El hijo del expresidente de la CAM renuncia a la indemnizaci¨®n por el asesinato de su madre
Vicente Jes¨²s Sala no quiere dinero del presunto asesino, su cu?ado, pero pide para ¨¦l 24 a?os de prisi¨®n
El hijo primog¨¦nito del que fuera presidente de la extinta CAM, Vicente Sala, ha renunciado en el juzgado a la indemnizaci¨®n que pudiera corresponderle por el crimen de su madre, perpetrado en Alicante el 9 de diciembre de 2016. Vicente Jes¨²s Sala ¡°no quiere recibir cantidad econ¨®mica alguna del autor del asesinato (su cu?ado y yerno de la v¨ªctima) ni obtener ning¨²n lucro material como consecuencia de la tramitaci¨®n del presente procedimiento penal¡±, se?ala su abogado, Francisco Ruiz Marco, en su escrito de acusaci¨®n provisional, al que ha tenido acceso EL PA?S.
En cualquier caso, el heredero s¨ª reclama para L¨®pez, que est¨¢ en libertad bajo fianza, la misma pena que el fiscal, 24 a?os y medio de c¨¢rcel, por asesinato y tenencia il¨ªcita de armas. Considera probado que descerraj¨® dos disparos a su suegra, Mar¨ªa del Carmen Mart¨ªnez, de 72 a?os de edad, en el lavadero del concesionario de coches familiar, Novocar, que el propio sospechoso dirig¨ªa.
A diferencia del fiscal, el abogado Ruiz Marco s¨ª alude al m¨®vil econ¨®mico del crimen que desgrana profusamente el sumario judicial. Recuerda as¨ª la ¡°feroz batalla¡± que manten¨ªan L¨®pez, junto a su esposa, Eva Fuensanta, y las dos hermanas de esta con la matriarca del clan ¡°por el poder en las empresas y por el dinero¡± de la familia. Una ¡°animadversi¨®n¡± y unas ¡°presiones¡± de las que participaron tambi¨¦n los propios hijos del procesado, como el menor de ellos, que no dudaba en calificar a su abuela de ¡°falsa¡± y ¡°maldita zorra¡±.
El propio acusado se hab¨ªa mostrado en varias ocasiones ¡°agresivo¡± contra su suegra y lleg¨® a increparle en presencia de personas ajenas a la familia, a?ade el letrado. Mar¨ªa del Carmen Mart¨ªnez dej¨® constancia por escrito de esa situaci¨®n angustiosa un mes antes de ser asesinada. ¡°?Qu¨¦ m¨¢s da?o nos pueden hacer?¡±, se preguntaba.
El conflicto familiar alcanz¨® su ¡°punto cr¨ªtico¡± el 19 de septiembre de 2016, durante una junta general de socios en la que Mart¨ªnez destituy¨® a su hija Fuensanta, esposa de L¨®pez, de sus cargos en la firma Samar Internacional SL, con una facturaci¨®n superior a los 239 millones de euros ese ejercicio.
Ah¨ª radica, a juicio del abogado de Sala, el punto de inflexi¨®n que llev¨® al presunto asesino a urdir el asesinato. Desde ese momento, ¡°a ojos del acusado¡±, la mujer se convierte ¡°en el obst¨¢culo que lo separa de la fortuna de su mujer¡±.
Su muerte permite que Eva Fuensanta Mart¨ªnez, ¡°aliada con sus dos hermanas¡±, pueda tomar ¡°el control inmediato de la Compa?¨ªa Espa?ola de Resinas SL¡±, cuyo patrimonio solo en inmuebles supera los 30 millones de euros.
L¨®pez tambi¨¦n ve¨ªa peligrar su cargo como administrador ¨²nico de Novocar. Es en ese contexto, siempre seg¨²n esta acusaci¨®n, que el procesado decide ¡°eliminar de una vez para siempre esos peligros y vengar los (supuestos) agravios a su mujer¡± y asesinar a su suegra con un plan previo.
La considera una ¡°d¨¦spota¡± y una ¡°taca?a¡±, una persona con ¡°actitud clasista¡± que hac¨ªa las cosas ¡°sin contar con nadie y con altivez¡±. Y traza su plan. El 9 de diciembre de hace dos a?os consigue atraerla a las instalaciones de Novocar con la excusa de devolverle el veh¨ªculo que hab¨ªa dejado para reparar.
A su llegada, sobre las 18,25 horas de ese d¨ªa, conduce a su suegra al lavadero, que se convierte en una ¡°ratonera¡±, en palabras del abogado, donde le dispara dos veces a la cabeza. La v¨ªctima logra sobrevivir casi media hora, pero acaba pereciendo en torno a las 19 horas, unos minutos despu¨¦s de que un empleado del concesionario la encontrara, ya moribunda, junto a su coche.
El juzgado instructor, debe decidir en las pr¨®ximas semanas, al t¨¦rmino de una vistilla, si lleva al sospechoso ante un jurado popular en la Audiencia Provincial o archiva la causa, como pedir¨¢, previsiblemente, la defensa del presunto asesino.
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