Proactiva Open Arms, la ONG que naci¨® de una empresa catalana de socorristas

Proactiva Open Arms, la ONG propietaria del buque que reclama frente al puerto italiano de Lampedusa desembarcar a un centenar de inmigrantes rescatados en altamar hace 17 d¨ªas, naci¨® en 2015 de una empresa de socorrismo, Pro-activa Serveis Aqu¨¤tics, con sede en Badalona (Barcelona). En 2015, la imagen del ni?o sirio Aylan, ahogado en un playa turca, como s¨ªmbolo de la?crisis humanitaria?llev¨® al?director de la empresa, ?scar Camps (Barcelona, 1963)?a dejar por un momento su trabajo en las costas espa?olas para viajar al mar Egeo. Camps escribi¨® a varias ONG para ofrecer su experiencia. Una, Sea Watch, respondi¨® y se plant¨® junto a un colega en Lesbos para rescatar a na¨²fragos.?

Al poco,?puso 15.000 euros de sus ahorros para un barco y fund¨® la organizaci¨®n con la intenci¨®n de proteger ¡°con su presencia en el mar¡± a quienes quer¨ªan llegar a Europa huyendo de ¡°conflictos b¨¦licos, persecuci¨®n o pobreza¡±. Las rutas de emigraci¨®n irregular desde Turqu¨ªa a las islas griegas hab¨ªan ido desplazando como las m¨¢s frecuentes a las del Mediterr¨¢neo central, que unen Libia a Italia. Cuando a¨²n no contaban con embarcaciones propias, se val¨ªan de las que dejaban abandonadas los refugiados en las playas para hacerse al mar a rescatar a n¨¢ufragos. En octubre de aquel a?o Open Arms particip¨® en el dispositivo de salvamento de 300 migrantes que hab¨ªan naufragado con el barco pesquero turco que los trasladaba frente a las costas griegas. Murieron 50 personas.

La ONG re¨²ne en torno a s¨ª a voluntarios que, aseguran, tienen que rotar cada 15 d¨ªas por el impacto ¡°f¨ªsico y emocional¡± de las situaciones que abordan. A ellos, en tierra, se suman psic¨®logos especializados en crisis para apoyar a los socorristas. Su labor les ha valido la Creu de Sant Jordi en 2018 y el premio del Comit¨¦ Espa?ol de Unicef.

En 2017 aumentan su actividad. Con el barco Golfo Azurro se internan en el Mediterr¨¢neo central. Navegan por frentes a las costas de Libia. A los socorristas se suman?patrones de barco y marineros profesionales en sus rescates.?Pero denuncian presiones y amenazas. Un nav¨ªo fletado por un movimiento de ultraderecha se hace a la mar para interferir en los rescates. Los guardacostas libios interceptan al barco dos veces en un mes. Obligan al?Golfo Azurro a alejarse, a pesar de estar en aguas internacionales, denuncia la ONG. Tambi¨¦n con los guardacostas libios, en 2018, Proactiva Open Arms sufre otro encontronazo.?

La relaci¨®n con los tribunales italianos se tensa en 2018. En marzo, el juez de instructor de Catania se incauta del barco y acusa a la ONG de favorecer la inmigraci¨®n irregular. Abre diligencias contra?la jefa de misi¨®n, Anabel Montes; el capit¨¢n, Marc Reig, y a un responsable de la organizaci¨®n.?El fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro, siembra la duda sobre las ONG de rescate. En unas declaraciones, afirma que algunas reciben financiaci¨®n de traficantes de personas. Un mes despu¨¦s, el buque es liberado. El barco prosigue sus operaciones de rescate en aguas cercanas a Libia y a?ade una base de operaciones en Motril (Granada), desde donde ha colaborado con Salvamento Mar¨ªtimo en varias tareas de rescate en el mar de Albor¨¢n.