidores de la formaci¨®n de extrema derecha han hecho cola para entrar a la antigua plaza de toros bajo el lema de ¡°La Espa?a viva pide elecciones¡± y?¡°Viva Espa?a, viva la Polic¨ªa Nacional, viva la Guardia Civil y viva el Rey¡±. El recinto ya estaba lleno cuando faltaban minutos para que comenzara el acto y fuera todav¨ªa esperaban otras 3.000 personas, seg¨²n la organizaci¨®n.

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La nueva extrema derecha irrumpe en escena

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Los ¨²ltimos resultados del Bar¨®metro del CIS pronostican para el partido liderado por Santiago Abascal un esca?o en el Congreso de los Diputados pero la formaci¨®n ha querido mostrar m¨²sculo. ¡°Creemos que hace falta alguien que vele por Espa?a¡±, ha dicho Rafael Ciordi, que, ante quienes ubican a la formaci¨®n en la ultraderecha, se define como ¡°una persona normal, padre de dos hijos, trabajador¡±.? Antes de entrar al recinto, suma su firma por ¡°la libertad ling¨¹¨ªstica de Espa?a¡±. Un vez dentro, desabrocha su camisa y deja ver su polo blanco pintado con la bandera de Espa?a y un lazo con la senyera. Este militante se posiciona, dice, contra del aborto, a favor de la familia y de la unidad de Espa?a.

Cristina Pam ha llegado desde Toledo. ¡°Hay que mover esto s¨ª o s¨ª¡±, apunta. Le acompa?a su nieto, de cuatro a?os: ¡°?l viene a luchar por Espa?a¡±. En las gradas, Manolo Burgos tambi¨¦n dice haber venido por el futuro de sus hijos y sus nietos. Este veterano del Ej¨¦rcito del Aire y "motero¡±, como se define, afirma que no quiere ¡°una Espa?a musulmana¡±. Su chaleco, lleno de parches esconde, bajo un pa?uelo verde una bandera franquista, seg¨²n ¨¦l mismo dice, ¡°en el coraz¨®n¡±.

Suenan canciones de Manolo Escobar, Nino Bravo y Ricky Martin. Est¨¢n calentando los ¨¢nimos para cuando comience el acto: ¡°Vamos a llenar Espa?a¡±, avisan por altavoz. El comienzo, anunciado para las 12.00, se retrasa media hora hasta que llegan el presidente del partido, Santiago Abascal; el secretario general, Javier Ortega Smith; la presidenta de Vox Madrid, Roc¨ªo Monasterios, y el exfuncionario de prisiones y v¨ªctima de ETA, Jos¨¦ Antonio Ortega Lara. Avanzan al grito de ¡°?Presidente, presidente!¡± y el logo de Vox sobre el escenario se colorea de amarillo y rojo.

Quieren presentar sus cien soluciones "para la Espa?a viva¡±, pero antes dejan claro cu¨¢les son para ellos los problemas que sufre el pa¨ªs. En las pantallas, se proyectan im¨¢genes de terroristas de ETA encapuchados, de banderas republicanas y comunistas, de migrantes cruzando la frontera, de activistas de Femen y de un seguidor del Estado Isl¨¢mico. ¡°Cuidado, que no vengan los correctitos a decirnos que somos turbas del circo romano por gritar ¡®Puigdemont a prisi¨®n¡±, dice desde el estrado la l¨ªder del partido en Madrid, que es la primera en hablar. ¡°Tenemos que ir de frente, decir la verdad aunque sea pol¨ªticamente incorrecta. Sin grises, sin atajos. Sin miedo alguno¡±, anima Monasterios.

Interlocutores de Vox se suceden para leer el centenar de propuestas: creaci¨®n de un Ministerio de Familia; derogaci¨®n de la ley de la violencia de g¨¦nero y ¡°de toda norma que discrimine a un sexo de otro¡±; rebaja del impuesto de la renta y del impuesto de sociedades; plan hidrol¨®gico nacional; tarjeta sanitaria ¨²nica. El auditorio se enciende con otra propuesta: la deportaci¨®n de ¡°los inmigrantes ilegales que no vienen a Espa?a para engrandecerla sino para recibir prebendas"; ¡°revisi¨®n de los tipos penales par combatir a las mafias de la inmigraci¨®n ilegal, as¨ª como para quienes colaboren con ella, ya sean ONG, empresas o particulares¡±. ¡°Sois vosotros los h¨¦roes, compa?eros¡±, anima un orador que enumera m¨¢s medidas: ¡°Recuperar la soberan¨ªa nacional en la aplicaci¨®n de las sentencias de nuestros tribunales. Terroristas, violadores y asesinos en serie no se beneficiar¨¢n del amparo de organismos europeos, como ha sucedido hasta ahora¡±.

¡°?Bienvenidos a la resistencia!¡±, arenga Ortega Smith. ¡°Hemos venido a lanzar un mensaje: No estamos dispuestos a aceptar que se pisotee nuestra dignidad¡±, afirma. Se dirige a ¡°los creyentes que han visto profanados sus templos¡±, a los empresarios, a los pensionistas, a las madres, a los j¨®venes ¡°que tuvieron que buscarse el pan m¨¢s all¨¢ de las fronteras¡±, a ¡°los hermanos de Latinoam¨¦rica a los que los Gobiernos espa?oles han abandonado bajo la bota de los dictadores¡±. Enseguida promete que ¡°los espa?oles estar¨¢n primero¡± y cita la f¨®rmula que llev¨® a Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos: ¡°Juntos haremos a Espa?a grande otra vez¡±.

Le sigue Ortega Lara, que ha intervenido brevemente y se pone emotivo para presentar a Abascal: ¡°Es licenciado en Sociolog¨ªa, pero tiene un t¨ªtulo m¨¢s importante". "?Espa?ol!¡±, aventura alguien desde el p¨²blico. ¡°Es licenciado en supervivencia por la universidad de la vida¡±, prosigue y se enciende la m¨²sica. Abascal sube al escenario e insiste en los pilares que se han repetido durante todo el acto. ¡°La Espa?a viva ha despertado, gracias a Dios¡±, predica. ¡°Espa?a no se levanta de vez en cuando, al azar. Una naci¨®n reacciona cuando tiene inercia hist¨®rica, cuando tiene sangre en las venas y cuando la molestan como est¨¢n molestando a Espa?a ahora¡±, se?ala.

¡°Que am¨¢is a vuestra patria, xen¨®fobos y fachas. Que la inmigraci¨®n tiene que controlarse, racistas y fachas. Que les gustan las tradiciones, retr¨®grados y fachas. Que les molestan los impuestos abusivos, insolidarios y fachas¡±, apunta. Se dirige a la izquierda ¡ª¡°me da igual progres o comunistas¡±¡ª, a ¡°la derecha cobarde¡± y a ¡°la veleta naranja¡±: ¡°Con nosotros se han acabado los sambenitos de Pablo Iglesias, Pedro S¨¢nchez y Quim Torra. Los insultos nos los ponemos como medallas en el pecho¡±. ¡°No hemos venido a ganar con Espa?a, hemos venido a que Espa?a gane con nosotros¡±, concluye Abascal y cierra el acto: ¡°Vox vive para que Espa?a viva. ?Viva Espa?a!¡±.