La estrategia de PP y Vox complica la retirada de inmunidad a Puigdemont

Los rivales encarnizados a veces se convierten en los mejores aliados. Y para Carles Puigdemont y Toni Com¨ªn, sujetos desde el pasado jueves a una petici¨®n de la justicia espa?ola para levantar su inmunidad como eurodiputados, la mejor defensa incluye la estrategia de PP y Vox en el Parlamento Europeo. Las maniobras pol¨ªticas y judiciales de ambos grupos tras la llegada al esca?o de los dos dirigentes del proc¨¦s han soliviantado a otros eurodiputados cuyo voto puede ser esencial para que la inmunidad se levante o no. La estrategia de ambos partidos amenaza el suplicatorio, que debe aprobar la Euroc¨¢mara.

Los populares espa?oles han enconado los ¨¢nimos de su propia familia parlamentaria (el grupo popular europeo) y tambi¨¦n de los liberales (Renew) por haberse desmarcado de la presi¨®n que ejerci¨® el Parlamento Europeo la semana pasada para defender el Estado de derecho en Polonia y Hungr¨ªa. Pero el respaldo de conservadores y liberales ser¨¢ imprescindible para aprobar un levantamiento de inmunidad solicitado por el juez instructor del Supremo Pablo Llarena que debe pasar primero por la Comisi¨®n de Asuntos Jur¨ªdicos y despu¨¦s por el pleno del Parlamento, que tendr¨¢ la ¨²ltima palabra. Una tramitaci¨®n que se prev¨¦ pol¨¦mica y en la que se pelear¨¢ cada voto.

A esa renuncia del PP a respaldar el voto de la mayor¨ªa en un asunto sensible como la defensa del Estado de derecho se suman las pr¨¢cticas de Vox. Fuentes parlamentarias apuntan que la decisi¨®n de este partido de denunciar al Parlamento Europeo por haber reconocido como eurodiputados a Puigdemont y Com¨ªn podr¨ªa ser contraproducente. El l¨ªder de Vox, Santiago Abascal, se desplaz¨® hasta Estrasburgo el pasado martes para comunicar la denuncia. ¡°Mi mensaje es para los espa?oles, que est¨¢n siendo insultados por las instituciones europeas¡±, asegur¨®.

Entre los grupos partidarios de conceder el suplicatorio, como populares y socialistas, se teme que los reacios o contrarios (Verdes o Izquierda Unitaria) aprovechen el recurso de Vox para enmara?ar el proceso y aplazar un levantamiento de inmunidad.

Dilatar el proceso

Las escaramuzas en la comisi¨®n parlamentaria comenzaron ya la semana pasada, cuando algunos de los miembros contrarios a levantar esa inmunidad abogaron por solicitar informes previos. La t¨¢ctica para dilatar el proceso no prosper¨®, pero fuentes parlamentarias no descartan que se produzcan nuevos intentos.

El vicepresidente de esa comisi¨®n y eurodiputado socialista, Ib¨¢n Garc¨ªa Blanco, conf¨ªa en que, pese a todo, ¡°va a ser una tramitaci¨®n normal, como todos los suplicatorios, con lo cual puede resolverse en dos o tres meses¡±. El eurodiputado cree que la recomendaci¨®n de la comisi¨®n parlamentaria (donde populares, socialistas y liberales suman 15 de los 25 esca?os) ser¨¢ levantar la inmunidad, dado que el proceso contra Puigdemont y Com¨ªn no tiene relaci¨®n con su condici¨®n de europarlamentarios.

Otras fuentes son menos optimistas. Sobre todo desde que la delegaci¨®n espa?ola del PP, dirigida por Dolors Montserrat, ha acentuado su distanciamiento respecto de la corriente general del Parlamento ¡ªincluidos los populares europeos¡ª de mostrarse inflexibles con los ataques al Estado de derecho en Hungr¨ªa y Polonia.

Los eurodiputados espa?oles del PP votaron el jueves contra una resoluci¨®n que ped¨ªa una vigilancia m¨¢s estrecha sobre esos dos pa¨ªses. Y se alinearon con el voto, entre otros, de los conservadores h¨²ngaros y de los euroesc¨¦pticos polacos.

Esa ruptura tan flagrante acab¨® afectando al vicepresidente del grupo popular europeo, el espa?ol Esteban Gonz¨¢lez Pons, que era el encargado de marcar a todos los eurodiputados la decisi¨®n de votar a favor de endurecer la vigilancia. El pulgar hacia arriba de Gonz¨¢lez Pons fue seguido por la inmensa mayor¨ªa de los populares. Pero los espa?oles votaron en contra. Gonz¨¢lez Pons se abstuvo.

¡°Fue un error de libro¡±, lamentan fuentes socialistas. ¡°Ha dado la impresi¨®n al Parlamento de que en Espa?a hay comprensi¨®n hacia la deriva de Polonia y Hungr¨ªa, cuando es lo contrario¡±.

Fuentes populares reconocen: ¡°El voto del pasado jueves no nos ha granjeado muchos amigos¡±. Y admiten que la labor de convencer a las delegaciones de que voten el suplicatorio puede complicarse si se vincula lo ocurrido en Catalu?a y el grave deterioro pol¨ªtico y judicial que el Parlamento percibe en Polonia y Hungr¨ªa.

El posible v¨ªnculo ya lo esgrimi¨® en el debate del mi¨¦rcoles pasado el eurodiputado polaco Ryszard Czarnecki (del grupo ECR, en el que se sienta Vox). Czarnecki pregunt¨® a Gonz¨¢lez Pons su opini¨®n ¡°sobre el hecho de que Espa?a haya rechazado la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE en el caso de los diputados catalanes¡±, en alusi¨®n al mantenimiento en prisi¨®n de Oriol Junqueras tras el veredicto europeo que se?al¨® que el l¨ªder catal¨¢n deber¨ªa haber sido reconocido como eurodiputado.

¡°El Tribunal Supremo acat¨® la sentencia del tribunal europeo, hay una gran diferencia. El Supremo respeta el Estado de derecho¡±, le espet¨® Gonz¨¢lez Pons.