El ¡®caso Nevenka¡¯ y otros que acabaron con renuncias pol¨ªticas por acoso laboral y sexual

El adi¨®s de Mireia Boya al secretariado nacional de la CUP por haber sufrido un "episodio de agresi¨®n psicol¨®gica continuada" por parte de un compa?ero no es la primera renuncia, por motivos similares, de una persona que ejerce la pol¨ªtica. En octubre pasado, Jos¨¦ Ram¨®n Blanco,?parlamentario de Podemos en Cantabria, dimiti¨® cuando el partido le abri¨® un expediente por acoso psicol¨®gico a dos compa?eras? ¡ªla diputada Ver¨®nica Ord¨®?ez y la l¨ªder de Podemos en Santander, Lidia Alegr¨ªa¡ª y a una trabajadora de la formaci¨®n. Blanco amag¨® con irse del Parlamento y pidi¨® disculpas a las tres afectadas. Apenas cuatro d¨ªas antes, otra parlamentaria, en esta ocasi¨®n la eurodiputada de Izquierda Unida Marina Albiol?dimiti¨® como portavoz europea de IU ante la "falta de respuesta" del partido a casos de trabajadores de la delegaci¨®n en Bruselas que denunciaron haber sufrido acoso laboral y f¨ªsico por parte de eurodiputados.

Un a?o antes, en octubre de 2017, el Parlamento Europeo aprovech¨® el debate p¨²blico generado a partir de los episodios de acoso, en este caso sexual, del productor de cine Harvey Weinstein?para alzar la voz sobre casos similares dentro de la Euroc¨¢mara. ¡°Hay informes que dan escalofr¨ªos sobre lo que ocurre en este Parlamento¡±, advirti¨® entonces la diputada alemana Terry Reintke, del grupo Los Verdes, durante un pleno en Estrasburgo. En aquel momento, medios de comunicaci¨®n hab¨ªan publicado?casos de abusos de eurodiputados hacia asistentes de la instituci¨®n.

En otros casos, las denuncias por acoso han ocupado un importante espacio medi¨¢tico para luego quedar archivadas por la justicia. As¨ª sucedi¨® con el exministro Federico Trillo, juzgado por acoso laboral a una exsecretaria de la Embajada en Londres, despedida de la delegaci¨®n. Un juez reconoci¨® que el cese laboral fue improcedente, pero absolvi¨® al pol¨ªtico popular del delito de acoso laboral. Otro caso sonado fue el de Elena Gonz¨¢lez-Mo?ux, diputada del PP de Madrid que present¨® una denuncia?"por coacciones, amenazas y acoso laboral" contra su?exjefe pol¨ªtico en la Asamblea de Madrid, el portavoz del PP Enrique Ossorio. Apenas tres meses despu¨¦s, la justicia archiv¨® el caso y?Gonz¨¢lez-Mo?ux y Ossorio hicieron las paces. La primera renunci¨® a recurrir el archivo de la demanda, mientras que el segundo desisti¨® de presentar?una querella por injurias y calumnias. Otras veces, el archivo de una causa es por la prescripci¨®n del delito, como sucedi¨® en 2012 con Miguel Reneses,?diputado de IU en la Asamblea de Madrid, se?alado por una compa?era por acoso sexual.?

La justicia tambi¨¦n ha condenado a pol¨ªticos, como sucedi¨® con el que fuera alcalde de Ponferrada, el popular Ismael ?lvarez, se?alado por la concejal de Hacienda, tambi¨¦n del PP,?Nevenka Fern¨¢ndez. El regidor fue condenado por abuso sexual en 2002 y el Tribunal?Superior de Justicia de Castilla y Le¨®n orden¨® el pago de una indemnizaci¨®n de m¨¢s de 18.000 euros. ?lvarez dimiti¨® tras la sentencia.?