Josu Ternera, de dirigir los a?os de plomo a anunciar la disoluci¨®n de ETA
El terrorista detenido jug¨® un papel esencial en la banda desde los ¨²ltimos a?os del franquismo y particip¨® en el atentado contra Carrero Blanco
Hace un a?o, el 3 de mayo de 2018, fue Josu Urrutikoetxea Bengoetxea, Josu Ternera, quien, en nombre de ETA, anunci¨® en un comunicado le¨ªdo por ¨¦l la disoluci¨®n de la banda terrorista. La elecci¨®n no fue casual. Josu Ternera (Miraballes, Bizkaia, 68 a?os) simboliza la historia de ETA desde el atentado contra el presidente del Gobierno franquista, Luis Carrero Blanco, en 1973, en el que ya particip¨®, hasta su final. El comunicado que Josu Ternera ley¨® expresaba el legado de ETA. Trataba de justificar su historia criminal al atribuirse la introducci¨®n del derecho de autodeterminaci¨®n en la agenda pol¨ªtica y recomendaba la defensa sin complejos de ese legado a la militancia que abandonaba la organizaci¨®n terrorista para integrarse en la vida pol¨ªtica. Su detenci¨®n en los Alpes franceses tiene un car¨¢cter m¨¢s simb¨®lico que otra cosa. En clave pol¨ªtica y social, ETA termin¨® el 20 de octubre de 2011 cuando ces¨® definitivamente el terrorismo. La detenci¨®n de Josu Ternera ahora, siete a?os y medio despu¨¦s del cese de la violencia y tras uno de su disoluci¨®n, va a aportar muy poco, por no decir nada, a las causas pendientes.
Ciertamente, hace un a?o, en el momento de su disoluci¨®n, ni ETA era sombra de lo que fue ni Josu Ternera representaba, con la banda terrorista en extinci¨®n, lo que hab¨ªa representado. Josu Ternera fue una figura capital en ETA. Fue captado y estuvo a la sombra de quien ejerci¨® como el principal l¨ªder de la rama militar ¡ªla organizaci¨®n se hab¨ªa escindido en otra facci¨®n denominada pol¨ªtico-militar¡ª?Jos¨¦ Miguel Be?aran Argala,?durante el franquismo hasta su asesinato por un grupo parapolicial en Francia el 20 de diciembre de 1978. Era el quinto aniversario del asesinato de Carrero Blanco, en el que participaron Argala y Ternera.
Fallecido Argala, Ternera se convirti¨® en responsable del aparato internacional de ETA, lo que le permiti¨® establecer mecanismos de colaboraci¨®n con las entonces florecientes organizaciones guerrilleras, especialmente palestinas y latinoamericanas. Tras la detenci¨®n en 1985 del principal dirigente de ETA a la muerte de Argala, Txomin Iturbe, se hizo cargo del aparato pol¨ªtico de la banda durante cuatro a?os, hasta enero de 1989, en que la polic¨ªa francesa le detuvo. Los a?os en que Josu Ternera estuvo en la direcci¨®n de ETA fueron los a?os de plomo, con la utilizaci¨®n de coches bomba que provocaron las matanzas m¨¢s sangrientas de su historia: 21 muertos en el Hipercor de Barcelona, en junio de 1987, y seis meses m¨¢s tarde, otros 11 fallecidos, entre ellos cinco ni?as de entre 3 y 12 a?os y un adolescente de 16 a?os, en el cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza. El recuerdo de este ¨²ltimo atentado es lo que ha dado nombre a la operaci¨®n de su arresto, Infancia Robada.
En 1996 qued¨® en libertad tras cumplir su condena en Francia y result¨® elegido parlamentario en las elecciones vascas de 1998 en la candidatura de Batasuna. Pero en 2002 huy¨® de Espa?a cuando la Audiencia Nacional le reclamaba por su participaci¨®n, en calidad de dirigente de ETA, en la masacre del cuartel de Zaragoza. Reapareci¨® en Perpi?¨¢n, junto con el entonces jefe pol¨ªtico de la banda, Mikel Antza, en una reuni¨®n con el l¨ªder de ERC y entonces vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluis Carod-Rovira, en enero de 2004. Un a?o despu¨¦s, en 2005, Inici¨® conversaciones en Ginebra y Oslo con el presidente del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Jes¨²s Eguiguren, con la pretensi¨®n de alcanzar, primero una tregua de ETA, y posteriormente, abrir un proceso de di¨¢logo con el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero para terminar con el terrorismo definitivamente.
En ese momento, la banda estaba ya muy debilitada. La detenci¨®n, en octubre de 2004, de Mikel Antza fue un golpe decisivo para la organizaci¨®n terrorista, que sufr¨ªa un deterioro progresivo. Pronto se vio que Josu Ternera tampoco ten¨ªa ya el poder que hab¨ªa tenido. En septiembre de 2006, fue relegado en la mesa de conversaciones entre el Gobierno y ETA por Javier L¨®pez Pe?a, Thierry, que dej¨® claro su papel de jefe m¨¢ximo.?
Los interlocutores gubernamentales, Jes¨²s Eguiguren y el exministro Javier Moscoso, coinciden en se?alar que Josu Ternera, consciente de la debilidad de ETA, quer¨ªa terminar con el terrorismo frente a la cerraz¨®n de Thierry, que le desautoriz¨® p¨²blicamente. Tras el fracaso del proceso de di¨¢logo y la ruptura de la tregua, Batasuna se enfrent¨® a la banda hasta conseguir el cese definitivo de su actividad armada en octubre de 2011. En ese momento, Josu Ternera reafirm¨® su apoyo al final del terrorismo y reapareci¨® en Oslo en 2013 en la comisi¨®n de ETA que, apoyada por el Centro Henri Dunant, intent¨® abrir un di¨¢logo con el Gobierno del PP para abordar el futuro de los presos etarras una vez logrado el cese definitivo del terrorismo. El Ejecutivo de Mariano Rajoy se neg¨® y Josu Ternera fue expulsado de Noruega y perseguido hasta su detenci¨®n este jueves, seis a?os despu¨¦s, en los Alpes franceses.
Ahora tendr¨¢ que responder ante la Justicia francesa que le persigue por haber huido ante sus requerimientos y ante la Audiencia Nacional espa?ola por su responsabilidad, como jefe de ETA, en una de las matanzas m¨¢s escalofriantes de la banda terrorista. Josu Ternera personifica la tragedia y el fracaso de parte de una generaci¨®n que apost¨® por hacer de la pol¨ªtica un dogma y anteponer sus objetivos a la vida de las personas. Probablemente, hoy ya era consciente de todo eso. Pero ha sido demasiado tarde para ¨¦l.
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